lunes, febrero 09, 2009

EL PODER DEL MOJITO CUBANO

Tomado de http://democristiano.wordpress.com


Por Yaxys D. Cires

El mojito cubano es una de las debilidades de los políticos que visitan la gran cárcel caribeña. De izquierdas, de derechas, del centro, no importa en qué lado de espectro político se encuentren, el mojito surte su efecto. Pocos se escapan.

¿Qué tendrá ese mojito? ¿Qué le pondrán sus preparadores que hace olvidar el sufrimiento del pueblo cubano?

El mojito, tan rico y placentero para ellos; “dame otro, dame otro…” susurró un conocido canciller de visita en La Habana y ni siquiera se inmutó cuando en su presencia un “talibán” comunista decía que los prisioneros de conciencia cubanos eran mercenarios del imperio. ¿Qué tendrá ese mojito?

Se lo tomó Cristina y ahora se lo tomará Bachelet. A la chilena se le ha olvidado de dónde viene. Que sufrió en carne propia el terror de una dictadura. ¿O es que para la doctora, la calidad del brindis depende del signo del dictador que lo ofrece? Ese es otro de los efectos del mojito. A ella no le sabrá a censura, no le olerá a cárcel y persecución, será a placer, a plenitud. ¿Hermandad socialista?

¿Qué tendrá ese mojito que cualquiera se lo toma sin saber que se está tomando su dignidad al ritmo de la guantanamera?
Por eso le recomiendo que cuando quiera un mojito asegúrese primero de que sea el auténtico mojito cubano.

1 Comments:

At 5:06 p. m., Anonymous Anónimo said...

Desgraciadamente, el mojito, o lo que representa, es mucho mas poderoso que la dignidad y el honor, los cuales son sumamente escasos, si es que todavía existen en el mundo de la realpolitik.

 

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