Alejandro Ríos: Nigromantes
"los cubanos somos hiperbólicos: y a los hombres que no tienen moral/ los acusamos de tenerla doble"
Versos del poeta Raúl Rivero
¨A mi regreso a La Habana y en concordancia con el párrafo anterior, le digo por este medio a la intelectualidad cubana, a los artistas, a los músicos y a los altos cargos del Estado, que no me susurren más al oído: "estoy de acuerdo contigo pero… imagínate!". Yo no estoy arrepentido de incinerarme solo en mi actitud, pero es triste y vergonzoso que haya un silencio cómplice tan funesto como tu manifestación, Edmundo. Estas dos conductas, una en Miami y otra en La Habana, increíblemente al final convergen en su propia contradicción.¨
Fragmento de la carta abierta del cantautor Pablo Milanés a Edmundo García. Miami, 29 de agosto de 2011
Tomado de http://www.elnuevoherald.com
Nigromantes
Por Alejandro Ríos
Una amiga escritora de Cuba que entra y sale de la isla a su antojo me envía cierto mensaje mediante otro conocido de Miami para que no cargue la mano con el actor Jorge Perugorría en mis columnas. Me manda a decir que Pichi, sobrenombre entre sus conocidos, es crítico de las inconsecuencias de aquel proceso.
Este incidente se parece a otro que tiene a Amaury Pérez como protagonista. El cantante y compositor viaja a Miami para asistir a un concierto de su alter ego, Barry Manilow, y me envía un mensaje donde me convoca a un encuentro de concordia y entendimiento mediante un amigo común que otras veces ha compartido, con cierta vergüenza, las diatribas que me ha dedicado el autor de Acuérdate de abril cuando ha sido blanco de mis observaciones.
Acepto la invitación de Amaury solo si se produce en mi casa y hasta el día de hoy espero la respuesta. Es de elogiar que en los últimos tiempos, luego de que dejara de salir al aire su manipulado y atorrante programa Con 2 que se quieran…, el cantante se haya alejado, convenientemente, de los medios esquivando los convites que han celebrado los cincuentenarios de las palabras del dictador a los intelectuales y el de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), respectivamente. El silencio es preferible a declararse, como hiciera hace algún tiempo que me imagino quisiera olvidar, hijo putativo del Castro más dañino y devastado por la falta de salud y la maldad.
He dicho en otra ocasión que tal vez seamos testigos del tiempo más deplorable de la clase intelectual y artística cubana orgánica de la isla. Perugorría, por ejemplo, se va para Santander, España, donde imparte unos cursos y se ufana en decir que los medios internacionales son tendenciosos cuando se trata de cubrir a Cuba y solo se ocupan del aspecto político, desestimando otras cosas “grandes y extraordinarias”. En su perorata también alude al ritornelo del cambio y mejoramiento del socialismo “más democrático y participativo”.
Es raro que un actor que debe su carrera a uno de los filmes más políticos y tendenciosos de la cinematografía cubana como lo fue Fresa y chocolate, abogue ahora por la despolitización de la cobertura periodística internacional.
"Los medios responden a intereses cuando hablan de Cuba", dijo y consideró que "para conocer un país hay que fijarse más en su cultura" que en los avatares políticos.
A no ser que esté leyendo poemas de Miguel Barnet, Nancy Morejón o Pablo Armando Fernández, Perugorría debía saber que casi todo el cine realizado por jóvenes en Cuba, una parte de la literatura y el teatro, así como la otrora defenestrada artes plásticas hace inimaginables malabares para criticar los males de la tiranía en sus más diversas mutaciones. Ni hablar de todo el fenómeno cultural alternativo que él se empeña en ignorar en sus declaraciones, donde figuran los blogueros, los intérpretes de hip hop, el rock de Gorki Aguila, los performances de Omni Zona Franca y hasta algunos reguetoneros, entre otros de feroz y eficaz marginalidad.
Tal vez como dice mi amiga, en total discreción, tanto el cantante como el actor han contribuido al mejoramiento de la vida de alguien en complicaciones políticas haciendo uso de su influencia como figuras públicas.
Hasta ahora, no obstante, insisten en desconocer intrépidos gestos como los que protagonizaran recientemente valientes mujeres cubanas en la escalinata del Capitolio habanero abogando por la libertad y el fin del castrismo, al mismo tiempo que en alarde de nigromancia aficionada abogan por resucitar un sistema sin la oportunidad de la supervivencia.
ALGUNOS COMENTARIOS DEJADOS
Nausea ha dejado un nuevo comentario en su entrada "Alejandro Ríos: Nigromantes":
Se me ocurre algo deprimente: en general, a pesar de brillantes excepciones, lo usual o "normal" en Cuba es una penosa plasta, y eso no es nada nuevo.
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NoMeDigas ha dejado un nuevo comentario en su entrada "Alejandro Ríos: Nigromantes":
"Los medios responden a intereses cuando hablan de Cuba." Los medios responden a intereses cuando hablan de lo que sea, igual que hace Perugorría.
Lo importante es que haya un sistema democrático donde la libre expresión se practique y que cada cual: desde el más afamado comunicador social o diario hasta un simple ciudadano, pueda expresar sus opiniones en algunos de los medios existentes. Una opinión puede no ser aprobada por una mesa de redacción o por los propietarios de un medio de comunicación masiva por ser contraria a sus intereses en determinado momento, pero puede ser aprobado por otro medio, o simplemente expresada y difundida por un blog personal o de alguna organización que desee difundirla. Con el advenimiento de la Internet y el avance tecnológico, la libertad de expresión ha alcanzado niveles y posibilidades inimaginables para ser ejercida; hasta para los Estados totalitarios ( para no hablar de un consejo de redacción o propietarios de los medios) le es hoy en día muy difícil conformar estados de opinión u ocultar información impunemente.
Anónimo ha dejado un nuevo comentario en su entrada "Alejandro Ríos: Nigromantes":
Es tan gracioso Perugorria. Si, los medios deberian de hablar mas de la danza en Cuba, de la flora, del alto nivel de vida de la poblacion, de la cocina cubana, de la moda cubana, de esa educacion que tienen los cubanos. Con la Alemania nazi pasa lo mismo. Los medios solo saben mostrar esas imagenes pavorosas de los campos de concentracion, solo hablan de Auschwitz, de las camaras de gases, de esos ninos enflaquecidos con sus uniformitos de presos y sus caritas de muerte. Nadie nos cuenta de las pasarelas de moda a las que asistian los jovenes de entonces, ni de las costumbres y la cultura de la poblacion, ni de las fiestas tradicionales. Es que los medios se empenan en mostrarnos los horrores y los muchachos como Perugorria no entienden por que.
MAG
3 Comments:
Se me ocurre algo deprimente: en general, a pesar de brillantes excepciones, lo usual o "normal" en Cuba es una penosa plasta, y eso no es nada nuevo.
"Los medios responden a intereses cuando hablan de Cuba." Los medios responden a intereses cuando hablan de lo que sea, igual que hace Perugorría.
Es tan gracioso Perugorria. Si, los medios deberian de hablar mas de la danza en Cuba, de la flora, del alto nivel de vida de la poblacion, de la cocina cubana, de la moda cubana, de esa educacion que tienen los cubanos. Con la Alemania nazi pasa lo mismo. Los medios solo saben mostrar esas imagenes pavorosas de los campos de concentracion, solo hablan de Auschwitz, de las camaras de gases, de esos ninos enflaquecidos con sus uniformitos de presos y sus caritas de muerte. Nadie nos cuenta de las pasarelas de moda a las que asistian los jovenes de entonces, ni de las costumbres y la cultura de la poblacion, ni de las fiestas tradicionales. Es que los medios se empenan en mostrarnos los horrores y los muchachos como Perugorria no entienden por que.
MAG
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