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sábado, diciembre 07, 2013

Roberto A. Solera contesta a Yndamiro Restano: EL CAMINO AL INFIERNO ESTÁ EMPEDRADO DE BUENAS INTENCIONES

EL CAMINO AL INFIERNO ESTÁ EMPEDRADO DE BUENAS INTENCIONES

 
Por Roberto A. Solera
Miami, 6 de diciembre de 2013.

Los poetas son soñadores que sueñan despiertos mientras tejen sus redes sonoras de serventesios, cuartetas, décimas, y toda suerte de juegos malabares donde las palabras cobran sonoridad y hacen a muchos corazones suspirar, reír, llorar y desear haber sido ellos los autores de tanta belleza donde sentimientos dulces, buenos, románticos surcan el éter o son pergeñados en papel y tinta.

Por su parte los políticos, hombres con los pies en la tierra, juegan al arte del toma y daca y tejen redes de complicidad donde unos y otros, en la aventura de dar y ceder, hacen alianzas y tratan de sacar el mayor partido posible a sus fortalezas y aprovechar las debilidades de sus rivales. Único fin, dar lo menos posible y lograr lo máximo en su camino a la victoria propia y a la derrota de sus rivales.

Los poetas hacen poesías. Los políticos hacen…¡política! Unos y otros tienen un limitado espacio donde pueden moverse en la consecución de sus fines y quedan mal parados si intentan…los políticos hacer poesías o los poetas hacer política.

El poeta cubano Indamiro Restano hace poesía pero la poesía no hace política. Bordea el precipicio del colaboracionismo con lo que dice de Raúl Castro" "presidente de todos los cubanos".

Que nos incorporemos al club de los tiranos y asesinos es igual a rendirse y darle la razón a éstos. En una palabra "if you cannot lick them, join them"! en buen romance, si no los puedes vencer úneteles. Y añado: aguanta como un condenado aguanta su condena. Me niego rotundamente. ¡Más vale perder la Patria que perder la Libertad en una hipotética búsqueda de....!!

Añade Restano: “Curiosamente nadie habla del pueblo de Cuba. El que creyó que sobrevenía la Revolución Martiana que Cuba necesitaba. El que alfabetizó en las montañas a campesinos olvidados. El que cruzó los mares y entregó la vida de sus mejores hijos. El que creyó y fue engañado por la demagogia de un liderazgo que luchaba a toda costa por el poder mientras que la mayoría de los revolucionarios luchaban por la libertad. Porque ese es el meollo de la cuestión, en Cuba como en tantas otras revoluciones: Unos luchan por el poder y otros lo hacen por la libertad”.

Acepto lo dicho menos “el que cruzó los mares…”. La realidad es que gran parte de los “cruzados” marxistas o fidelistas lo hicieron, unos por obligación -–pues eran citados al Comité Militar del Servicio Militar General, donde no tuvieron los “pantalones” de decir “No”, o creyeron era una aventura para pasear a otros lares y conseguir ropa y prebendas -–al regresar— como una vivienda digna que no poseían.

Se equivocaron al ciento por ciento. Algunos dejaron brazos o piernas y otros se sumaron a los miles de muertos no declarados por el Gobierno de “Fidel fidelísimo”.

Eso no puede igualarse a los que al principio, por razones, equivocadas o no, fueron a combatir -–creían ellos— por la Libertad, que como cubanos ellos creían tener. Crasa equivación, pero al menos iban por voluntad propia y no obligados.

Añade Indamiro: “Hombres íntegros de la cabeza al cielo, que parecen regar rosas y comprensión, a su paso como es el caso de Bernardo Benes, han demostrado que la buena voluntad puede más que el bicho retorcido del odio y del resentimiento”.

“Not so fast” Indamiro! No puede reducirse a bonitas palabras la presunta obra de Benes, pues este solo fue la cabeza visible donde el Gobierno americano marcaba las cartas y Fidel Castro, cómo cómplice, las jugaba. Habría que in extenso explicar todo el proceso donde, sin duda, muchos lograron salir de los dos Infiernos (el de las cárceles y el de Cuba) tras haber pagado con creces sus “delitos”, reducidos a acciones en favor de la Libertad.

No dudo de la buena voluntad --alguna ha de haber tenido Benes—sino del papel como factotum que le da Indamiro en su artículo.

Continúa Indamiro: “Raúl Castro debe proclamarse presidente de todos los cubanos”.
Jamás se ha expresado en Cuba y en el Exilio, mas insultante consigna. Pues, ¿quién lo eligió? ¿A quién representa Castro II?

Indamiro, hay que tener mucho cuidado con lo que se dice, pues tu aseveración bordea la traición total y es muestra del mayor colaboracionismo jamás visto.

Sí, Cuba para todos los cubanos, de adentro y de afuera, pero no con los Tiranos al mando. Yo por lo menos me niego a aceptarlo, es más ni siquiera a discutirlo”. Robert A. Solera

Robert A. Solera es autor de "Cuba: Viaje al Pasado"; "Cuba en el Recuerdo"; "En el Jardín de Mis Recuerdos" y "Cuba, la República de Generales y Doctores". Es editor de Cubaenelmundo.com
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Post de Baracutey Cubano el 10 de julio de 2007



Nota del blogguista.
Para leer sobre la presentación del libro en español puede consultar: http://www.diariolasamericas.com/news.php?nid=29207&pag=1

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Correo del Dr. Antonio de la Cova

A todos:
Hace dos años, le envié la siguiente contestación al Dr. Bernardo Benes a su mensaje no solicitado, como el que me envía ahora. Este promotor del "diálogo" con el dictador Fidel Castro le faltó la moral y el valor para poder responder a mis alegatos históricos y documentados.

Ahora parece que ha pagado de su propio bolsillo para que le publiquen su novela semi-biografía en español. El libro sigue siendo una revisión tergiversada de los verdaderos eventos, como señalo en mi respuesta. En el futuro, cuando haya un cambio de régimen en Cuba y se abran los archivos del gobierno a los investigadores, y cuando el gobierno norteamericano declasifique la documentación confidencial de la administración Carter, se conocerá el verdadero papelazo que realizó el Dr. Benes durante el mal llamado y fracasado "diálogo" hace treinta años.
Continuaré poniendo en el Internet más documentos, artículos, y fotos relacionados a la participación del Dr. Benes y otros dialogueros en dichos eventos para presentar la perspectiva honesta.

http://latinamericanstudies.org/expatriates.htm

Dr. Antonio de la Cova

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3 May 2005 18:58:43 -0500

Subject: Respuesta al dialoguero Bernardo Benes
To: BenesB@aol.com

Dr. Bernardo Benes
Miami Beach, Fla.

He recibido su absurdo y maquiavélico mensaje, distorcionando la verdad histórica para justificar su papelón en el mal llamado "diálogo"
con el dictador Fidel Castro en 1978. Ud. responde a un correo electrónico que envié a un grupo de activistas cubanos, sin dirigirme a Ud. o mencionar su nombre, en el cual incluí documentos y artículos de periódicos referentes al "diálogo."
http://www.latinamericanstudies.org/expatriates.htm

Ud. alega que diseminar dicha información pública, después de veintisiete años, es una "osadía," "venganza," intento de "amedrentar," promover una "cacería de brujas," y "pérfida información."

Aunque Ud. dice estar "muy, pero muy orgulloso" de aquel "diálogo," ahora rehuye debatir mi perspectiva y me advierte primero que no es necesario que le conteste y al concluir su mensaje me afirma "No voy a establecer una polémica con Usted, así que le sugiero que no me responda porque
no le voy a contestar. Vale." Esto demuestra que Ud. se ha intoxicado con el pensamiento totalitario castrista y reconoce que no tiene argumentos fehacientes para sustentar sus alegatos. Es una ironía que el promotor del "dialogo" castrista ahora rehuye entablar un diálogo académico. Es obvio que Ud., al igual que Fidel Castro, le tiene pánico a la información histórica divulgada por el Internet.

Su verdadera intención maquiavélica es transparente. No solamente se comunica conmigo, sino que hizo el esfuerzo de buscar en el Internet el nombre y la dirección electrónica del director de programa de estudios para quien trabajo, y le envió copia de su airada queja, presentándose como una víctima de un abuso de la libe
rtad académica. Si creyó que eso me iba a causar algún conflicto, volvió a equivocarse, igual que en 1978, cuando pensó que al regresar de su visita con Castro sería recibido como un "héroe" en el exilio. En esta universidad sí se respetan todos los puntos de vista y mi página electrónica en el Internet incluye hasta artículos de la prensa propagandística castrista. Esta no es la Universidad de La Habana, donde no existe la libertad de expresión y los estudiantes son coaccionados.
Ud. falsifica la verdad cuando dice que los llamados "dialogueros" fueron quienes lograron "Liberar a 3,600 presos políticos en las cárceles de Cuba" y "haber logrado la reunificación temporal de la familia cubana." Ud. debe saber que desde que la administración del presidente Nixon comenzó reuniones secretas con
el régimen castrista en julio de 1974, cuan
do su emisario Pat Holt viajó a La Habana, el Departamento de Estado norteamericano siempre exigió que Castro liberara a TODOS los presos políticos y que permitiera la reunificación familiar antes de resumir relaciones diplomáticas y económicas con Cuba. Ud. no figuró en ese primer intento cuatro años antes del "diálogo."

Otra reunión secreta ocurrió el 11 de enero de 1975 en Nueva York entre el asistente de Henry Kissinger, Lawrence Eagleburger, y Ramón Sánchez-Parodi. Eagleburger entregó a Sánchez-Parodi un memorándum del Departamento de Estado, pidiendo a Cuba, entre varias cosas, la reafirmación del entendimiento Kennedy- Khruschev; mejorar la situación de los derecho
s humanos; la libertad de norteamericanos presos en Cuba; suavizar con los presos políticos cubanos; y permitir que los cubanos exiliados visiten sus familiares en la isla. Ud. tampoco participó en dicha reunión, y según su propia admisión, no tuvo contacto con funcionarios castristas hasta que viajó a Panamá el 21 de agosto de 1977.
( De izquierda a derecha, Jorge S. Villalba, Ramón Mestre y Bernardo Benes. en la presentación del libro, que fue hecha por e
l presidente de la institución “Brothers and Sisters for Ever”, Ramón Mestre, él mismo uno de los liberados en aquella ocasión hace cerca de 30 años. (Foto Tony Joaquin; texto tomado del Diario Las Américas )
El acercamiento diplomático entre Estados Unidos y Cuba quedó aplazado por dos años debido a que Castro envió sus tropas al África. Castro decidió permitir la reunificación familiar que exigía el gobierno norteamericano debido a que necesitaba divisas urgentemente para levantar la maltrecha economía cubana. Según las memorias de José Luis Llovio, "Insider: My Hidden Life as a Revolutionary in Cuba," página 352, a principios de 1978, Llovio vio un reporte económico secreto de Comité
Estatal de Finanzas (CEF), que señalaba que Cuba "podía esperar pronto una infusión de entre $50 millones y $60 millones en divisas. . . Fidel iba a suplir el dinero de los bolsillos de miles de cubanos exiliados quienes serían bienvenidos de regreso a visitar la Patria."

En mayo de 1978, funcionarios de la administración del presidente Jimmy Carter comenzaron lo que serían ocho reuniones diplomáticas secretas con oficiales castristas, que duraron hasta septiembre de 1980. A la primera reunión asistió una delegación de diplomáticos estadounidenses, encabezada por David Newsom y David Aaron, y por la parte cubana José Luis Padrón González y Tony de la Guardia. Funcionarios de la administración Carter ha señalado que todas las negociaciones entre Cuba y Estados Unidos se llevaron a cabo por sus diplomáticos y que Ud. estuvo en la periferia de estos eventos como una quinta rueda. El jefe de la Sección de Intereses de EE.UU. en La Habana, el apologista castrista Wayne S. Smith, en su libro "The Closest of Enemies," páginas 146-147, lo describe a Ud. como un simple mensajero de recados entre La Habana y Washington. Su papel como tal se reduce a un solo párrafo de dicho libro. Robert A. Pastor, el director de asuntos para América Latina y el Caribe del Consejo de Seguridad Nacional del Presidente Carter, quien participó en las negociaciones secretas con Cuba, lo consideró a Ud. tan insignificante, que ni lo mencionó en sus memorias "Whirlpool: U.S. Foreign Policy Toward Latin Amer
ica and the Caribbean."

En julio de 1978, cuatro meses antes de que los dialogueros viajaran a La Habana, el Departamento de Estado norteamericano publicó en su documento GIST los cinco puntos que Cuba tenía que cumplir antes de reanudar las relaciones diplomáticas y económicas. Estos eran:
1. Libertad de todos los presos políticos estadounidenses y repatriación de otros ciudadanos norteamericanos.
2. Libertad de los presos políticos cubanos, miles de los cuales han sido encarcelados por años.
3. Reunificación de las familias cubanas divididas.
4. La salida de las fuerzas militares cubanas de Africa, porque creemos que los problemas Africanos deben ser resueltos por los Africanos.
5. Compensación a negocios y ciudadanos norteamericanos cuya propiedad fue tomada por el gobierno cubano. http://www.latinamericanstudies.org/us-cuba/GIST-1978.pdf

Wayne S. Smith admitió en sus memorias que durante una reunión diplomática secreta con funcionarios castristas en Cuernavaca, Mexico, en agosto de 1978, Castro acordó liberar a 3,600 presos políticos, permitir que ciudadanos norteamericanos
en Cuba salieran de la isla con su familiares, y permitir las visitas de familias en el exilio para la reunificación familiar. Ud. no participó en dicha reunión, aunque ya estaba en comunicación con el dictador Castro, con quien Ud. estrechó lazos de amistad tras regalarle un par de botas Johnson & Murphy, valoradas en $650.

El régimen castrista trató de aparentar que no estaba negociando directamente con el gobierno norteamericano y crearon la pantalla del "diálogo" con "la comunidad en el exterior." Ud. se prestó a ser un instrumento de esa patraña, al igual que diez años antes, el gobierno norteamericano manipuló a José Elías de la Torriente y luego lo abandonaron después del ataque comando a Boca de Samá. Ud. debe recordar esto, ya que fue uno de los miembros del comité recaudador del Plan Torriente, cuyos fondos se emplearon para dicho ataque, que el régimen castrista aún denuncia como un "acto terrorista."http://www.latinamericanstudies.org/delatorriente.htm


Ud. se vuelve a equivocar al pensar que no he leído el libro del Dr. Levine "Secret Missions to Cuba." También tengo copia de las memorias que Ud. escribió y donó a la biblioteca presidencial de Jimmy Carter, y las he incorporado a mi página electrónica. http://www.latinamericanstudies.org/dialogue/Benes-memorias.pdf

Tengo docenas de otros artículos de periódicos y documentos sobre el llamado "diálogo" que pronto incorporaré al Internet para conocimiento público. S
oy profesor universitario de historia, graduado con un doctorado en historia de la Universidad de West Virginia en 1994 y autor de un libro de historia publicado por una prensa universitaria.http://www.latinamericanstudies.org/gonzales-reviews.htm

Con dicha prepar
ación he analizado minuciosamente "Secret Missions to Cuba." Es un libro que no hubiera sido aceptado como tesis doctoral en ninguna universidad norteamericana por su predisposición, errores factuales, carencia de documentos oficiales de los gobiernos de EE.UU. y Cuba, la gran cantidad de fuentes parcializadas, declaraciones anónimas y nombres omitidos a propósito, y por citar fuentes sin credibilidad del Internet, todo lo cual demuestra una pésima investigación histórica.

La obra carece de bibliografía y está basada mayormente en la documentación
que Ud. le proveyó al autor, citada como "Bernardo Benes collection," "Benes papers," y "Benes clipping file." El autor menciona que lo entrevistó a Ud. en veintitrés (23) diferentes ocasiones entre el 6 de julio de 2000 y el 10 de marzo de 2001. También señala que Ud. le dio otras seis declaraciones y le envió cinco correos electrónicos. Es evidente que Ud. tuvo una gran influencia en el proceso de redactar este libro. Levine usa mayormente como referencia los libros de Wayne S. Smith, Robert A. Pastor, María de los Angeles Torres, Damián J. Fernández, Jane Franklin, Louis A. Pérez, Lourdes Casal, Miguel González-Pando, María Cristina Herrera, Guillermo Grenier, Max J. Castro, y Félix Masud-Piloto, todos activistas de levantar el embargo a Cuba. Algunos de ellos fueron participantes del "diálogo" y militantes de grupos castristas como la Brigada A. Maceo y la revista castrista "Areito." La demás referencias del libro son extremadamente flojas o parcializadas, como el gran exceso citar noventa y ocho (98) veces los artículos del Miami Herald.

( Dra. María Cristina Herrera )


Entre las numerosas páginas del Internet citadas, la mayoría son parcializadas a favor del gobierno cubano, incluyendo la de Cambio Cubano de Eloy Gutiérrez Menoyo (ya desaparecida del Internet) y la de J. A. Sierra http://www.historyofcuba.com donde Sierra se describe como un fotógrafo y escritor "freelance," sin credenciales académicos. Dicha fuente es inaceptable hasta en una asignatura de primer año universitario. Sin embargo, el Dr. Levine la cita con toda credibilidad.

No voy a enumerar la cantidad de errores factuales de "Secret Missions to
Cuba," porque sería muy largo, pero sí voy a señalar donde dice en la página 296, nota 56, que tres de los discursos radiales del Rev. Manuel Espinosa fueron transcritos e impresos por el Miami Radio Monitoring Service, cuando en realidad fueron once. http://www.latinamericanstudies.org/espinosa.htm . En la página 300, nota 3, Levine se equivoca al decir que Raúl Martínez Ararás "era veterano del ataque al cuartel Moncada." Martínez Ararás dirigió el ataque a las barracas de la Guardia Rural en Bayamo el 26 de julio de 1953.

Es curioso que el Dr. Levine no mencionó el liderazgo que Ud. tuvo en el Plan Torriente, lo cual aparece en el Miami Herald del 24 de agosto de 1970. Levine también omitió de su libro el hecho de que mientras Ud. era vicepresidente del Continental National Bank y el dialoguero castrista Charles Dascal presidía dicha institución financiera, el banco fue investigado por el Departamento del Tesoro norteamericano por lavar más de $32 millones del narcotráfico nternacional (Miami Herald, 6 de junio de 1980, "Banker Is Proved in Flow of Drug Cash," "Do Dade Banks Launder Drug Profits?" y "Continental National Often Controversial.") El Continental National Bank encabezaba la lista de los bancos de Miami con $95 mi
llones en dépositos de narcodólares ("Millions in Suspected Drug Cash Flow Through Banks in Miami," Miami Herald, 5 de junio de 1980). El escándalo llegó a tales proporciones, que Ud. fue amonestado en un editorial del Miami Herald el 9 de junio de 1980, que dice: "Continental Vice Chairman Bernardo Benes is the one who told NBC News last week that 'it's not really up to bankers' to police drug-cash transactions. Well, if a prominent bank official isn’t responsible for keeping his own institution’s skirts
clean, just who is?"

Como resultado de estas y otras omisiones, "Secret Missions to Cuba" es una hagiografía, donde Ud. aparece como un "patriota" abnegado, merecedor de respeto, simpatía, lástima, y comprensión. Sin embargo, es obvio que Ud. utilizó el libro para calumniar y desbarrar contra todos sus enemigos políticos en el exilio. Eso deja mucho que decir de Ud. personalmente y de su amigo el Dr. Levine como historiador serio. Por eso, dicha obra parcializada y carente de serieda
d, no fue publicada por una prestigiosa prensa universitaria y el autor tuvo que acudir a una prensa privada. No me sorprendería si Ud. ayudó con los gastos de publicación.
El Dr. Levine y Ud. emplean memoria selectiva para ofrecer una versión revisionista de la verdadera historia y consecuencias del llamado "diálogo." A pesar que el dictador Castro permitió la salida de supuestamente 3,600 presos políticos de Cuba, la mayoría de ellos ya estaban en la calle. Quedaron en presidio muchos más y ha continuado hasta el presente encarcelando a otros. Wayne Smith relata en su libro, "The Closest of Enemies," página 158, que de los 3,600 presos, "Only about a third were still behind bars." Más de 600 de ellos eran "boteros," presos por tratar de huir de Cuba en bote. No olvide que cuando Ud. estaba en el apogeo del "diálogo," 138 presos
políticos cubanos con largas condenas enviaron una carta pública desde presidio rechazando el llamado "diálogo" como una "engañosa maniobra." El documento reafirma en parte: "Repudiamos el diálogo entre el gobierno de Castro y supuestos representantes del exilio cubano" y concluyeron "No negociamos nuestra libertad porque no negociamos nuestros principios." Uno de los firmantes, Mario Chanes de Armas, preso desde 1961, no fue puesto en libertad hasta que terminó su condena de 30 años en 1991. Entre los que también rubricaron el documento aparecen Ramón Grau Alsina, Huber Matos, Andrés Vargas Gómez, Eusebio Peñalver, Luis Zúñiga, José Pujals Mederos, Angel d’Fana, y Tomás Regalado Molina, quienes no cambiaron su negativa opinión respecto a Ud. y el llamado "diálogo." El documento fue publicado en el Diario las Américas del 22 de noviembre de 1978. http://www.latinamericanstudies.org/dialogue/opuestos-dialogo.htm

Seis meses después de concluir el "diálogo," más de cien organizaciones y dirigentes del exilio cubano firmaron una declaración pública, que apareció en la prime
ra plana del Diario las Américas, del 23 de mayo de 1979, que en parte dice: "1-Que el titulado diálogo con Fidel Castro ha demonstrado ser, como se previó, improcedente y nocivo. . . 2- Que quienes intervinieron en dicho 'diálogo' no tenían, ni tienen representatividad alguna. Fueron a Cuba por sí y ante sí, seleccionados por Castro, para avalar con sus firmas planes de penetración castrista y corear en el exilio lemas y consignas útiles únicamente a los intereses políticos del gobierno comunista. 3- Que los objetivos (fachada) del 'diálogo'; libertad de los presos políticos y reunificación de la familia cubana no sólo no han sido logrados sino que se han convertido en nuevas burlas y frustraciones. La liberación de los presos políticos se ha reducido a la caprichosa selección de algunos prisioneros, postergándose a los hombres y mujeres cuya edad, término de prisión, estado de salud y postura histórica, reclaman la inmediata libertad. Y la reunificación de la familia cubana no es más que un ruin comercio de saqueo a los exiliados con cuyos sentimientos han jugado mercaderes inescrupulosos para lucro personal y para servir necesidades perentorias de la dictadura castrista." El ex preso político Tony Cuesta, dirigiendo este esfuerzo, convocó un acto público, donde lo denunció a Ud. y a los que comerciaban con el "diálogo." http://www.latinamericanstudies.org/dialogue/denuncia-dialogo.htm

El régimen castrista admitió públicamente que habían seleccionado cuidadosamente a todos los participantes del diálogo.http://www.latinamericanstudies.org/dialogue/dialogue-leaders.htm
Es de conocimiento público que algunos dialogueros lucraron con el sufrimie
nto de las familias cubanas divididas creando agencias de viajes y envíos a Cuba. Dichas empresas cobraron y siguen cobrando exorbitantes precios por los viajes, por mandar envíos, y por el cambio de divisas. El abuso, la arrogancia, y la explotación llegó a tal extremo, que a dos de estos mercaderes del dolor, Carlos Muñiz Varela y Eulalio José Negrín, les costó la vida en 1979. El régimen castrista los declaró "héroes" de la revolución. http://www.latinamericanstudies.org/dialogue/negrin.pdf

Otros dialogueros aspiraron a puestos con el gobierno castrista. En 1979, la profesora María Cristina Herrera del Miami-Dade College invitó al profesor Juan Clark que viajara a Cuba, lo cual él rechazó. Herrera le dijo a Clark que la
iban a nombrar "la directora del turismo profesional a Cuba." Esa y otras aspiraciones quedaron frustradas cuando miembros del Comité de los 75 comenzaron a pelear entre si por el repartimiento de prebendas.
El diálogo también fue denunciado como un frente de espionaje castrista por el agente de inteligencia de la policía de Miami, Sergio Piñón, quien testificó ante el congreso en Washington en 1982 que por lo menos cinco miembros del Comité de los 75 eran espías castristas.http://www.latinamericanstudies.org/dialogue/Dialogo-DGI.pdf
El capitán de la Dirección General de Inteligencia (DGI) Jesús Pérez Méndez, quien desertó en julio de 1983, declaró a las autoridades norteamericanas que las participantes del "diálogo" Lourdes Casal y Marifeli Pérez-Stable, trabajaban para la DGI. Pérez-Stable, quien "sustituyó a Casal," era "controlada por la DGI," según Pérez Méndez. El desertor dijo que Isidro Gómez y Jesús Arboleya Cervera, ambos del ICAP y de la DGI, pusieron a Pérez- Stable al mando del Círculo de Cultu
ra Cubana (CCC) y que sus planes anuales se los preparaba la DGI y el ICAP. Pérez-Stable recibió $100 por cada turista que viajaba a Cuba con el CCC.

( Dra. Marifeli Pérez Stable )
Otro dirigente del "diálogo," José Napoleón Vilaboa, auto-titulado "Padre del Mariel," admitió en 1989 que había sido teniente coronel de la DGI. http://www.latinamericanstudies.org/espionage/vilaboa.htm
El Reverendo Manuel Espinosa, un líder del Comité de los 75, que en 1980 se arrepintió públicamente y denunció el diálogo como un frente de espionaje castrista. http://www.latinamericanstudies.org/espinosa/dialogue-spies.htm Espinosa acusó públicamente a Ud. y a Dascal "de ser los cerebros del plan económico de Castro para esquilmar al exilio." Fidel Castro previamente había calificado a Espinosa como "un hombre serio." Espinosa añadió que el Continental National Bank que ustedes dirigían era "el centro de espionaje económico más grande que tiene Fidel Castro montado en Miami." El reverendo también dijo que Ud. había lucrado con el proceso del diálogo a través de negocios con empresas del gobierno cubano. ("Continúa Espinosa Denunciando la Red de Espionaje Castrista," Diario las Américas, 14 de febrero de 1980 y "Espinosa Calls Bank a Cuban 'Center of Economic Spying,'" Miami Herald, 13 de febrero de 1980). http://www.latinamericanstudies.org/espinosa/bank-espionage.htm Aunque Ud. negó las acusaciones ante la prensa, no se atrevió a demandar a Espinosa por difamación, como hicieron otros dialogueros. Como abogado, Ud. bien sabe que eso hubiera resultado en una minuciosa investigación judicial de sus finanzas y posibles negocios turbios con Cuba y el narcotráfico.

Algún día se abrirán los archivos de Cuba, al igual que se desempolvaron los archivos de la antigua Unión Soviética, y la verdadera historia de los dialogueros y sus motivaciones personales quedará expuesta. Estimo que en su caso, en contraste al libro del Dr. Levine, la historia no lo absolverá.


Dr. Antonio de la Cova
Indiana University



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