BARACUTEY CUBANO

Cuba: Nunca nadie ha tenido tanto a cambio de tan poco

Por Armando de Armas

abril 8, 201

Nunca nadie ha tenido tanto a cambio de tan poco, como en el caso la dictadura militar y marxista de los hermanos Castro en Cuba.

Ni siquiera me refiero al asunto político en sí determinado por la ineptitud o la complicidad de la administración de Barack Obama que, no ya en el caso de Cuba sino en el de Irán, parece más propicia a los enemigos de la nación que a la nación misma o sus amigos.

Me refiero a la propaganda, no demagógica sino descarada, sobre las ventajas de invertir en el mercado de las pulgas de Cuba que, por obra y desgracia de los medios, deviene ahora en la jauja de las oportunidades, feria de las maravillas, que se perdería todo empresario que no tenga olfato u ojos abiertos para ver milagros.

La avalancha de propaganda favorable a los grandes negocios que esperan a los emprendedores en la isla del doctor Castro –más de diez editoriales nada menos que del New York Times, por no hablar de las declaraciones de las cámaras de comercio de medio mundo y de una Cumbre Cubana de las Oportunidades, donde Roberta Jacobson, secretaria de Estado adjunta para Asuntos del Hemisferio Occidental, comandó a los elegidos para dar el campanazo de arrancada en la jornada del miércoles primero de abril del índice bursátil NASDAQ, un evento que llega a millones de televidentes de las cadenas de televisión como Fox Business News, CNBC, Bloomberg TV y muchos otros- son de una índole y envergadura  tal que si semejante publicidad se dedicase, por poner un ejemplo, a un país como República Dominicana (donde el respeto a la propiedad privada y la transparencia en las transacciones comerciales serían no buenas pero sí infinitamente superiores a los de la dictadura comunista de la isla) estamos persuadidos de que en unos tres años ese pequeño país se ubicaría como un verdadero emporio comercial en el hemisferio occidental y un ejemplo a seguir frente al giro oligofrénico a la izquierda de las oligarquías en la región.

Por supuesto, la mentira suele ser minusválida (para no decir coja, que es un término políticamente incorrecto) y recientemente los residentes y empresarios de Minnesota han visto lo obvio y advertido de que los estadounidenses no deberían esperar demasiado del comercio con el régimen comunista cubano.

“Creo que todo el mundo debe recordar que Cuba es sólo una fracción de la población de lugares como México o Brasil”, dijo a TwinCities.com Bill Blazar de la Cámara de Comercio de Minnesota. “Cojo el periódico y veo a todos estos amigos políticos que van a Cuba… pero espero que no disminuyamos nuestros esfuerzos en lugares como México, donde sí hay buenos negocios que hacer.”

(Dibujos añadidos por el bloguista de Baracutey Cubano tomados del sitio Cuba Encuentro. com; hay muchos más)

El presidente Kevin Paap de la Oficina Agrícola de Minnesota agregó que Cuba no posee el potencial de países mucho más grandes como China e India, donde imperan además condiciones favorables para el comercio. “En Cuba no son un gran mercado.” En Cuba son, sobre todo, un régimen antimercado.

Esos son los hechos. Pero la pregunta, la inquietante pregunta es: ¿quién paga esa brutal propaganda favorable a la más larga y letal tiranía que ha padecido el hemisferio occidental sin la más mínima base en la realidad por demás? ¿Quién detrás de The New York Times o, peor, quién detrás de Obama?