BARACUTEY CUBANO

MI MEMORIA CUBANA

Por Esteban Fernández
26 de marzo de 2019

¿Qué era en Cuba UN DISCO VOLADOR, que vemos en esta la foto? ¿Quiénes se acuerdan de estas cosas?: Íbamos al barbero y le decíamos: “Chico, no me peles, simplemente “dame los cortes…”

¿Se acuerdan de salir del pueblo sin tener que pagar la guagua y pedir “botella” o irnos “al dedo”? De ponerle al manubrio de la bicicleta para embellecerlo  unos flequitos o para más lujo “unas colas de zorro”.

¿Se acuerdan de que a las ruedas de la bicicleta le poníamos una baraja para que sonara como si fuera una motocicleta y de que en la cerca central del Stadium del Cerro había un anuncio que decía “Tome Cawy”?

¿A quién se le olvidó que a poseer influencias le llamábamos “tener una palanca”, que recibir un sueldo sin trabajar era “una botella” y que teníamos que fajarnos “hasta el día en que se inventó la coba”?

¿Recuerdan las camisas “guapitas”, los pantalones “pitusa, de mecánicos y de mezclilla”? ¿Se acuerdan cuando el viejo se “murió de viejo o de algo natural”?

¿Quién no fue acusado de estar “comiendo catibia”? ¿A quién la madre no le dio Jarabe Yodotánico, Emulsión de Scott y Vino Desgrasado Herrera? ¿Recuerdan las pelotas de cajetillas de cigarros Partagás?

(Disco volador cubano)

¿Quién no fue bañado metido en una palangana? ¿Algunos no recuerdan lo que era un excusado, un tibor, ni probó el Aceite de Hígado de Bacalao? ¿Se acuerdan DEL HOMBRE DE LA CASA PRADO”?

¿Quién olvidó los chistes de “Se sube el telón se baja el telón”? ¿Quién no se puso un trajecito de “apéame uno” y mandó a ponerle “medias suelas” a los zapatos?

¿Quién no escupió una plancha para ver si ya estaba caliente? ¿Quién no vio a una mujer con un vestido hecho de sacos de yutes para cumplirle una promesa a San Lázaro?

¿Quién no se tomó un COLAGOGO para evitar problemas del hígado?  ¿Quién olvidó la quimbumbia y la chivichana? ¿Quién no quería “sacarse un parlé?

¿Se acuerdan que lo que era un “bicho de buey”  que utilizan los guardias para darnos un mochazo? ¿Recuerda haberle llamado “la fiana” a la policía, “botica” a la farmacia y “fiñe” al muchachito?

Sé que mucho recuerdan muchas de estas cosas,  otros han aprendido algo, pero les voy a decir lo que todo viejo cubano quisiera olvidar: El aceite de palma–christi para combatir la constipación. ¡Ñoo eso sabía a rayo encendido!