Nota del Bloguista
En la primera condena Víctor cumplió 1 año y 9 meses de prisión. El delito de acaparamiento de su segunda condena fue por comprar más de un par de centenares de juguetes en las tiendas de divisas y regalarselos a los niños de Pinar del Río sin hacer ningún tipo de proselitismo político o religioso. El administrador de las dos tiendas ( El Fuego y La Capitana; si mal no recuerdo) donde se compraron los juguetes declaró en el juicio que no había ninguna normativa en la cantidad que se podía comprar y que mientras más comprara, más beneficioso era para la economía del país; posteriormente el mencionado administrador fue separado de su cargo. El Fiscal tuvo que acudir a una ley cubana en desuso desde que terminó la II Guerra Mundial para acusarlo del delito de acaparamiento. El abogado defensor, un exoficial del MININT, expresó en su defensa que no había delito alguno en lo que hizo su defendido y que si estaban juzgando a Víctor por sus ideas políticas ese no era el tribunal para juzgarlo. Cuando a Víctor la presidenta del tribunal le preguntó por su ocupación, Víctor le respondió que era escritor de horror y misterio, pues escribía sobre lo que ocurría en Cuba. La Presidenta en el momento de dictar la sentencia de 6 meses, expresó de manera prepotente que el acusado merecía una condena mucho mayor de 6 meses. A la salida de la Audiencia de Pinar del Río, el policía de la PNR del carro patrullero ( no la ¨jaula¨que es lo habitual) que llevaría a Víctor a la cárcel del 5 y medio de Luis Lazo, ya sentado Víctor, le dió disimuladamente un gancho a las costillas flotantes del lado izquierdo; Víctor le dijo a su esposa que denunciara que lo habían golpeado. Yo fui testigo de todo eso. Mientras, altos oficiales de la Seguridad del Estado estaban en el balcón de una casa ubicada en la esquina de las calles Galiano y Antonio Maceo (que fue un tiempo el Palacio de los Matrimonios de Pinar del Río y posteriormente una tienda de ventas por divisas de la cadena Caracol) estaban observando lo que estaba sucediendo. La Brigada de Respuesta Rápida estaba amenazante movilizada para intervenir.
En el juicio a Víctor, y a otros 3 opositores, durante la Primavera Negra no se me permitió entrar, pues era por invitación a personal revolucionario y a un número limitado de familiares.
En la primera condena Víctor cumplió 1 año y 9 meses de prisión. El delito de acaparamiento de su segunda condena fue por comprar más de un par de centenares de juguetes en las tiendas de divisas y regalarselos a los niños de Pinar del Río sin hacer ningún tipo de proselitismo político o religioso. El administrador de las dos tiendas ( El Fuego y La Capitana; si mal no recuerdo) donde se compraron los juguetes declaró en el juicio que no había ninguna normativa en la cantidad que se podía comprar y que mientras más comprara, más beneficioso era para la economía del país; posteriormente el mencionado administrador fue separado de su cargo. El Fiscal tuvo que acudir a una ley cubana en desuso desde que terminó la II Guerra Mundial para acusarlo del delito de acaparamiento. El abogado defensor, un exoficial del MININT, expresó en su defensa que no había delito alguno en lo que hizo su defendido y que si estaban juzgando a Víctor por sus ideas políticas ese no era el tribunal para juzgarlo. Cuando a Víctor la presidenta del tribunal le preguntó por su ocupación, Víctor le respondió que era escritor de horror y misterio, pues escribía sobre lo que ocurría en Cuba. La Presidenta en el momento de dictar la sentencia de 6 meses, expresó de manera prepotente que el acusado merecía una condena mucho mayor de 6 meses. A la salida de la Audiencia de Pinar del Río, el policía de la PNR del carro patrullero ( no la ¨jaula¨que es lo habitual) que llevaría a Víctor a la cárcel del 5 y medio de Luis Lazo, ya sentado Víctor, le dió disimuladamente un gancho a las costillas flotantes del lado izquierdo; Víctor le dijo a su esposa que denunciara que lo habían golpeado. Yo fui testigo de todo eso. Mientras, altos oficiales de la Seguridad del Estado estaban en el balcón de una casa ubicada en la esquina de las calles Galiano y Antonio Maceo (que fue un tiempo el Palacio de los Matrimonios de Pinar del Río y posteriormente una tienda de ventas por divisas de la cadena Caracol) estaban observando lo que estaba sucediendo. La Brigada de Respuesta Rápida estaba amenazante movilizada para intervenir.
En el juicio a Víctor, y a otros 3 opositores, durante la Primavera Negra no se me permitió entrar, pues era por invitación a personal revolucionario y a un número limitado de familiares.
Pedro Pablo Arencibia, Víctor Rolando Arroyo y Alfredo M. Cepero
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Breve fragmento del juicio de la Primavera Negra en el teatro del Instituto Tecnológico ¨Primero de Mayo¨, sede del antiguo regimiento ¨Juan Rius Rivera¨ en Pinar del Río.
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Tomado de http://www.lanuevanacion.com
EN TIERRAS DE LIBERTAD UN PALADIN DE LA LIBERTAD
Redacción de La Nueva Nación
El lunes 8 de agosto el Secretario General del Partido Nacionalista Democrático de Cuba y Director de La Nueva Nación, Alfredo M. Cepero, sostuvo su primer contacto personal con el preso de conciencia y miembro del Grupo de lo
s 75, periodista independiente Víctor Rolando Arroyo Carmona. En un modesto hotel cercano al Aeropuerto Internacional de Miami, Cepero hizo entrega a Arroyo de la placa de Paladín de la Libertad, que le fuera otorgada en ausencia el 28 de abril de 2007.
(De izquierda a derecha: Víctor Rolando Arroyo Carmona y Alfredo M. Cepero)
Fue un encuentro privado en compañía de la esposa e hijos de Arroyo, así como de su amigo de 20 años, el Director de Baracutey Cubano, Pedro Pablo Arencibia Cardoso. La privacidad permitió, sin embargo, pasar revista a sus experiencias en las cárceles comunistas y durante su tránsito por España, país que fue su destino obligado como condición a la excarcelación de las prisiones castristas.
Nos habló, por ejemplo, del trato indiferente y a veces humillante que recibió de los miembros del actual gobierno del PSOE (Partido Socialista Obrero Español), de las condiciones de hacinamiento en los hostales, de la lenta y limitada atención médica a su esposa enferma y a su hijo diabético, de la corrupción rampante en las ONG (Organizaciones No Gubernamentales) españolas y hasta del despojo de sus pasaportes y otros documentos de identidad por las autoridades españolas.
Pero, a diferencia de lo que algunos podríamos pensar a causa de sus vicisitudes, el espíritu de lucha y la voluntad de trabajo de este cubano con mayúscula están intactos. Nos habló de sus planes para establecerse y empezar a trabajar en la ciudad de Louisville, Kentucky, adonde ira bajo el patrocinio de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos.
“Yo no ando con remilgos de títulos universitarios a la hora de mantener a mi familia. Estoy dispuesto a desempeñar cualquier trabajo digno por humilde que sea”. Nos dijo en el tono firme que caracteriza a este guajiro pinareño todo vergüenza y todo coraje. En cuanto a la lucha por la libertad de la patria nos dijo que estaría siempre en la primera fila en cualquier lugar del mundo en que se encuentre.
Antes de ser arrestado, Víctor Rolando Arroyo Carmona era Director de la Unión de Periodistas y Escritores Cubanos Independientes (UPECI) y también dirigía una de las bibliotecas más importantes de Cuba (de la Red del Proyecto de Bibliotecas Independientes de Cuba) con cerca de 5,000 volúmenes. Fue encarcelado en tres ocasiones. La primera en 1996 por la publicación no autorizada de “El Tabaco”,un análisis crítico de los métodos del cultivo del tabaco en su nativa Pinar del Río, cuna de los célebres “habanos”.La segunda el 14 de febrero del 2000, en que fue condenado a una pena de seis meses por el supuesto delito de “acaparar bienes del estado”, (figura jurídica en desuso tras la dolarización de la economía en 1998.) La tercera en la Primavera Negra de 18 de marzo de 2003, como miembro del Grupo de los 75, en que fue condenado a 26 años de privación de libertad.
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EN TIERRAS DE LIBERTAD UN PALADIN DE LA LIBERTAD
Redacción de La Nueva Nación
El lunes 8 de agosto el Secretario General del Partido Nacionalista Democrático de Cuba y Director de La Nueva Nación, Alfredo M. Cepero, sostuvo su primer contacto personal con el preso de conciencia y miembro del Grupo de lo
s 75, periodista independiente Víctor Rolando Arroyo Carmona. En un modesto hotel cercano al Aeropuerto Internacional de Miami, Cepero hizo entrega a Arroyo de la placa de Paladín de la Libertad, que le fuera otorgada en ausencia el 28 de abril de 2007.
(De izquierda a derecha: Víctor Rolando Arroyo Carmona y Alfredo M. Cepero)
Fue un encuentro privado en compañía de la esposa e hijos de Arroyo, así como de su amigo de 20 años, el Director de Baracutey Cubano, Pedro Pablo Arencibia Cardoso. La privacidad permitió, sin embargo, pasar revista a sus experiencias en las cárceles comunistas y durante su tránsito por España, país que fue su destino obligado como condición a la excarcelación de las prisiones castristas.
Nos habló, por ejemplo, del trato indiferente y a veces humillante que recibió de los miembros del actual gobierno del PSOE (Partido Socialista Obrero Español), de las condiciones de hacinamiento en los hostales, de la lenta y limitada atención médica a su esposa enferma y a su hijo diabético, de la corrupción rampante en las ONG (Organizaciones No Gubernamentales) españolas y hasta del despojo de sus pasaportes y otros documentos de identidad por las autoridades españolas.
Pero, a diferencia de lo que algunos podríamos pensar a causa de sus vicisitudes, el espíritu de lucha y la voluntad de trabajo de este cubano con mayúscula están intactos. Nos habló de sus planes para establecerse y empezar a trabajar en la ciudad de Louisville, Kentucky, adonde ira bajo el patrocinio de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos.
“Yo no ando con remilgos de títulos universitarios a la hora de mantener a mi familia. Estoy dispuesto a desempeñar cualquier trabajo digno por humilde que sea”. Nos dijo en el tono firme que caracteriza a este guajiro pinareño todo vergüenza y todo coraje. En cuanto a la lucha por la libertad de la patria nos dijo que estaría siempre en la primera fila en cualquier lugar del mundo en que se encuentre.
Antes de ser arrestado, Víctor Rolando Arroyo Carmona era Director de la Unión de Periodistas y Escritores Cubanos Independientes (UPECI) y también dirigía una de las bibliotecas más importantes de Cuba (de la Red del Proyecto de Bibliotecas Independientes de Cuba) con cerca de 5,000 volúmenes. Fue encarcelado en tres ocasiones. La primera en 1996 por la publicación no autorizada de “El Tabaco”,un análisis crítico de los métodos del cultivo del tabaco en su nativa Pinar del Río, cuna de los célebres “habanos”.La segunda el 14 de febrero del 2000, en que fue condenado a una pena de seis meses por el supuesto delito de “acaparar bienes del estado”, (figura jurídica en desuso tras la dolarización de la economía en 1998.) La tercera en la Primavera Negra de 18 de marzo de 2003, como miembro del Grupo de los 75, en que fue condenado a 26 años de privación de libertad.
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ALGUNOS COMENTARIOS DEJADOS
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Maria dijo... Otro que vivió con su familia en dos cómodos pisos pagados por todos los españoles con ayudas para vivir y extras que no tienen otros inmigrantes ni refugiados y que al llegar a Miami sólo tiene palabras desagradables, falsedades y criticas para el pais gracias al cual ha podido llegar a USA. Qué vergúenza. Al ABC no se atrevió a contarle de su "hacinamiento". Que le vaya bien en Kentucky.
PPAC dijo...Saludos María
Tengo entendido que Arroyo vivió en au último lugar de residencia en un amplio y barato apartamento de 4 habitaciones y del cual no se quejó; todo lo contrario.
Arroyo en la conversación, en la cual yo estaba presente, criticó fuertemente al gobierno del PSOE y agradeció y alabó la generosidad y la amabilidad conque los trató el pueblo español.
Sobre la falta de atención y la corrupción en ciertas ONG, le diré lo siguiente: Arroyo en su conversación habló de tres de ellas, pero sus críticas fueron hacia una de ellas que ha sido también fuertemente criticada por muchos otros de los excarcelados cubanos. No recuerdo el nombre ahora, pero en este blog he publicado esas críticas. Arroyo, su esposa y sus dos hijos han planteado continuamente desde que llegaron, que se hubieran quedado en España si hubieran encontrado trabajo.
Otro que vivió con su familia en dos cómodos pisos pagados por todos los españoles con ayudas para vivir y extras que no tienen otros inmigrantes ni refugiados y que al llegar a Miami sólo tiene palabras desagradables, falsedades y criticas para el pais gracias al cual ha podido llegar a USA. Qué vergúenza. Al ABC no se atrevió a contarle de su "hacinamiento". Que le vaya bien en Kentucky.
ResponderEliminarSaludos María
ResponderEliminarTengo entendido que Arroyo vivió en au último lugar de residencia en un amplio y barato apartamento de 4 habitaciones y del cual no se quejó; todo lo contrario.
Arroyo en la conversación, en la cual yo estaba presente, criticó fuertemente al gobierno del PSOE y agradeció y alabó la generosidad y la amabilidad conque los trató el pueblo español.
Sobre la falta de atención y la corrupción en ciertas ONG, le diré lo siguiente: Arroyo en su conversación habló de tres de ellas, pero sus críticas fueron hacia una de ellas que ha sido también fuertemente criticada por muchos otros de los excarcelados cubanos. No recuerdo el nombre ahora, pero en este blog he publicado esas críticas. Arroyo, su esposa y sus dos hijos han planteado continuamente desde que llegaron, que se hubieran quedado en España si hubieran encontrado trabajo.