lunes, septiembre 10, 2007

CONSTRUYENDO UNA NUEVA NACION

CONSTRUYENDO UNA NUEVA NACION

Por Alfredo M. Cepero.

Después de meses de estudios, análisis y elaborados intercambios entre miembros de la oposición cubana, tanto dentro como fuera de la isla, los líderes de 13 organizaciones y partidos políticos decidieron unir esfuerzos a los efectos de ejercer una profunda y perdurable influencia sobre los cambios drásticos que serán necesarios para lograr una transición de la actual dictadura comunista a una democracia real, representativa y participativa. El resultado fué la Alianza por una Nueva Nación, firmada en Cuba y en el exilio el pasado 20 de mayo por representantes de partidos políticos, movimientos de derechos humanos, sindicatos obreros, organizaciones cívicas y grupos cristianos.

En el curso de su primera reunión, la Asamblea General eligió al joven de 32 años, Rafael Avila Pérez, para el cargo de presidente del Consejo Permanente, cuya función será la de dirigir las operaciones diarias de la Alianza. También fueron electos al Consejo Permanente: Carlos Miyares, Carlos Ríos Otero, Ulises Calderón, Vladimir Alejo, Carlos Ríos García y Alfredo M. Cepero(el único residente fuera de Cuba). Por otra parte, las organizaciones fundadoras de la Alianza dentro de Cuba fueron: el Partido Popular Joven Cuba, el Instituto Juvenil Cristiano de Estudios Sociales, la Unión Lucista, el Movimiento Popular Pro-Derechos Humanos “Miguel Valdés Tamayo”, el Centro de Información sobre Democracia, el Sindicato Independiente “Cambio”, el Partido Republicano de Cuba, el Frente Democrático “Elena Mederos” y el Movimiento de Derechos Humanos “Municipios de Cuba”. En el exilio, las organizaciones fundadoras fueron: La Asociación Cubanos por la Libertad, la Asociación Pro-Democracia en Cuba, la Federación Sindical de Plantas Eléctricas, Gas y Agua y el Partido Nacionalista Democrático de Cuba.

En cuanto a su forma de operar, la ANN ha adoptado lo que califica de: “Una resistencia activa ,sin violencia, pero con iniciativas que despojen al régimen comunista de su control sobre la agenda política”. Después de apelar en junio a la Unión Europea para que dicha organización condene los actos represivos de la policía política y apoye a la sociedad civil, la ANN ha iniciado lo que podría convertirse en la herramienta más efectiva que ha utilizado hasta el momento la oposición cubana contra el régimen comunista. La misma es una singular campaña encaminada a desenmascarar y denunciar como un circo el fraudulento proceso electoral que pondrá en marcha la dictadura entre los meses de octubre y diciembre del presente año. Tal ha sido la acogida que otros movimientos de oposición la han presentado como propia.

La campaña estimulará a los cubanos a que voten NO en sus boletas y será llevada a cabo a través de un conteo paralelo al conteo de las autoridades comunistas y utlizando las mismas leyes electorales del régimen. Por ejemplo, los artículos 131,132 y 133 del código electoral cubano estipulan que “el voto es libre, igual y secreto para todos los cubanos mayores de 16 años de edad”. Según la ANN, los objetivos son “iniciar un proceso de desobediencia civil que debilite la dictadura y conduzca a un sistema de libertad y democracia, así como demostrar el fraude del conteo oficial”. Los líderes de la ANN albergan la esperanza de que esta campaña tenga el mismo éxito de la llevada a cabo en Alemania Oriental en 1989 que condujo a la erradicación del régimen comunista en ese país. Ahora bien, independientemente de sus resultados, esta campaña es un indicio claro y contundente de que los jóvenes cubanos dentro de la isla están decididos a luchar a solas por la libertad, sin esperar por ayudas foráneas ni aceptar interferencias procedentes del exterior.