LOS RUMORES DE ‘BUENA FUENTE’ ENTURBIAN LA REALIDAD DE LA INSURRECCION EN CUBA
Por Roberto A. Solera
Dice el adagio popular –con ese acerbo de cultura y sapiencia atribuida a los años de experiencia—que “de buenas intenciones está plagado el camino al Infierno”.
Algunos participantes periféricos en los esfuerzos insurreccionales para derrocar a Fulgencio Batista y Zaldívar, nuestro anterior dictador, relatan hechos a los que tuvieron acceso de primera mano los que reafirman sus testimonios como testigos presenciales y los salpican con comentarios no siempre justos ni apoyados en los hechos, que ellos creen válidos pues denigran a otros insurreccionales que no tomaron el camino del Exilio y que no siempre se ajustan a la realidad histórica. Al hacerlo , se dejan llevar por la pasión que hace renacer los rescoldos de viejas rivalidades engendradas en la lucha por el poder y el control de grupos insurreccionales que participaron en la lucha –muy glorificada y casi siempre agigantando la realidad bélica de la “heroica” lucha en las montañas.
La Historia no es simple, cuando uno la quiere explicar sin profundizar en los acontecimientos, ni en los orígenes de las rivalidades ni tampoco –ya que no tuvieron acceso como testigos presenciales—cuál fue o cómo fue la toma de decisiones, que muchas veces comentan dejando flotar la duda sobre la actuación en momentos de tensión y lucha de los dirigentes revolucionarios pues en su momento lo fueron y exiliados o no posteriormente.
Es vieja y notoria la rivalidad que existió–y aun hoy existe—entre los fundadores del II Frente del Escambray que luego se desgajó en las guerrillas de Eloy Gutiérrez Menoyo y las comandadas por Faure Chomón Mediavilla y Rolando Cubelas bajo el emblema del Directorio Revolucionario “13 de Marzo”.
Cuando se afirma que en el asalto a Palacio del 13 de marzo de 1957, Faure fue herido “en una nalga” cabe pensar que quien lo afirma insinúa lo fue “huyendo” y por tanto dando la espalda a los que peleaban y morían en dicha acción.
Personalmente dudo haya sido asi y más bien creo lo declarado por el mismo Chomón, de que fue herido en la cadera y un brazo, pues cuadra mejor a mis recuerdos de él. No lo considero ni remotamente cobarde al igual que a todos los que atacaron Palacio. Es fácil juzgar a los actores desde lejos pero hay que estar loco o ser muy valiente para atacar el lugar más resguardado de La Habana, Palacio. Ademas ninguno de los miembros que he conocido del Directorio 13 de Marzo jamás han dudado de su veracidad. Puedo no estar de acuerdo con sus posteriores posiciones en lo relativo a la insurrección y revolución en Cuba pero eso no me lleva a negarle valor a los que lo tuvieron.
Eloy Gutierrez Menoyo tuvo una participación minima –si es que tuvo alguna—en el Asalto a Palacio. Sí sabía que había sido dueño del Eloy’s Club en la calle Línea un lugar pequeño y oscuro que frecuentemente era utilizado por las “parejitas” en sus encuentros amorosos.
El Gallego es un hombre valiente, rayando muchas veces en la locura, como lo demostró posteriormente al volver a desembarcar en Cuba y ser hecho prisionero en Oriente. Y cuando lo molieron a palos los guardas en Isla de Pinos al negarse al obedecer órdenes, según me lo atestiguaron otros presos políticos. Y que lo llevó a perder la visión en un ojo y más tarde a casi estar ciego hoy dia. Lamentablemente hoy, tengo noticias que tiene cáncer.
Es cierto que Menoyo estuvo primero en el Escambray, con armas del Directorio que fueron rescatadas de donde habían sido dejadas cerca del Prado para el Ataque a Palacio y que nunca se utilizaron por el grupo de apoyo, comandado por Ignacio González, uno de los seudónimos utilizados por él. Su verdadero nombre según “El exilio Republicano Español en Cuba, de Jorge Domingo” es Marcelo Manet, Marcelino Manen o Gumersindo Manet. Gonzalez había participado primero en la lucha republicana en España en la Guerra Civil y tras llegar exiliado a Cuba se involucró en la fallida invasión a Santo Domingo desde Cayo Confites donde intimó con Carlos Gutiérrez Menoyo, jefe militar del asalto a Palacio y con Daniel Martin Labrandero, quien al huir del Castillo del Principe, liberado por un commando del Directorio fue asesinado tras lesionarse al huir.
El grupo de González sumaba unos 100 hombres pero al final sólo 50 se presentaron a apoyar el ataque pero sin el necesario entrenamiento sólo en armas cortas y no en armas pesadas, según Bonachea The Cuban insurrection, 1952-1959, Ramón L. Bonachea, Marta San Martín --quienes atribuye a indecisión de parte de González en dar las órdenes.
Anteriormente se habia acordado por el Directorio, con el apoyo de Menelao Mora –desencantado con el PRC que no había llevado a feliz término su plan en 1955 para matar a Batista según su teoría de golpear arriba, no darle información a los Auténticos en su grupo de la operación pues se temía que se infiltraran y divulgaran el plan de Ataque a Palacio.
Por su parte Carlos Gutiérrez Menoyo se opuso a que se destituyera a González segun Chomón habia solicitado y se nombrara a Luis Gómez Wangwemert al frente de la operación.
No está claro aún qué pasó para que el grupo de apoyo no cumpliera su misión y sólo Calixto Sánchez White, dirigente del sindicato de la Aviacion, acusado de traicionar la operación, fue juzgado en Miami por sus compañeros y absuelto por no haber participado.
Las armas que presuntamente debian haber sido utilizadas por el grupo de González, fueron rescatadas por Domingo Portela Placeres, dirigente del Directorio que luego fue Viceministro de Comunicaciones y más tarde Secreaio del Partido Comunista en la Provincia de la Habana.
Según declaró Faure Chomón a él lo hirieron a nivel de la cadera y en el muslo, mientras entraba a Palacio al punto que saltaron unas granadas que llevaba en el cinto junto con los cargadores de la ametralladora que blandía.
En cuanto a que no le avisó a tiempo al español Gonzalez, según Faure lo hizo por no poner en peligro la operación donde el "Gallego" había reclutado a múltiples semi-gangsters que indagaban detalles de la operación, por lo que Faure propuso le quitaran el mando. Se opusieron para no dañar el secreto.
En el Directorio, al igual que en otras de las ‘organizaciones’ revolucionarias opuestas a Batista habia mucha friccion y rivalidad entre sus miembros. Es natural donde hay seres humanos.
Por otro lado las “organizaciones” no eran estrictamente estructuradas y los “mandos” eran casi inexistentes, o sea, la gente obedecía o no…y no pasaba nada. De modo que el que Chomón fuera o no segundo jefe militar del Asalto a Palacio es totalmente intrascendente.
Como ejemplo puedo dar que tras la revolución la Comisión de Orientación Revolucionaria (COR) luego DOR, bajo el mando de César Escalante Dellundé, dio orden, incluso con la presencia del propio Escalante, en noviembre de 1961 de cerrar el periódico Combate, órgano del Directorio Revolucionario Estudiantil “13 de Marzo”, en las antiguas instalaciones del periódico Avance en la calle Consulado.
El comandante [en realidad Capitán reconocido) Guillermo Jiménez [Jimenito] quien era el Director” aceptó calladamente la acción aunque el propio Humberto Castelló, a la sazón Secretario General del Directorio –Faure Chomón estaba de Embajador en Moscú] no impuso su autoridad, lo que luego Chomón le criticó al regresar a La Habana por no haberse opuesto. Al momento Combate sólo era superado en circulación por Revolución y el periódico La Calle de Luis Orlando Rodriguez no tenía ni remotamente igual número de lectores. Por supuesto, fue una decisión política del Gobierno que en ese momento le disputaba a Fidel Castro el poder a manos de Aníbal Escalante y su Partido Socialista Popular (PSP), enmarcados en las ORI (Organizaciones Revolucionarias Integradas) que presidia Escaloante como Secretario de Organización antecesora del PURS (Partido Unido de la Revolución Socialista) sustituido en 1965 por el Partido Comunista de Cuba.
Durante el periodo insurreccional las tensiones entre el II Frente y el Directorio llegaron al punto en que Eloy Gutiérrez Menoyo detuvo a Rolando Cubelas Secade, que fue lo que motivó que Faure Chomón subiera de nuevo al Escambray para subasanar los problemas. Algo que fue documentado por un artículo aparecido en 1961 en Combate bajo la autoría de Humberto Castelló [y que el que subscribe mecanografió] narrando los pormenores del hecho.
Faure Chomón fue al igual que otros miembro del MSR (Movimiento Socialista Revolucionario) y no fue incluso antes del asalto a Palacio un personajillo. Recuerdo una foto cuando la muerte a principios de 1952 de él parado con la mano extendida como para detener a los que tiraban y mataron a Rubén Batista en el Prado y San Lázaro.
Otros también participaron en los grupos de acción durante los años posteriores a 1933, unas veces en ese grupo u otros como la UIR, la Asociación Revolucionaria Guiteras y otras más. Pero innegablemente algunos “revolucionarios” de esa época lucharon para derribar a Batista y otros no.
Al Cesar lo que es de Cesar y a Dios lo que es de Dios. Es innegable que un proceso tan turbulento como fue –y aun es—la revolucion se preste a confusiones y malentendidos y agitar las pasiones en uno u otro sentido.
Hubo y hay muchos olvidados de los que expusieron sus vidas en busca de la libertad. Es normal.
Los que estan en la cuspide no lo estan por ser mejores –a uno y otro lado del Estrecho de la Florida—sino porque utilizando el padrinazgo y el arribismo han logrado trepar. No solo Luis Goicoechea fue olvidado. Hay muchos mas pero si uno lucho por la libertad no importa si lo han o no olvidado. El saber que se puso su granito de arena en la lucha pasada y en la actual es motivo mas que suficiente para no apesadumbrarse por el olvido pues, si uno fue honesto y no aspiraba a nada, ¿no fue esa lucha el motivo de su participacion en pro de la la libertad de Cuba?
¿Quien se acuerda del asesinado Ramón Pando Ferrer que inició con Luis Blanca el Escambray? ¿Quien se acuerda de Antonio “Ñico” Guevara, que participóen los hechos de la CMQ?
Los alzados en el Escambray, los Organos, la Sierra del Rosario y la Sierra Maestra solo se dedicaron a un juego de espera…y nada mas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario