viernes, octubre 18, 2013

Esteban Fernández sobre Cuba: ¡LOS GRANDES H. P!

¡LOS GRANDES H. P!


Por Esteban Fernández


18 de octubre de 2013

Muchas personas (entre ellos yo, aunque ustedes no lo crean) detestan las malas palabras en los escritos. Pero hasta el cubano más fino y educado tiene que hacer esta excepción. Porque todos los epítetos, groserías y exabruptos que se lancen contra los dos diabólicos hermanos que han destruido a nuestra nación están más que permitidos y justificados.

Lo que sucede es bien sencillo: es prácticamente imposible definir quienes verdaderamente son Fidel y Raúl Castro sin catalogarlos -sin cortapisas ni subterfugios- como unos tremendísimos hijos de puta. Y si algún mexicano me lee le digo que son ¡dos hijos de la chingada y pinches cabrones!

Para los españoles son un par de gilipollas...Y tratando de que todos lo entiendan: En Inglés se dice "Son of a bitch y motherfuckers" , en francés es "fils de pute", en el idioma catalán de mi abuela son "fill de puta", en italiano es "figlio di putana", y por si acaso algún polaco se interesa en saber, son dos tremendos "skuwysyn".

No son comunistas ni anticomunistas, ni católicos ni anticatólicos, no son socialistas ni anti socialistas. Inclusive no son, ni fueron, batistianos ni anti batistianos. Para ellos Fulgencio Batista fue sólo un escalón, una excusa para poder cogerse a Cuba.

Encasillarlos en cualquiera de estas categorías sería incurrir en un error histórico de desmedidas proporciones. Llamarlos hijos de perra sería menospreciarlos y representaría una ofensa a todas la perras del mundo. Son más bien como una cobra y una serpiente cascabel que se arrastran y que asumen una u otra posición adoptándolas y adaptándolas a su conveniencia propia. Ni son generales, ni son comandantes, ni son gobernantes, ni son empresarios, ni son presidentes, son unas víboras dándole mordidas e impregnándole veneno por casi 55 años a una nación que ellos mismos han convertido en carroña.

Y cuidadito, nada que ver con doña Lina a quien no le achaco las barbaridades cometidas por sus dos malditos retoños. Todos los que vieron la película “Rosemary’s baby” sabe que la pobre Lina dejó empequeñecida a la "Rosemary" del cine. Y todo el que conoció a Lina Ruz sabe que ya para finales del año 59 se dio perfectamente cuenta del grave error cometido al haberlos parido.

Comunizaron a la nación que los vio nacer, sin embargo superan en riquezas a los mayores capitalistas del mundo. Asumieron una postura violentamente anti dictatorial- y hasta “patriótica”- para terminar siendo un millón de veces más dictadores que Stalin y Mao.

Les quitaron a los sacerdotes, a las monjas y a la Iglesia Católica todo el poder que tenían. Sin embargo, en la actualidad después que los consideran rendidos y colaboradores no tienen a menos dejarse querer por Jaime Ortega y abrazar a cuanto cura les convenga. Y hasta serían capaces de hacer la comunión si el momento lo amerita.

Si ellos, en lugar de ser unos reverendos hipócritas, y fueran sinceramente antiamericanos hace mucho rato que hubieran bombardeado la Base Naval de Guantánamo. Y los que hubieran derribado las Torres Gemelas de New York hubieran sido ellos en lugar de Bin Laden.

¿No es cierto que demostraron un odio acérrimo contra nosotros, contra los que abandónanos al país, y nos llamaron “lumpen y lame botas del Imperialismo”? Si hubieran sido sinceros en esos ataques jamás hubieran aceptado- por necesidad y oportunismo- el regreso cargado de fulas de los que hasta ayer llamaban hipócritamente “gusanos”.

Este par de sabandijas no son nada, no creen en nada ni en nadie, no se deben a una doctrina ni a una religión, son solamente unos monstruos que han dejado chiquito al de la laguna negra.