BARACUTEY CUBANO

Tomado de http://www.nuevoaccion.com/

PRUEBAS DE LOS INTENTOS CASTRISTAS POR APODERARSE DE VENEZUELA DESDE HACE MUCHO TIEMPO

Por Aldo Rosado-Tuero

Abril 16, 2014

Ayer nuestra colaborador Edel Espinosa publicó aquí en Nuevo Acción un artículo en el que con datos fidedignos, nombres, pelos y señales nos relató, como la tiranía castrista no solo entrenó y mantuvo a las guerrillas castristas que trataban de apoderarse de Venezuela, sino como llevaba cabo su constante suministro, interviniendo descaradamente en los asuntos internos de otro país.

Hoy les vamos a copiar la parte de un libro escrito por un conocido castrista y ex funcionario de la tiranía en el que se relata pormenorizadamente como su Gobierno, vulnerando todas las reglas del respeto a la soberanía de los países y a la paz  internacional, participó precisamente en el empeño de comunizar a Venezuela. El texto que van a leer a continuación, le da la razón a todo lo que nos ha contado Edel.

“Papito” Serguera, bien conocido por todos los que estamos inmersos en la batalla por la libertad de Cuba, como uno de los más radicales defensores de esa tiranía, aparte de los múltiples importantes cargos que ha ocupado en Cuba, fue Embajador de la tiranía en Argel y en El Congo.
Debe de ponerse especial atención a la forma entrelazada en que los comunistas de todos los países cooperan y vulneran las leyes. Ante estas evidencias nosotros preguntamos: ¿Es posible creer en un diálogo entre Oposición y Gobierno comunista en Venezuela, avalado por la UNASUR, cuando el presidente de Unasur, lo es, nada y nada menos, que Alí Rodríguez Araque, antiguo integrante de esas guerrillas, protegidas por todo el comunismo internacional, de las que escribe Jorge Serguera? ¿Va alguien con un poco de inteligencia y con buena fe, creer por un instante, que la naturaleza de esos conspiradores internacionales ha cambiado?


Capítulo XXIV del libro “Caminos del Che” de Jorge Serguera Riverí “Papito”, pag. 243 y 244.

“TANZANIA

Desde Ghana regresamos a Argel. La intención del Che era continuar el recorrido por Africa y el siguiente punto de destino era Tanzanía. No obstante no partimos inmediatamente, pues nuestra llegada coincidió con la presencia en esta capital del “gallego” Mansera, venezolano, segundo secretario del Partido comunista de ese país y que había manifestado su interés en reunirse conmigo tan pronto como fuera posible.

La noticia me la dieron Barreto y Duno, representantes del FLN de Venezuela.

El Che, enterado por mí de la solicitud de Mansera, habría de participar en todas las reuniones que sostuvimos. Su presencia, en calidad de alto dirigente de Cuba, ayudaba a agilizar cualquier decisión que se desprendiera de estos encuentros.

El FLN venezolano había obtenido de China apoyo en armas. Necesitaban encontrar una vía para introducir esas armas en Venezuela. Era más fácil hacerlas llegar a través de Argelia, donde podían ser almacenadas y luego embarcadas a su destino final.

(CAMINOSDELCHEPORTADA)

En reunión que sostuvimos el Che, Mansera y yo, con el presidente argelino, se le solicitó la autorización para realizar esta operación. Ben Bella estuvo de acuerdo.

Propuse comunicar a la dirección china los resultados de esa reunión a través de su Embajador en Argel, Tsen Tao, con el que mantenía buenas relaciones…No habían transcurrido 24 horas cuando el diplomático me comunicó el acuerdo de su gobierno a nuestra decisión y que el envío se produciría en breve plazo.

Para llevar a cabo el almacenamiento, empaque y embarque de armas, se decidió crear una compañía importadora-exportadora de vinos, con sede en un país europeo y rentar un barco para transportarlas…La idea era poner las armas en toneles de vino y en esta forma hacerlas llegar a Venezuela. Los responsables de esta parte eran Barreto, Duno y Layo Rodríguez.

La filial argelina de aquella compañía, recibió un local en Argel, donde se almacenarían las armas y se pondrían en el interior de los toneles. El personal que se encargaría de los trabajos sería enviada por el FLN venezolano y se coordinó además con el Partido Comunista Español…

(El abogado Jorge  ¨Papito¨ Serguera Riverí como fiscal del juicio del oficial Jesús Sosa Blanco; juicio en el que estuvo presente Gabriel García Márquez como periodista y del cual no escribió nada sobre esa farsa judicial. Nota y foto agregadas por el bloguista de Baracutey Cubano)

Santiago Carrillo y Enrique Líster que se encontraban en Argel en aquel momento, organizando la seccional de PCE en aquel país, se ocuparon de esta cuestión a solicitud mía…La relaciones entre esta organización y nuestra Representación diplomática eran estrechas y a solicitud de Carillo, casi desde el principio trabajaron en la Embajada comunistas españoles, veteranos de la guerra exiliados en Argel. Mi secretaria personal Pilar y su esposo Vicente, administrador de la residencia, me fueron de gran ayuda desde el mismo principio. Sus hijos viven en Cuba, donde concluyeron estudios universitarios.

Los detalles de aquella operación fueron mantenido en el más estricto secreto…En la dirección argelina estaban al corriente Ben Bella y Boumedienne”