sábado, junio 28, 2014

Desambiguar el discurso. Desde Cuba entrevista de Juan González Febles a Antonio Rodiles


Tomado de http://www.primaveradigital.org/

Desambiguar el discurso: entrevista a Antonio Rodiles


Por Juan González Febles

 26 de Junio de 2014


Cuba actualidad, Lawton, La Habana, (PD) Antonio Rodiles se convirtió en el promotor ciudadano por excelencia en nuestro espacio. Alguien capaz de antonio-rodiles1poner a cualquier cubano de a pie en función del fin político. El promotor que moviliza, aglutina y que ciertamente logró una iniciativa que ha calado en el imaginario de la sociedad civil contestataria Cuba adentro.

Por supuesto que se trata de la campaña Por Otra Cuba, definida por sus creadores como "una demanda ciudadana por nuestros derechos", basada en la exigencia colectiva para que el régimen militar totalitario cubano ratifique el Pacto de los Derechos Políticos y Civiles y el Pacto de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales de las Naciones Unidas

, firmados por este régimen el 28 de febrero de 2008 en la ciudad de New York, y que además implemente el cumplimiento en su totalidad del articulado de la Declaración Universal de Derechos Humanos.

Para ello, Rodiles y el Estado de Sats que promueve, asaltaron espacios culturales y dieron voz a una gama variopinta de actores que sin ser políticos, lograron dar esta coloratura para contribuir a crear espacios que no sustituyen o restan a los espacios históricos de la sociedad civil contestataria. Se trata de sumar a la oposición pacífica ciudadana, a la prensa nacional independiente, al resto de los factores, a partir de la desambiguación del discurso político.

Los tiempos que corren en la actualidad, dentro del incierto espacio político en que se mueven los actores de la sociedad civil contestataria cubana, hacen cada día más necesaria la transparencia para que las ambigüedades que existen en algunos discursos políticos ganen en claridad.

Los proyectos y las personas que los realizan deben definirse. La ambigüedad crea el espacio ajeno de incertidumbres que desdibuja identidades. Como aporte adicional, alimenta la desconfianza e impide el reconocimiento tanto propio como ajeno.

Juan González Febles: Uno de los más recientes materiales producidos por Estado de Sats, 'Análisis Sobre el Embargo', por su tema, pudiera ser catalogado como anticastrista. Algunos creen ver en él, un deslinde, un desmarcarse de los que proclaman que hacer concesiones al gobierno militar, empoderará a la sociedad civil cubana. ¿Qué puedes decirnos sobre esto?

Antonio González Rodiles: Creo que el tema del embargo es hoy uno de los temas fundamentales en la transición cubana. Es muy evidente que la impunidad y la superioridad del régimen castrista cubano en relación con la sociedad civil son inmensas y eso prácticamente imposibilita trabajar en el terreno político para tratar de proyectarse como una fuerza capaz de generar el tipo de cambio democrático deseado. Es por eso que me preocupa muchísimo que se le siga dando más superioridad al régimen, y que el ciudadano cubano y el activista tengan que ver desde las gradas cómo se llevan a cabo esas maniobras sin poder competir con la élite gobernante que simplemente está tratando de crear un capitalismo autoritario, como se ha visto en muchos otros países. O sea, el tipo de sistema y la dinámica social que quiere generar el gobierno no es nada nuevo, y en caso de que lleguen a recibir el apoyo económico que tan desesperadamente están buscando, en los próximos 20 o 30 años vamos a tener que conformarnos con ver una Cuba gobernada por los descendientes de esta élite que está hoy en el poder.

JGF: Seleccionaste un ex preso político y veterano en la prensa nacional independiente, Jorge Olivera Castillo y a Camilo Ernesto Olivera, uno de los que más recientemente, desde su juventud se incorporó al esfuerzo de escribir sin permiso e informar sin censuras. ¿Por qué dos periodistas independientes? Esto se sale o rompe moldes sobre el perfil regular de tus entrevistados. ¿Hay alguna intención o mensaje en esto? ¿Por qué?

AGR: En el caso de Jorge Olivera, es un periodista de larga trayectoria y un ser humano excelente, y me parece que no se lo conoce lo suficiente, como a tantas personas dentro de la isla, y creo que vamos a tratar de que se convierta en un invitado asiduo. Creo que tiene mucha experiencia en estos temas, es una voz autorizada para algo que en Cuba a veces es tabú: criticar no solo al régimen, sino a ciertas posiciones dentro de la misma oposición. Opino que Olivera tiene la fuerza moral para hacerlo, por eso me parece importante que tanto él como otras personas con su mismo perfil puedan salir a exponer su visión, sobre todo cuando se trata de temas tan importantes, como es este del embargo.antonio-rodiles3

En el caso de Camilo, como decías, es alguien que recientemente ha llegado al periodismo independiente. Lo conozco porque también es parte del equipo de Estado de SATS, escribe para distintos medios. Tiene un razonamiento bastante agudo. Me pareció importante exponer estas dos visiones juntas para analizar este tema (el embargo), que evidentemente requiere que se muestren distintos puntos de vista, quizás distintas generaciones.

JGF: Te iniciaste o inauguraste una de las primeras zonas de polémica política con Estado de Sats. Recuerdo que fue aquello sobre la 'oposición inteligente'. Ahora ha surgido una supuesta oposición leal. ¿Puede una oposición cubana ser leal? Si así fuere, ¿leal a quién?

AGR: Creo que el término es demasiado ambiguo. ¿Estamos hablando de lealtad a un régimen que lleva 55 años cometiendo cualquier cantidad de abusos y atropellos? Si nos remontamos a los años 60, recordaremos la cantidad de fusilamientos que ocurrían tras un proceso judicial, pero todos sabemos que aquellos procesos eran amañados. Condenas a prisión de 20 o 30 años, innumerables familias divididas. La historia es bastante desastrosa y triste.
Y tras 55 años, lo que vemos es a esta élite tratando de ceder el poder político y económico a sus herederos, y tratando de hacer ver a todo el que los critica como gente obtusa, como fanáticos. Es casi imposible asimilar el término de "oposición leal". Está claro que la mayoría de los opositores pacíficos en Cuba –creo que ese es el término correcto: oposición pacífica- desea una transformación civilizada. Pero creo que lo primero que tiene que ocurrir es que se respeten los derechos humanos, los derechos fundamentales, y que ese grupo que ha sido un cáncer para la nación desaparezca del poder en Cuba. Mientras esos individuos puedan disponer de la vida de cualquier cubano en los términos en que lo hacen, en Cuba sencillamente no podrá haber democracia.

JGF: Los Estados Unidos han estado presentes por obvias razones en el devenir de la nación cubana. Primero borraron la presencia española y dieron paso a la república, después, afirmaron al imperio soviético y al régimen militar que sufrimos. Para muchos, son y han sido el aliado más persistente de los demócratas cubanos, aunque no siempre el mejor aliado o el más confiable. ¿Cuál sería la expectativa lógica de la nación cubana para el momento actual, en relación con la actitud que asumirían los Estados Unidos?

AGR: Creo que lo que esperamos, no solo de los EEUU, sino de toda la comunidad internacional, es que ejerzan la presión necesaria y que pongan reglas bien claras a este régimen que con esta maniobra lo que busca es legitimidad internacional, pues para transmitirle el poder a esa nueva generación de sus hijos y aliados necesita el apoyo y la aceptación de la comunidad internacional. Espero que los países demócratas tengan bien claras sus posiciones y exijan al régimen de La Habana lo mismo que se les ha exigido a otros regímenes dictatoriales en el planeta. Lo principal es que se priorice el respeto a los derechos fundamentales, a las libertades individuales, y que se exija que Cuba pueda volver a ser una nación democrática. Eso es lo primero que esperamos: que se le exija al régimen que acepte que sus ciudadanos puedan disfrutar de los mismos plenos derechos de que disfruta cualquier ciudadano en cualquier nación democrática.

JGF: Estado de Sats desde una proyección inicial artística, literaria e incluso académico-intelectual, derivó hacia espacios políticos que delinean contornos cada vez más fuertes. ¿A qué se ha debido esta deriva?

AGR: La verdad es que la política siempre me ha gustado y me ha interesado. Esta transformación no fue forzada, aunque evidentemente los ataques y la represión del régimen crean una verticalidad en el trabajo que uno hace. Está claro que el régimen reprime cualquier proyecto que se salga de los parámetros por él establecidos. En nuestro caso, esa represión se fue incrementando sobre todo a partir del año pasado (2013), cuando celebramos el tercer año del proyecto: Hubo una fiesta –incluso para niños- a la cual vinieron más de 200 personas, y por supuesto, los que monitorean nuestro trabajo estimaron que la situación se les podía ir de las manos y dijeron: "Hasta aquí llegaron".
A partir de ahí la represión fue mucho más persistente, hasta terminar con aquel gran circo para el cual incluso trajeron a menores de edad, en diciembre de 2013, cuando teníamos planificado un evento sobre derechos humanos (al cual tú estabas invitado, pero no te dejaron llegar).

Creo que Estado de SATS ha sufrido una evolución natural: un proyecto que desde el principio intentaba dibujar la situación existente en el país y proyectarse hacia el futuro, evidentemente en un régimen totalitario como el que estamos viviendo no tenía muchas opciones. A mí en lo particular me ha gustado, a pesar de lo difícil que ha sido, de los contratiempos, de las cuestiones familiares, de lo duro que ha sido el trayecto, me agrada lo que estoy viviendo.
Me agrada la cantidad de personas -amigos o conocidos- con las cuales compartimos ideas y puntos de vista. Creo que ha sido una experiencia muy interesante, y me parece que todavía queda mucho por ver.

JGF: ¿Hay algo que desees dejar a los lectores para la reflexión, el análisis o para un alerta necesario?

AGR: Te quería mencionar en lo que estamos enfocados ahora mismo, que es la campaña "Por otra Cuba". Decidimos comenzarla en el 2012, y lo que busca es demandarle al régimen la ratificación y sobre todo la implementación de los dos pactos fundamentales de la ONU (el Pacto de los Derechos Civiles y Políticos y el Pacto de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales). Creo que lo interesante de esta campaña es que le exige al régimen que complete un trámite que ya ha comenzado. Evidentemente, la perspectiva que tenía Raúl Castro cuando mandó a Felipe Pérez Roque a dar aquella firma en el 2008 era simplemente dar la impresión de que el régimen iba a tener otro rostro. Pero por supuesto, la realidad le ha demostrado que, como se dice en buen cubano: si afloja, pierde. Entonces, ha procurado dejar inconcluso aquel amago. La campaña "Por otra Cuba" exige la conclusión de este trámite, que me parece que puede traer grandes cambios para la nación.

Considero importante que en la oposición o en el activismo nos propongamos objetivos parciales, pues es evidente que ahora mismo es casi imposible pensar en qué ocurrirá en el momento del cambio, sobre todo en un país tan fragmentado como el nuestro (nuestros gobernantes han logrado romper las estructuras sociales y económicas del país). Me parece que el tema de los pactos es muy claro, muy objetivo, se entiende en toda la comunidad internacional, así como en Cuba (es lo que la mayoría de los opositores piden). Por lo tanto, demandarle al régimen que ratifique esos pactos puede ser un buen punto de inicio.

Me gustaría hacer un llamado a todas las personas a quienes les pueda interesar este proyecto, para que mediten un poco sobre el tema, y sería maravilloso tener su colaboración para tratar de conseguir el cambio que Cuba pide a gritos.


Para Cuba actualidad: j.gonzalez.febles@gmail.com
Fotos: Ailer González Mena
Antonio Rodiles