EMOTIVA AUDIENCIA EN MIAMI SOBRE LA I9NMIGRACION
JOAQUIM UTSET
El Nuevo Herald
El general Peter Pace, el oficial de mayor rango en las fuerzas armadas, suele ser el rostro ante el mundo del inmenso poderío militar de Estados Unidos. Ayer, en Miami, fue el símbolo de la carga emocional que rodea al delicado debate inmigratorio que vive el país.
El Jefe del Estado Mayor Conjunto tuvo que contener las lágrimas e interrumpir su testimonio ante el Comité de Servicios Armados del Senado al recordar el ejemplo de su padre, un inmigrante italiano que trabajó de electricista en Nueva York toda su vida para labrarle un futuro a sus cuatro hijos en su país de adopción.
''Mi padre llegó aquí, a veces tuvo tres trabajos, pero esos trabajos estaban ahí y las oportunidades estaban ahí. No hay otro país en el planeta que ofrezca esa oportunidades a los que vienen'', dijo el general Pace.
La insólita imagen del militar más poderoso de la Tierra prácticamente llorando en público fue el momento más emotivo de la audiencia celebrada en el Miami Dade College, en la que se recabó testimonio sobre la contribución de los inmigrantes a las fuerzas armadas como parte del debate nacional sobre la reforma migratoria que sopesa el Congreso.
Más de 24,000 miembros en activo de las actuales fuerzas armadas no son ciudadanos estadounidenses.
Unos 200 han sido condecorados por sus acciones en las guerras de Irak y Afganistán, mientras que otros 101 han perdido la vida, dijo Pace.
A preguntas del comité, Pace defendió el comportamiento y la entrega de los militares inmigrantes en combate, además de señalar que abandonan en menor proporción el ejército durante el duro período de instrucción. ''Tienen coraje y uno puede contar con ellos'', agregó el general.
Según el Pentágono, más de 24,745 miembros de las fuerzas armadas han sido naturalizados desde los atentados del 9/11, algunos en ceremonias realizadas en las cubiertas de portaviones o en los campamentos militares de Irak y Afganistán.
''Lo que hoy hemos escuchado de manera tan elocuente es el corazón de este asunto de la reforma inmigratoria, la dedicación y el servicio de los inmigrantes a este país'', valoró el senador demócrata Edward Kennedy, quien estuvo presente en la audiencia junto a sus colegas republicanos senador Mel Martínez, John McCain, Lindsey Graham y John Warner, el presidente del comité.
La audiencia de ayer forma parte de las tensa pugna en el Congreso entre el Senado, que apuesta por abrir una vía a la legalidad a los indocumentados, y la Cámara de Representantes que se enfoca exclusivamente en medidas represivas.
''Cuando las balas vuelan, nadie te pregunta de dónde eres'', recordó el mexicoamericano Alfredo Rascón, ganador de la Medalla de Honor en Vietnam, durante su intervención ante el comité.
jutset@elnuevoherald.com
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home