EN BUSCA DEL HOMBRE DEL MALETIN
La Policía Internacional busca al empresario venezolano que en un viaje oficial iba a introducir en Argentina $790,000 sin declarar
J. J. Fernández y J. F. Alonso
El País
Infosearch:
Máximo Tomás
Dept de Investigaciones
La Nueva Cuba
Agosto 26, 2007
Guido Antonini Wilson. Para la inmensa mayoría de los venezolanos ese nombre no significaba nada hasta que el pasado 7 de agosto la prensa argentina reveló que a este empresario le fue incautado un maletín en el aeropuerto bonaerense Jorge Newbarry con $790,000.
Antonini Wilson pretendía ingresar el dinero en el país sureño sin declarar. Desde entonces, el apellido Antonini no ha abandonado las primeras páginas y los informativos radiales y televisivos de ambas naciones latinoamericanas. “El Gordo”, como ha tildado la televisión argentina Todo Noticias a Antonini, llegó a Buenos Aires, procedente desde Caracas, en la madrugada del 4 de agosto. El avión en que viajó fue fletado por la empresa estatal petrolera argentina Enarsa para transportar a varios funcionarios de esa compañía y de la venezolana Petróleos de Venezuela (PDVSA), los cuales se disponían a finiquitar una serie de acuerdos que horas después firmarían los presidentes Néstor Kirchner y Hugo Chávez, durante la visita que este último hizo.
( Guido Antonini Wilson )
Las primeras informaciones apuntaron a que Antonini era parte de la comitiva del mandatario venezolano, lo cual fue corregido después y le sirvió a Chávez para afirmar que “era parte de la campaña del imperio para impedir la integración latinoamericana y lograr aislar a Venezuela”.
Nada más divulgarse la información del incidente en Argentina se inició una investigación. Sin embargo, sin que nadie haya logrado explicar por qué, ninguna autoridad impidió al empresario salir de Argentina rumbo a Uruguay. La jueza del caso, Marta Novatti, ha asegurado que las autoridades aduaneras no le informaron que sospechaban de la comisión del delito de contrabando de dinero y que se habían limitado a decirle que el venezolano incurrió en una falta administrativa. El empresario prometió colaborar y que se trasladaría hasta Buenos Aires para “aclarar todo”, pero no lo ha hecho, razón por la cual la jueza Novatti ha solicitado a Interpol que lo capture.
En Venezuela, el fiscal general, Isaías Rodríguez, en un principio se negó a investigar, alegando que el hecho ocurrió en Argentina. Ni siquiera porque en Venezuela desde hace tres años por ley se impide a los venezolanos disponer de más de $20,000 en efectivo. Luego, Rodríguez encomendó la tarea de determinar si Antonini salió del país con el dinero y cómo lo obtuvo.
Sobre Antonini es poco lo que ha trascendido en Venezuela. El responsable de la administración tributaria, José Vielma Mora, días atrás dijo que es un empresario muy vinculado a PDVSA, pero desde esa empresa se matizó esa información: “Muchos empresarios han tenido o tienen vínculos con nosotros”. También se le vincula con el gobernador del estado de Cojedes, el chavista Jhonny Yáñez, quien se limitó a decir que no conoce de las actividades de Antonini. La prensa argentina publicó hace poco una fotografía en la que se ve a Antonini y a Yáñez juntos a la entrada de un hotel en Uruguay.
El incidente le ha costado, hasta el momento, el puesto a dos funcionarios: uno argentino, Claudio Uberti, responsable de las concesiones viales en Argentina y considerado el vínculo entre los gobiernos de Kirchner y Chávez y a quien se señala de tratar de impedir que le fuera revisada la maleta a Antonini en el aeropuerto. El otro es Daniel Uzcátegui Matheus, gerente general de PDVSA América y cuyo hijo, Daniel Uzcátegui, fue quien le permitió a Antonini abordar el avión.
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