jueves, febrero 21, 2008

EL TURNO DE LOS MORTALES

Nota del Blogguista

Todavía el autor siente admiración y atracción hacia el tirano y dice por ejemplo, ¨...En realidad, era una estratagema para sacudirse de toda la retranca aún pálidamente contrarrevolucionaria que minaba su estructura ¨ cuando esa estratagema era realmente un Golpe de Estado al primer Gobierno Revolucionario, traicionando así los ideales de la Revolución y un gran paso hacia la instauración de la dictadura totalitaria con la que ha sometido duramente medio siglo al pueblo cubano.
*******************************
EL TURNO DE LOS MORTALES

Por Norberto Fuentes
La Tercera
Chile
Infosearch:
José F. Sánchez
Analista
Jefe de Buró
Cuba
Dept. de Investigaciones
La Nueva Cuba
Febrero 20, 2008

El primer efecto de la noticia es que va a amortiguar la de su muerte. Ya no va a ser lo mismo nunca. Otro gobierno en otras circunstancias estará actuando en el país cuando finalmente -cualquiera que sea la fecha en que esto ocurra-, se informe del fallecimiento de Fidel Castro. Ahora consideremos los hechos inmediatos. El primero es que, una vez más, muy gravemente enfermo, sin su viejo uniforme de combate, despojado de sus vistosas charreteras de Comandante en Jefe, y lastimosamente ataviado con un buzo que no pega en su situación de salud, él está aún en plena capacidad de sorprendernos. Una vez más. Si no, revisen las primeras planas y las pantallas de sus computadores.

Paradójicamente la última vez que anunció la renuncia a sus cargos fue en la edición del 17 de julio de 1959 del periódico Revolución. El propio Fidel escogió en los talleres del periódico los tipos más grandes para anunciar, apenas con seis meses en el poder, que la presidencia de Manuel Urrutia le hacía imposible su gestión como primer ministro del gobierno revolucionario. En realidad, era una estratagema para sacudirse de toda la retranca aún pálidamente contrarrevolucionaria que minaba su estructura. Es decir, en aquella fecha renunció pero para dar inicio a una revolución. El anuncio de ayer tiene todas las resonancias de que es para terminarla. El Presidente ahora es él mismo, y debe dar paso a un nuevo equipo de gobierno, que de seguro en el área política se dirigirá hacia aguas de moderación y con los radares en barridos de alerta permanente ante cualquier amago de galerna. Es como la luz de una lámpara que discreta, furtivamente debe ser apagada.

( Raúl Castro, el autor Norberto Fuentes y Fidel Castro )

No va a producirse una crisis de poder en el futuro inmediato, nada de sublevaciones callejeras ni de cadáveres de comunistas colgados de las farolas, y es el segundo y más relevante de los asuntos inmediatos. El país, entero, completo, sin fisuras, está bajo control. Llevan más de un año trabajando el terreno, y las noticias que se han filtrado recientemente sobre el recrudecimiento de la represión indican que el gobierno y su policía política se preparaban desde hace semanas para la noticia de esta madrugada. El puño de hierro suele tomarse la delantera en Cuba. Aparte de que, como sabemos, Fidel se alejó del poder desde que se creyó en brazos de la muerte a fines de julio de 2006 y cedió sus cargos a su hermano Raúl y otros de sus compañeros. Así que estamos ante una formalidad. La sustancia en realidad ocurrió antes. Por lo menos en su forma inicial. Y creo que Raúl Castro, hasta ahora, la ha estado aprovechando.

Sabiendo como él sabe que toda la poderosa mística de la Revolución Cubana acaba de extinguirse, Raúl Castro se enfrenta ahora no sólo a su prueba de fuego personal sino a la posibilidad cierta de que todo se le vaya de las manos en un santiamén.

La pregunta inevitable es si la Revolución desaparecerá bajo las reformas de Raúl Castro y su grupo. Acaso la biología impostergable, la muerte del principal combatiente cubano, será el episodio final de aquella historia que llenó la imaginación (y no pocas veces también atizó el encono) de millones de personas en todos los rincones del planeta. La única señal actual desde Cuba de que Raúl Castro y sus allegados quieren conservar la Revolución (que puede ser una forma de describir el poder que Fidel les lega) es ese aumento de la represión. Al menos que tengan miedo por sus propias vidas, puede resultar una fórmula políticamente correcta en las actuales circunstancias. Los obliga a ser cautelosos y magnánimos, y los veremos calibrar todas sus acciones.

Entonces tienen que meterle mano a la economía. Ese es el más peligroso de los flancos expuestos al enemigo. Todo lo que hay en este momento de debilidad en el régimen se llama precariedad económica. Desde luego que esa era la Revolución de Fidel Castro, una en la que se desayunaba, almorzaba y cenaba ideología. Y desde luego que en ese sentido nunca más la Revolución será igual. El otro flanco, el que ya está perdido irremediablemente, es el de Fidel y su mística, Fidel y su afán de gloria (del que sabía contagiarnos tan bien), y sus ejércitos y sus equipos de pelota y sus paseos triunfales por el universo y el humo de sus grandes habanos expelidos como cachetadas en las narices de 10 presidentes norteamericanos. Estará en su cama de caudillo consejero, prudente y sabio -como él mismo se anuncia ("Tal vez mi voz se escuche. Seré cuidadoso"), pero ¿de qué leño se afincará el fuego?

Fidel tiene que sentirse muy mal. Esas tripas de cristal lo han traicionado y de paso le han hecho una pesada jugarreta a sabe Dios cuántos miles o millones de cubanos que aún querían que aguantara. En todas las llamadas que recibo se reitera una declaración: la impresión que les causa saber que Fidel Castro ya no es el Comandante en Jefe. Creo entenderlo. Es el cambio de intensidad de radiación que demarca la diferencia entre la épica y la vida cotidiana. Fidel Castro sucumbe ante su última tentación. No morirá con las botas puestas. Va a hacerlo con unas zapatillas deportivas Adidas.

Por último, en su beneficio, aceptemos que sólo su grave estado de salud explica la decisión. No nos precipitemos en la despedida. Le quedaría una última batalla, la posibilidad cierta de una última victoria. Que consiga estabilizar un proceso de transición y que las cosas sean ordenadas y fluidas. Muy extraño lo que está en juego: no son sus ideas desbordadas y la pasión sin límites que las impulsaba, si no las estructuras de gobierno, ese andamiaje burocrático contra el cual se rebeló tantas veces y al que veía con desconfianza y tan asfixiante como una camisa de fuerza, pese a ser su hechura. ¿Qué tiempo de vida le queda? ¿Tendrá tiempo para otra sorpresa? Cualquiera que sea el futuro, la responsabilidad de Raúl Castro y los otros substitutos es protegerlo de la visión apocalíptica del desastre.

Norberto Fuentes, fue el escritor cubano favorito del régimen de Castro. Es autor de "Dulces guerreros cubanos" y "La autobiografía de Fidel Castro". Vive en Miami desde 1994.

***********************

NORBERTO FUENTES PREDICE "FUTURO INCIERTO" PARA RAUL CASTRO

Terra
España
Infosearch:
José F. Sánchez
Analista
Jefe de Buró
Cuba
Dept. de Investigaciones
La Nueva Cuba
Febrero 20, 2008

El escritor cubano Norberto Fuentes predijo un 'incierto futuro' a Raúl Castro, que el domingo puede ser elegido nuevo gobernante de Cuba tras la decisión de su hermano Fidel de no aspirar de nuevo a la presidencia.

Raúl Castro 'enfrenta ahora no sólo la prueba de fuego personal sino la posibilidad cierta de que todo se le vaya de las manos de un santiamén', afirmó Fuentes en un artículo que publica hoy el diario chileno La Tercera.

Fuentes, biógrafo de Fidel Castro, analiza en el artículo las consecuencias de la decisión que Fidel anunció este martes.

El próximo domingo, la asamblea popular de Cuba designará al sucesor de Fidel y todo hace prever que el elegido será Raúl, que ha ejercido el poder de forma interina desde que su octogenario hermano cayó enfermo en julio de 2006.

El autor de 'Dulces guerreros cubanos', exiliado en Miami desde 1994, da por hecho que Raúl Castro está consciente de que la 'poderosa mística de la Revolución acaba de extinguirse' y cree que por ello impulsará reformas.

En ese contexto, subraya el incierto futuro que espera a Raúl, aunque también sostiene que el alejamiento de Fidel fue una mera formalidad, ya que se preparaba desde hace tiempo.

El autor de la 'Autobiografía de Fidel Castro' sostiene, no obstante, que no es esperable 'una crisis de poder en el futuro inmediato'. 'nada de sublevaciones callejeras ni de cadáveres comunistas colgados de las farolas', agrega

'El país entero, sin fisuras, está bajo control. Llevan más de un año trabajando el terreno, y las noticias que se han filtrado recientemente sobre el recrudecimiento de la represión indican que se preparaban hace semanas para este anuncio', agrega.

El artículo de Fuentes, definido por La Tercera como 'el escritor cubano favorito del régimen castrista', es una de las numerosas publicaciones que la prensa chilena dedica hoy a la decisión de Fidel Castro, incluidas notas editoriales del mismo periódico y de El Mercurio.

Según La Tercera, la renuncia de Fidel abre paso a una 'transición impredecible', aunque en otra nota prevé en Cuba una nueva versión del 'modelo Deng Xiaoping', en alusión a la decisión del líder chino que en 1989 dejó su cargo, también por razones de salud, pero continuó ejerciendo el poder desde las sombras.

El diario El Mercurio, en tanto, afirma que con la renuncia de Fidel, en Cuba 'se abre ahora la incógnita y la esperanza de una transición', aunque indica que 'probablemente deberá esperar un mediano plazo'.