jueves, febrero 25, 2010

COMPARACIÓN Y DIFERENCIAS DE LAS CONDICIONES CARCELARIAS DEL ASESINADO ORLANDO ZAPATA TAMAYO Y DE FIDEL CASTRO RUZ

COMPARACIÓN Y DIFERENCIAS DE LAS CONDICIONES CARCELARIAS DEL ASESINADO ORLANDO ZAPATA TAMAYO
Y LAS DE
FIDEL CASTRO RUZ


Orlando Zapata Tamayo, Prisionero de Conciencia, fue a la huelga de hambre pidiendo las más elementales condiciones de vida y de dignidad en su injusta prisión política: cese de las golpizas por parte de sus carceleros, no vestir la ropa de preso común, etc.

Orlando Zapata Tamayo, Prisionero de Conciencia, no pedía comodidades como las que disfrutó Fidel Castro y demás asaltantes al Cuartel Moncada y que están reflejadas en la correspondencia personal del futuro tirano; dos fragmentos reproduzco a continuación:


En la foto vemos a Fidel Castro en el Presidio Modelo de Isla de Pinos en una de las visitas de su hijo Fidelito Castro Díaz-Balart a la cárcel donde cumplía condena por el sangriento ataque al Cuartel Moncada el 26 de julio de 1953 donde decenas de personas murieron y otras decenas fueron heridos. Fue condenado a 15 años pero sólo cumplieron apenas 2 años por una Amnistía General que aprobó el dictador Fulgencio Batista.

Comunicaron mi celda con otro departamento cuatro veces mayor y un patio grande, abierto desde las 7 am hasta las 9pm. No tenemos recuento ni formaciones en todo el día. Nos levantamos a cualquier hora, (tenemos) agua abundante, comida y ropa limpia. No sé, sin embargo, cuánto tiempo más vamos a estar en este paraíso”

........
.........Justify Full

“Como soy cocinero, de vez en cuando, me entretengo preparando algún pisto. Hace poco me mandó mi hermana desde Oriente un pequeño jamón y preparé un bistec con jalea de guayaba. También preparo espaguetis de vez en cuando, o bien tortilla de queso. Arreglé mis cosas y reina aquí el más absoluto orden. Las habitaciones del Hotel Nacional no están tan limpias. Me estoy dando dos baños obligado por el calor, cuando cojo sol por la mañana en shorts, siento el aire de mar, que me parece que estoy en una playa, luego un pequeño restaurant aquí, me voy a cenar espaguetis con calamares, bombones italianos de postre, café acabadito de colar y después un H Upman número 4”


Mario Chánes de Armas, asaltante al Cuartel Moncada yexpedicionario del yate Granma, quien sufrió tanto la cárcel del régimen de Fulgencio Batista como la del régimen de Fidel Castro, en la que cumplió hasta el último día la condena de 30 años de prisión, valoró ambos presidios y dijo que comparando a ambos presidios, el presidio de Batista era el Paraiso y el de Fidel el Infierno. Esas palabras se encuentran en videos de YouTube y en documentales del Instituto de la Memoria Histórica de la Lucha del Pueblo Cubano contra el Totalitarismo.
**************

Notadel Bloguista de Baracutey Cubano

En la Cámara de Representantes, el Dr. Rafael L. Díaz-Balart fue el único que se opuso a que la Amnistía General incluyera a Fidel Castro y demás Moncadistas; en el Senado el único que se opuso fue el Dr. Santiago Rey Pernas. No estarían equivocados aquellos que los llamaran ¨Los Nostradamos¨ cubanos, aunque Rafael se quedó bastante corto en la cantidad de años que dio como cota inferior para derrocar al régimen Castrista.


DISCURSO DEL DR. RAFAEL L. DÍAZ-BALART

Este discurso fue pronunciado en la Cámara de Representantes de la República de Cuba en mayo del año 1955 por el Dr. Rafael L. Díaz-Balart, en ese momento el líder de la mayoría y presidente del comité parlamentario de la mayoría en la Cámara, contra la ley que amnistió a Fidel Castro y demás asaltantes al cuartel Moncada, cuando habían cumplido solamente dos años de cárcel y después de haber sido condenados por un tribunal civil. Castro había recibido una condena de 15 años.

La Amnistía (1955)

Por Rafael Díaz-Balart

Señor Presidente y Señores Representantes:

He pedido la palabra para explicar mi voto, porque deseo hacer constar ante mis compañeros legisladores, ante el pueblo de Cuba y ante la historia, mi opinión y mi actitud en relación con la amnistía que esta Cámara acaba de aprobar y contra la cual me he manifestado tan reiterada y enérgicamente.

No me han convencido en lo más mínimo los argumentos de la casi totalidad de esta Cámara a favor de esa amnistía.

Que quede bien claro que soy partidario decidido de toda medida a favor de la paz y la fraternidad entre todos los cubanos, de cualquier partido político o de ningún partido, partidarios o adversarios del gobierno. Y en ese espíritu sería igualmente partidario de esta amnistía o de cualquier otra amnistía.

Pero una amnistía debe ser un instrumento de pacificación y de fraternidad, debe formar parte de un proceso de desarme moral de las pasiones y de los odios, debe ser una pieza en el engranaje de unas reglas de juego bien definidas, aceptadas directa o indirectamente por los distintos protagonistas del proceso que se esté viviendo en una nación.

Y esta amnistía que acabamos de votar desgraciadamente es todo lo contrario. Fidel Castro y su grupo han declarado reiterada y airadamente, desde la cómoda cárcel en que se encuentran, que solamente saldrán de esa cárcel para continuar preparando nuevos hechos violentos, para continuar utilizando todos los medios en la búsqueda del poder total a que aspiran. Se han negado a participar en todo proceso de pacificación y amenazan por igual a los miembros del gobierno que a los de oposición que deseen caminos de paz, que trabajen a favor de soluciones electorales y democráticas, que pongan en manos del pueblo cubano la solución del actual drama que vive nuestra patria.

Ellos no quieren paz. No quieren solución nacional de tipo alguno, no quieren democracia ni elecciones ni confraternidad.

Fidel Castro y su grupo solamente quieren una cosa: el poder, pero el poder total, que les permita destruir definitivamente todo vestigio de Constitución y de ley en Cuba, para instaurar la más cruel, la más bárbara tiranía, una tiranía que enseñaría al pueblo el verdadero significado de lo que es tiranía, un régimen totalitario, inescrupuloso, ladrón y asesino que sería muy difícil de derrocar por lo menos en veinte años. Porque Fidel Castro no es más que un psicópata fascista, que solamente podría pactar desde el poder con las fuerzas del Comunismo Internacional, porque ya el fascismo fue derrotado en la Segunda Guerra Mundial, y solamente el comunismo le daría a Fidel el ropaje pseudo-ideológico para asesinar, robar, violar impunemente todos los derechos y para destruir en forma definitiva todo el acervo espiritual, histórico, moral y jurídico de nuestra República.

Desgraciadamente hay quienes, desde nuestro propio gobierno tampoco desean soluciones democráticas y electorales, porque saben que no pueden ser electos ni concejales en el más pequeño de nuestros municipios.

Pero no quiero cansar más a mis compañeros representantes. La opinión pública del país ha sido movilizada a favor de esta amnistía. Y los principales jerarcas de nuestro gobierno no han tenido la claridad y la firmeza necesarias para ver y decidir lo más conveniente al Presidente, al Gobierno y, sobre todo, a Cuba. Creo que están haciéndoles un flaco servicio al Presidente Batista, sus Ministros y consejeros que no han sabido mantenerse firmes frente a las presiones de la prensa, la radio y la televisión.

Creo que esta amnistía tan imprudentemente aprobada, traerá días, muchos días de luto, de dolor, de sangre y de miseria al pueblo cubano, aunque ese propio pueblo no lo vea así en estos momentos.

Pido a Dios que la mayoría de ese pueblo y la mayoría de mis compañeros Representantes aquí presentes, sean los que tengan la razón.

Pido a Dios que sea yo el que esté equivocado.

Por Cuba.
********************
ALGUNOS COMENTARIOS DEJADOS

Ricardo E. Trelles ha dejado un nuevo comentario en su entrada "COMPARACIÓN Y DIFERENCIAS DE LAS CONDICIONES CARCE...":

Excelente argumentación de Rafael Díaz-Balart. Pero, ¿no fue hecha tarde, *después de la votación*? Si la hubiera hecho antes, era redundante después. ¿Argumentó con la misma solidez al Congreso y a los medios de comunicación a tiempo?

Sé que es ventajoso criticar contando con la experiencia que da el tiempo transcurrido. Pero hay que criticar para evitar el conformismo de llevar a Cuba a "como era antes".

Tenemos que progresar polìtica e intelectualmente para lograr establecer una nueva Cuba *mucho mejor que lo que nunca fue*. Si no aspiramos y trabajamos para eso con efectividad, podemos terminar con una Cuba *mucho peor que lo que ha sido*.

>>
"Creo que esta amnistía tan imprudentemente aprobada..."

*************
Nota del Bloguista

Estimado R. Trelles. En efecto, debemos de aprender de nuestros errores como pueblo y teniéndolos en cuenta conjuntamente con lo mejor de nuestra historia republicana, construir una nueva Cuba, una nueva nación. No obstante, dudo que pueda haber algo peor que la Cuba Castrista cuando tenemos en cuenta crueldad, amplitud y duración del tormento.
*************
Ricardo E. Trelles ha dejado un nuevo comentario en su entrada "COMPARACIÓN Y DIFERENCIAS DE LAS CONDICIONES CARCE...":

Apreciado Blogista:

Sin ánimo de polemizar (aunque también podríamos polemizar cordialmente si fuera necesario y provechoso), tengo que afirmar que *sí podemos estar peor que lo que estamos ahora*.

De hecho tengo el triste estimado de que *vamos a estar crecientemente peor en el futuro mediato* si todo sigue como va. Para alterar ese estimado trabajo con mis muy pocas posibilidades.

Sucede que, según percibo nuestra situación, no se aprecia por ningún lado una alternativa viable al régimen actual y no se está trabajando para desarrollarla y ni parece que se comienza a entender que hay que desarrollarla. Tremendo, ¿eh? Hay dos alternativas, negar la situación y seguir viviendo de justificaciones y acciones inefectivas, o contener al pánico y empezar por el principio de la solución, con el esfuerzo y el tiempo que requiere.

Si nosotros no hacemos (entendemos, concebimos y emprendemos) lo que hay que hacer, el régimen seguirá adaptándose a las dificultades para mantenerse sin importarle las consecuencias para el País, como hasta ahora. Sin oposición efectiva, es muchìsimo lo que el règimen puede hacer todavía. Hasta fabricarse una oposición sometida, que ni siquiera ha sentido que le es importante todavìa. Y hunde mucho más el País para mayor sufrimeinto de la mayoría y beneficio de una, quizás un poquito creciente, minoría.

Hay muchas maneras de estar mal y muchas maneras para el empeoramiento, al menos de muchos.

Un abrazo,

Ricardo

2 Comments:

At 12:43 a. m., Anonymous Ricardo E. Trelles said...

Excelente argumentación de Rafael Díaz-Balart. Pero, ¿no fue hecha tarde, *después de la votación*? Si la hubiera hecho antes, era redundante después. ¿Argumentó con la misma solidez al Congreso y a los medios de comunicación a tiempo?

Sé que es ventajoso criticar contando con la experiencia que da el tiempo transcurrido. Pero hay que criticar para evitar el conformismo de llevar a Cuba a "como era antes".

Tenemos que progresar polìtica e intelectualmente para lograr establecer una nueva Cuba *mucho mejor que lo que nunca fue*. Si no aspiramos y trabajamos para eso con efectividad, podemos terminar con una Cuba *mucho peor que lo que ha sido*.

>>
"Creo que esta amnistía tan imprudentemente aprobada..."

 
At 3:56 a. m., Anonymous Ricardo E. Trelles said...

Apreciado Blogista:

Sin ánimo de polemizar (aunque también podríamos polemizar cordialmente si fuera necesario y provechoso), tengo que afirmar que *sí podemos estar peor que lo que estamos ahora*.

De hecho tengo el triste estimado de que *vamos a estar crecientemente peor en el futuro mediato* si todo sigue como va. Para alterar ese estimado trabajo con mis muy pocas posibilidades.

Sucede que, según percibo nuestra situación, no se aprecia por ningún lado una alternativa viable al régimen actual y no se está trabajando para desarrollarla y ni parece que se comienza a entender que hay que desarrollarla. Tremendo, ¿eh? Hay dos alternativas, negar la situación y seguir viviendo de justificaciones y acciones inefectivas, o contener al pánico y empezar por el principio de la solución, con el esfuerzo y el tiempo que requiere.

Si nosotros no hacemos (entendemos, concebimos y emprendemos) lo que hay que hacer, el régimen seguirá adaptándose a las dificultades para mantenerse sin importarle las consecuencias para el País, como hasta ahora. Sin oposición efectiva, es muchìsimo lo que el règimen puede hacer todavía. Hasta fabricarse una oposición sometida, que ni siquiera ha sentido que le es importante todavìa. Y hunde mucho más el País para mayor sufrimeinto de la mayoría y beneficio de una, quizás un poquito creciente, minoría.

Hay muchas maneras de estar mal y muchas maneras para el empeoramiento, al menos de muchos.

Un abrazo,

Ricardo

 

Publicar un comentario

<< Home