Hubo dos jefes guerrilleros llamados Pedro Sánchez, este es el de Pinar del Río: Pedro Celestino Sánchez Figueredo
Alzados muertos
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Escambray: La Guerra Olvidada Un Libro Historico De Los Combatientes Anticastristas En Cuba (1960-1966)
Enrique G. Encinosa
XIV
EL FRENTE NORTE DE LAS VILLAS Y CAMAGÜEY
Al
igual que en Pinar del Río, en la Provincia de Camagüey hubo pocos
alzamientos en comparación con otras Provincias, donde miles de hombres
se alzaron. Pero a pesar de los reducidos núcleos de alzados, el frente
norte de Las Villas y Camagüey fue una zona muy activa de los focos
guerrilleros.
El 10 de octubre de 1961, Rolando Martín Amodea, un
ex piloto de la Fuerza Aérea y ex oficial del Ejército Rebelde, se alzó
en Camagüey, con nueve hombres. Una de sus más destacadas acciones, fue
el asalto a las minas de asfalto de Perea, donde los alzados
destruyeron equipos, quemaron un edificio y capturaron las armas de la
posta. La guerrilla se mantuvo activa por varios meses hasta que fue
desmembrada. Martín Amodea se desplegó hacía La Habana, donde fue
capturado el 25 de septiembre de 1964 y se presume que fue fusilado por
el régimen.
El 8 de julio de 1961, otro ex miembro del Ejército
Rebelde, Arnoldo Martínez Andrade, armado de un FAL belga comenzó a
vertebrar una guerrilla en el norte de Las Villas. La primera acción
significativa de la guerrilla de Amoldo Martínez, tuvo lugar el 18 de
septiembre, cuando tomó el poblado de Río, donde nueve milicianos fueron
heridos en cómbate. Al mes siguiente, en la finca Juan Velozo, la
guerrilla rgmpió un cerco en el que murieron dos milicianos. El 20 de
noviembre la milicia les tiende otro cerco en la finca Las Flores, pero
la guerrilla logra huir. Pedro Pino, uno de los hombres de Arnoldo murió
en este combate. A pesar del constante acoso, Arnoldo y sus hombres
lograron quemar sembradíos en la zona Caibarién y Chambas, también
tirotearon un vehículo del régimen en la carretera del circuito norte.
En el mes de diciembre los alzados quemaron un jeep del Central
Adelaida, mataron a dos milicianos en las cercanías de Sagua la Grande,
destruyeron el tren del Central Narcisa y eludieron un cerco de milicia
en Aguada de Pasajeros. A comienzos de 1962, y perseguidos por
centenares de milicianos y soldados, el reducido grupo de valientes
guerrilleros rompieron un cerco en Guavabo, capturaron seis rifles de la
cooperativa del Barrio Amarillo, y quemaron un camión del régimen en la
carretera de Meneses.
Aunque nunca existieron más de seis grupos
con un total de setenta combatientes, los alzados del frente norte de
Las Villas y Camagüey se mantuvieron activos desde 1961 hasta finales de
1965. Las bajas que le causaron al aparato militar del régimen fueron
numerosas e incendiandos muchos edificios y vehículos del gobierno.
Entre
los jefes guerrilleros más conocidos que operaron en esa zona y durante
diferentes períodos de esta guerra, se encontraban Juan Martínez
Andrade, el hermano de Arnoldo, y Manolito López, apodado El Loco. López
era un muchacho de sangre fría que se había alzado a principios de
1960, cuando era menor de edad. Capturado, fue enviado a la cárcel para
menores de Torrens, de la cual escapó para alzarse nuevamente. Para
fines de 1961, López se había convertido en uno de los jefes
guerrilleros más odiados por la milicia de Camagüey.
Otros jefes
guerrilleros fueron Floro Camacho y Everardo Díaz Brunet, conocido por
Frías, ambos veteranos del Ejércitd Rebelde, y Mario Bravo, que era
barbero y en su historia guerrillera consta que logró eludir docenas de
cercos. También se destacó mucho un carnicero de Iguara, Adalberto
Méndez Esquijaroza, llamado El Quia, que medía seis pies y medio y
pesaba más de doscientas libras de puro músculo. El Quija era un hombre
arriesgado, en una ocasión logró romper un cerco robándose un caballo de
un potrero y cruzando al galope las líneas de miicias, a la vez que
disparaba dos ametralladoras M3 como si fueran pistolas. En otra acción
El Quija fue herido por una ráfaga de ametralladora, y a pesar de tener
cinco balas en su cuerpo, logró evadir el cerco. Adalberto Mendez
Esquijaroza El Quija estuvo activo en la zona norte desde 1961 hasta
1963, año en que se desplazó a la zona del Escambray, donde
supuestamente fue capturado y fusilado.
El Quinto Cuerpo del
Ejército de Camagüey contaba con aproximadamente treinta mil hombres
dirigidos por el Comandante Demetrio Monseney Villa; y tenía varias
compañías especiales de Lucha Contra Bandidos (LCB)que eran dirigidas
por el primer teniente Manuel Castañeda, y los tenientes Dennis
Carvajal, Teobaldo Castillo, Emilio Reyes, Francisco Márquez Mola y el
Capitán Pedro Nodal Loyola, Jefe de Operaciones Provinciales del LCB.
Las tropas especiales del LCB eran utilizadas para enfrentar a las
guerrillas dentro del cerco, una vez que se ubicaba la posición de un
grupo de alzados. El LCB era respaldado en los cercos por las unidades
militares del M I N FA R y por las milicias provinciales de Camagüey.
Todas estas unidades militares tenían a su disposición amplios recursos
de transporatación, vehículos blindados, artillería ligera y morteros.
El Quinto Cuerpo del Ejército de Camagüey también contaba con un amplio
aparato de inteligencia militar y civil. El primer teniente Rubén
Montero era el jefe del Departamento de Seguridad del Estado (Sección
Bandas) a nivel provincial. Montero era asistido por el teniente Arturo
Hernández. Ambos hombres dirigían un equipo represivo en el cual se
encontraban los tenientes Valenzuela, Daniel Reche y Sergio Rodríguez
del Rosario, ayudante de Montero. Este equipo coordinaba las labores con
el Teniente Zamora, jefe de la policía en la zona de Chambas, y
Hermitano Echemendía, jefe de milicias en la zona de Tamarindo.
Todo
este inmenso aparato militar y represivo fue utilizado para aplastar a
unas cuantas docenas de alzados, dispersos en varios grupos real
armados. Es evidente que la lucha entre los alzados y las unidades
castristas, en todos momentos de esta guerra fue una lucha desigual. Lo
demuestra las tácticas empleadas por las guerrillas en Camagüey.
Durante los años 1962 y 1963 hubieron sangrientos combates en el Cayo de Las Mujeres, Boquerón, Monte La Cruz, Loma de Los Barriles, El Trillón, finca Jobo Rosado, Sabana de Imías, Colonia La Habana,
Esmeralda, v la zona de Jatibonico. Entre las tropas castristas que
perecieron en estos combates se encontraban dos importantes oficiales de
LCB, el jefe de sector teniente Delfín Luis Paz, y un jefe de las
Compañías Especiales, Oscar Figueredo. Paz fue muerto con dos de sus
hombres en Monte La Cruz el 5 de febrero de 1963, al caer en una
emboscada tendida por el Jefe Guerrillero Juan Alberto Martínez Andrade.
El 18 de agosto de 1962, en la zona conocida por Los Barriles.
Figueredo rodeó a la guerrilla de Manolito López López El Loco
que murió en el combate, pero antes de caer, tres balas de su M 1 se
incrustaron en el pecho y en el vientre de Figueredo, quien murió
instantáneamente.
Después de la muerte en combate de Arnoldo
Martínez Andrade en julio de 1962, cerca de Yaguajay, la zona del frente
norte de Las Villas y Camagüey quedó bajo el mando de su hermano, Juan
Alberto Martínez Andrade. Los Martínez Andrade estaban como muchas
familias cubanas, divididas en sus sentimientos. Dos hermanos fueron
guerrilleros y otros dos fueron milicianos.
A la guerrilla de Juan Alberto el régimen castrista le atribuyó más de un centenar de sabotajes y de crímenes contra el Estado.
Elusivo, Juan Alberto logró escaparse en varias ocasiones de los cercos
castristas. El 10 de diciembre de 1963, en las cercanías de Jatibonico
fue rodeado y dos de sus hombres fueron capturados, pero Juan Alberto
rompió el cerco matando en la refriega a un sargento del LCB. Tres meses
más tarde, el 7 de marzo de 1964 en la loma Los Indios en la cordillera
de Florencia, fueron sorprendidos y cercados por un operativo del LCB
cuando Juan Alberto y sus hombres se reunían con la guerrilla de Mario
Bravo Cervantes. Los dos jefes guerrilleros y sus hombres rompieron
cerco, y se internaron en los montes de la zona. Dos soldados del LCB
fueron heridos. Sin embargo, las guerrillas estaban debilitándose,
habían arrestado a centenares de colaboradores y suministros y muchos
recibieron condenas carcelarias. Las condiciones para llevar adelante
esta guerra no eran las más propicias, el país subsistía a base de
tarjetas de racionamientos, los bienes de consumo para avituallar a las
guerrillas cada día eran más difíciles de obtener, la represión
desplegada por el régimen hacía casi imposible conseguir armamento y
balas y perseguidos por miles de soldados enemigos, los grupos
guerrilleros de la zona norte empezaron a desintegrarse.
En mayo
de 1964, el LCB se apuntó una sangrienta y rápida victoria. Los
guerrilleros sufrieron seis bajas y dos milicianos fueron muertos, en un
breve pero muy mortífero combate en Aguacate. Un guerrillero herido,
Estervino Gutiérrez, fue capturado por el LCB. Gutiérrez, un ex soldado
del Ejército de Batista, pactó con el diablo para salvar su vida y
delató a todos los campesinos que él conocía en la línea de suministros,
y se ofreció para servir de práctico al LCB en su búsqueda de alzados.
Durante meses, el ex guerrillero armado con un rifle soviético,
participó en numerosos cercos contra sus antiguos compañeros de lucha.
Pero las cosas cambiaron para el traidor en 1965. Clemente Aragón, un
alzado capturado por el LCB fue interrogado por oficiales de la
Seguridad
del Estado, los que lo trataron de implicar en el ahorcamiento del
soldado y miembro de la Unión de Jóvenes Comunistas Roberto Gutiérrez en
1964. Aragón admitió que él había ahorcado al soldado del LCB y que no
lo había hecho solo. En la seguridad de que sería fusilado, Aragón narró
el ajusticiamiento del comunista, implicando directamente a Estervino
Gutiérrez en los hechos. Clemente Aragón fue fusilado, pero tuvo la
satisfacción de ver morir a su lado a Estervino Gutiérrez, traidor de
las guerrillas.
El 10 de junio de 1964, las guerrillas de Floro
Camacho y Frías Brunet fueron cercadas en la zona de Nogueras. Brunet
murió en el primer encuentro. Entre las bajas sufridas por el LCB, se
encontraba el Capitán Pedro Nodal Loyola que fue herido en una pierna.
Los alzados se parapetaron en una cueva desde donde resistieron a las
tropas castristas durante cuatro días. El cuerpo de Brunet comenzó a
descomponerse y el mal olor en la cueva se hizo insoportable; sin agua
que tomar, los alzados chupaban pasta de dientes para mantenerse húmeda
la boca. Floro Camacho tenía una herida infestada en una mano. Los
hombres del LCB, habían sellado las entradas de la cueva y esperaban
pacientemente, tocando música por los altoparlantes. El día 14, los
guerrilleros, con heridas infestadas y las lenguas hinchadas por falta
de agua, se rindieron. Floro Camacho fue fusilado.
Una semana después, en la Loma del Blanquizal de Mayajigua,
el Comandante Lizardo Proenza del LCB dirigió un inmenso cerco para
atrapar a Mario Bravo Cervantes y a ocho de sus hombres. En esta
operación establecieron un cerco de siete kilómetros cuadrados para
capturar a los nueve guerrilleros, destinándose ocho batallones del LCB
con quinientos veinte y ocho hombres cada uno, que sumaban un total de
más de cuatro mil hombres. Por largo tiempo el LCB había perseguido a
Mario Bravo, el Comandante Guerrillero de 25 años de edad quien era uno
de los hombres más dificiles de arrinconar en toda Cuba. Con melena
larga, vestido de verde olivo y armado de un `rifle chaco M52, Mario
Bravo era un líder natural. Sus hombres usaban jícaras como cascos, para
desde la distancia lucir como soldados del MINFAR involucrados en el
cerco. Fi .ás de una ocasion los alzados habían marchado a la
retaguardia la de las columnas del ejército que se movían por las
carreteras, confundiéndose con los miles de soldados que rastreaban is
zona.
Pero el comandante Proenza se puso de suerte, lograron
capturar a un alzado, quién delató la posición de la guerrilla.
Rápidamente el LCR cerró el cerco. En la acción murió un soldado
castrista y otro resultó herido. Un guerrillero murió en el combate y
tres fueron capturados heridos. A pesar del cerco de cuatro mil hombres,
tres alzados lograron escapar el anillo de la muerte. Mario Bravo fue
capturado en grave estado, tenía la mandíbula destrozada por una bala de
ametralladora VZ, y su pecho y cuello llenos de fragmentos de granada.
El escritor castrista José Norberto Fuentes escribió varios relatos
sobre la captura y muerte de Mario Bravo, pero los historia no se ajusta
a las versiones ofrecidas por los hombres que estuvieron presentes en
el combate como oficiales del régimen castrista y que hoy se encuentran
en el exilio. Fuentes narra como Mario Bravo le besó las manos a sus
captores, portándose cobardemente. Nada más incierto. El jefe
guerrillero, en sus últimas horas se portó como el hombre que siempre
fue, su último gesto fue el de regalarle su reloj de pulsera al
enfermero que lo atendió.
Los combates continuaron. En julio de 1964
murió en un combate en Bella Mota el guerrillero Paco la Rosa. La
Seguridad del Estado, utilizando delatores y por confesiones obtenidas
por medio de torturas, fue ubicando a los grupos guerrilleros,
cercándoloscon tenacidad. El 6 de julio de 1965 en el Valle de los
Ramones, Juan Alberto Martínez Andrade fue cercado por tropas del LCR
que eran dirigidas por Lizardo Proenza y el teniente Sergio Rodríguez.
Sirviendo de práctico del LCR había otro ex guerrillero convertido en
traidor, Eduvino García Aragón. Heriberto Bartolo Labrada y Juan Alberto Martínez Andrade murieron en el combate. Tres alzados lograron eludir el cerco.
Tres
meses más tarde, el 6 de octubre de 1965, dos guerrilleros fueron
capturados y el último alzado Rafael Labrada Martínez, murió en combate.
Los Labrada Martínez eran tres hermanos, y todos murieron alzados
contra el castrismo en la Provincia de Camagüey.
Todos los jefes guerrilleros de Camagüey, los hermanos Martínez Andrade, Floro Camacho, Frías Brunet, El Loco López, y Mario Bravo hoy descansan en tumbas anónimas en suelo cubano.
Así
terminó, a finales de 1965, una operación militar en la que treinta mil
hombres bien armados estuvieron cuatro años para derrotar a setenta
alzados, mal armados y hambrientos.
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Nota del blogguista:
Me
llegó por e mail esta nota de un entonces combatiente contra los
alzados: ¨....Mario Bravo,el alzado de Camagüey,al cual lo ví desde un
cayo de monte donde me había escondido. Al hombre, Mario Bravo, lo
cogieron en un cerco con un tiro en la quijada y dos en la espalda y
murió casi enseguida. Eso fué cayendo la noche y lo llevaron al día
siguiente por la mañana para exibirlo en el parque MARTí de Morón, en
donde lo dejaron todo el día expuesto al sol, ya apestaba y estaba lleno
de moscas. Todo fué por ordenes de Raúl Castro,para que vieran que el
lejendario alzado estaba muerto.Yo nunca comprendí como aquel barberito
de Chambas se convirtió en un terrible guerrillero.¨
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