domingo, enero 01, 2006

THE MATRIX EXISTE, ES CUBA

THE MATRIX EXISTE, ES CUBA


Seguro todos recordarán o habrán oído hablar de la película Matrix de los hermanos Wachowski (Andy Wachowski y Larry Wachowski). Una película que convierte la realidad virtual en la única realidad para la mayoría de una esclavizada sociedad futura.

Matrix, habla de una vida recreada y hecha a medida para toda la humanidad, nadie escapa a ella, nadie es ajeno a ella y nadie conoce la verdad salvo algunas personas que lograron escapar a las máquinas y a su programa MATRIX, y que buscan entre la multitud al “elegido” que salvará al resto de la humanidad de su desconocida esclavitud.
Cuba es una sociedad herméticamente cerrada, no existe el derecho a una prensa libre, y hasta la Internet no deja de ser una mala definición para lo que realmente es una Intranet rigurosamente controlada. Lo único que puede el exterior conocer de lo que pasa en la isla proviene de la versión de los mismos que han creado el “Matrix cubano” (los hermanos Castro). Pero en Cuba existen incluso dos programas muy diferentes, existe uno hacia el exterior y otro hacia el interior.
El Matrix para el exterior de Cuba
La visión que tiene el resto del mundo de lo que es Cuba viene de la propia “maquinaria” estatal que tiene “aletargado”, o para ser más exactos: reprimidos, a la mayoría de la sociedad cubana. Una buena parte de agencias noticiosas y prensa internacional suele destacar los avances médicos, la gran educación con que cuenta la sociedad cubana y sobre todo reproduce, también proveniente de la versión gubernamental, una hermosa isla paradisíaca llena de jovencitas mulatas cubanas que son capaces de hacer pasar una agradable estancia al turista más exigente y sibarita.
A pesar de todo, muchas agencias internacionales de prensa cuentan con corresponsales en la Habana, corresponsales que sin ser un subproducto directo del Matrix cubano, vienen a ser como el traidor del filme: Cifra, quien formando parte del grupo de rebeldes, está cansado del mundo real, de vivir en grutas subterráneas y comer proteínas sintetizadas. Prefiere a Matrix porque considera que “la ignorancia es la felicidad” y prefiere entregar a sus compañeros a cambio de comodidades, riquezas y fama. Así es la mentalidad de algunos corresponsales de agencias importantes que se encuentran o han pasado por Cuba. Sacrifican la verdad o la merman drásticamente para evitar no los consideren personas “non grata” y se les acabe los placeres que el Matrix cubano les está deparando.
Un caso concreto de un corresponsal plenamente al servicio del “programa” cubano es el del periodista y antiguo corresponsal de Televisión Española (TVE) José Manuel Martín Medem, autor del libro ¿Por qué no me enseñaste cómo se vive sin ti?. Un libro donde en vez de leer a un periodista uno puede estar seguro de que lee a un sicario mediático castrista.
Medem, en su último libro, no considera demócratas cubanos ni a Oswaldo Payá, ni a Marta Beatriz Roque, ni a Vladimiro Roca, tres disidentes que según él, están al servicio de Washington, todo lo contrario -según su apreciación- de auténticos demócratas como Eloy Gutiérrez Menoyo y Manuel Cuesta Morua. La traición de este Cifra periodista se consumó cuando fue capaz de firmar, junto a otros de su misma estirpe, una Carta abierta al Fiscal General de los Estados Unidos el pasado agosto, donde pedía la liberación de cinco espías cubanos a los que se les acusa, entre otras cosas, de haber colaborado con el gobierno cubano en un acto de terrorismo atroz, como fue el derribar dos avionetas civiles en aguas internacionales, provocando la muerte de cuatro inocentes de origen cubano y de los cuales tres eran ya ciudadanos norteamericanos.
En definitiva, el programa de propaganda con que cuenta el régimen cubano es efectivo en la medida que personajes como Medem, - con gran capacidad y “prestigio” - sean fielmente instruidos y brinden al mundo una Cuba tergiversada a cambio de los placeres y fama que dentro de la isla siempre podrán disfrutar.
El Matrix para el interior de Cuba
La propaganda interior es diferente, aunque básicamente la misma. Existen cadenas, de radio y televisión, especialmente diseñadas para el turismo, a la que no tiene acceso el ciudadano cubano de a pie. No es lo mismo Cubavisión Internacional que se emite con el permiso de satélites españoles, que la Cubavisión emitida al interior. Hasta la nueva cadena “anti-imperialista” TELESUR, del gobernante venezolano Chávez, amigo demostrado de Castro, es acotada y censurada convenientemente por las autoridades cubanas. Las parabólicas aún siguen prohibidas para los cubanos, aún cuando sean hechas de barreños y logren una pobre recepción de un canal que emita en inglés.
A pesar de todo, internamente tampoco dejan de asegurar de que son una potencia médica, de que cuentan con la mejor educación del mundo, a pesar de que no pueda el cubano tan siquiera encontrar una medicina tan elemental como una aspirina o carezca de papel, lápiz u otros medios imprescindibles para un correcto desarrollo educacional. Lo que nunca se sacrifica es el culto a la personalidad del máximo líder, para ello siempre se contará, en las escuelas y demás centros, con televisores “panda” para la reproducción de sus discursos. Discursos que los cubanos desean sean prolongados porque eso les garantizará un mayor tiempo de “alumbrón” - que no apagón- en sus casas.
La contradicción evidente tiene que justificarla la dictadura, y ahí entra el embargo de los Estados Unidos a Cuba. Esta farsa –farsa porque nunca ha existido un embargo como tal, continuamente es burlado- y a la que ellos llaman bloqueo, les renta simpatía en los medios antinorteamericanos, que no son pocos, y sobre todo en España parece institucionalizado el “antiamericanismo” en el propio plan educativo de los jóvenes españoles cuando se explican los episodios históricos, precisamente relacionados con la guerra de Cuba a finales del siglo XIX.
Para desenmascarar la farsa, solo bastaría para el cubano informarse. Leer una prensa y oír una radio libres, donde pudieran comparar distintos puntos de vista, pero teniendo toda la información sobre un tema, algo que sin ser imposible resulta arriesgado para el que no quiera exponerse a una delación con las consiguientes represalias.
También la Internet juega un papel relevante, y es el medio donde en estos momentos el régimen intenta ejercer un mayor control y donde por acceder a la Internet de forma ilegal se podría sufrir varios años de prisión como ocurrió en los últimos procesos llevados a cabo contra periodistas independientes, donde figura la acusación de uso "contrarrevolucionario" de las redes informáticas o acceso a redes de mensajería indebidas. Sirva como ejemplo el de José Orlando González Bridón, secretario general de la Confederación de Trabajadores Democráticos de Cuba (CTDC, ilegal), detenido el 15 de diciembre de 2000 y quien fue el primer miembro de la oposición condenado a una pena de cárcel por un artículo publicado en Internet.
En resumen
La película dirigida por los hermanos Wachowski y la sociedad dirigida por los hermanos Castro, hacen del control mental de los humanos su principal argumento; en el filme: con el objetivo de que el ser humano sea una útil fuente de energía para las máquinas, en Cuba: con el objetivo tan simple y ególatra de mantenerse en el poder quien lleva 47 años mal administrando un país; y decidiendo, como si fuese su finca particular, el destino de millones de cubanos.