HILDA MOLINA, MEDICA: " EL REGIMEN DE CASTRO ES ESTALINISTA Y VENGATIVO"
HILDA MOLINA, MEDICA: " EL REGIMEN DE CASTRO ES ESTALINISTA Y VENGATIVO"
Corrientes
Argentina
Infosearch:
José F. Sánchez
Jefe de Buró
Cuba
Dept. de Investigaciones
La Nueva Cuba
Julio 31, 2006
Mano a Mano: La médica no puede salir de la isla y su su caso dramático se convirtió en un resonado escándalo. Los pedidos formulados por el presidente no tuvieron eco. Molina habló con El Tribuno y dijo ser fusilada moral.
- ¿Por qué está hoy, especialmente, tan angustiada?
- Por mi hijo, porque lo noto hasta ronco y estoy pasando por un momento malo (la médica llora mientras habla). Está tan difónico y tan desesperado que no tiene un minuto de paz.
- ¿Y usted cree que el pedido qué hizo el presidente Néstor Kirchner no va a tener soluciones positivas para usted en un tiempo cercano?
- Yo lo que quiero es que no me hagan más daño. Tengo angustia por mi hijo, por su esposa y por mis nietos. Estoy tan agotada psicológicamente de todo esto, yo no soy una mujer de política y no estoy acostumbrada a los embates estos.
- ¿Por qué cree que Fidel Castro está tan empeñado en qué usted no salga de Cuba?
- Porque este gobierno de corte stalinista es muy vengativo y yo ocupé una posición muy importante dentro de la agencia cubana y me cansé. Me desvinculé porque ya no quería más ni soportaba el sistema. No aguantaba que quisieran que yo discriminara entre los enfermos cubanos en beneficio de los extranjeros, y lo digo con la honestidad más grande que una persona se lo puede decir a otra. Comprendí que nos quitaban las libertades y sobre todo me dolió tanto. Esto en mi profesión, Fidel Castro no lo perdona y no me perdona; eso se lo dijo a personas que hablaron con mi hijo. Y no sé qué tiene él que perdonar si él no es Dios. Además entregué mis condecoraciones, que son las más importantes que le dan a los científicos y a las mujeres en Cuba y él dijo que era un desprecio a la Revolución Cubana. Es como una venganza personal o un escarmiento para que las personas que piensen hacer lo que yo hice no lo hagan.
- ¿Usted considera que al no dejarla salir de la isla están haciendo una demostración de poder para que otros no hagan lo mismo que usted?
- Me da la impresión. Este es un sistema totalitario que quita las libertades, se basa en el odio y piensan que ellos son los dueños del mundo y las personas que están bajo el mando de ellos somos como monigotes que tenemos que pensar, hablar y movernos como ellos deciden. Y yo creo que nacemos libres y que uno se cansa de esto.
- ¿Cómo ve la actitud que está tomando el Gobierno de Argentina?
- Yo le agradezco mucho a este gobierno ya que es el primero de Argentina que se preocupa en este caso por mis nietos. Ellos al igual que mi nuera son argentinos, mi hijo ya está nacionalizado también como ciudadano de ese país por más que nació en Cuba. Fidel Castro está violando los derechos de mis nietos y los derechos del niño establecidos en la convención para los derechos del Niño que establece que todo chico debe crecer en un contexto familiar normal. Yo creo que los funcionarios argentinos fueron consecuentes con la lucha por los derechos humanos.
- ¿Estima que la carta entregada a los funcionarios cubanos desde el gobierno argentino va a servir de algo?
- No, luego de la reacción de Fidel Castro. Respondió con violencia que es a lo que yo le temo porque conozco este sistema. Yo pienso que si él pone a funcionar sus neuronas de estadista tendrá que acceder porque es un hermano latinoamericano, es un momento en que se está predicando la integración latinoamericana entonces tiene que acceder a la petición humanitaria que le está haciendo otro hermano latinoamericano. Si hay una hermandad entre los latinoamericanos lo menos que se puede hacer es responder positivamente a ese hermano por más que no te guste lo que se te está pidiendo. Además hasta cuándo un hombre poderoso va a seguir pisoteando a personas indefensas.
- Y usted, ¿de qué tiene miedo?
- ¡Qué se yo lo que le pueden hacer a mi familia en Argentina!. A mi no porque ya no me pueden hacer más nada, qué más me pueden hacer si me quitaron mi hijo por doce años.
- ¿Cree qué su hijo no está protegido acá en este país?
- Yo no sé, yo creo que sí. Pero las madres desarrollamos una paranoia y una desesperación con los hijos, tiene 42 años y hace más de doce que no lo veo. Yo veo actuar a Castro con tanta virulencia frente a seres humanos indefensos que siento una paranoia propia de toda madre, pero yo ya estoy un poco desestabilizada psicológicamente o son las vivencias que tuve que pasar toda mi vida, desde las agresiones hasta un accidente de tránsito o hasta como lo titularon acá en Cuba: "La ejecución moral o fusilamiento moral" . Yo tuve dos grandes amores en mi vida, uno es mi hijo y otro es mi profesión, lo que estaba haciendo por los enfermos cubanos.
- ¿Usted cree que su madre va a poder salir de la isla?
- Bueno, por eso también estoy llorando. No concibo que una mujer que se está muriendo no pueda morir en el lugar donde quiera. Ella nunca estuvo identificada con este sistema porque es una católica comprometida, nunca militó y nunca trabajó para el gobierno; su cerebro no pertenece al gobierno y no es científica. Ahora Fidel Castro tampoco la deja salir. No la dejan decidir donde morirse.
- Usted me dijo recién que está cansada de luchar. ¿Cómo va a seguir?
- Yo no me voy a cansar, sólo que en este momento estoy mal porque noté a mi hijo muy mal en los medios argentinos. Me dio lástima, entonces eso me tiene muy mal.
Perfiles
Hilda Molina y Roberto Quiñones, su hijo, se separaron en el año 94, esa fue la última vez que se vieron. Roberto es médico al igual que su madre. Está casado con Verónica que es argentina. Ese año, mientras estaban en Japón por razones de trabajo, ambos decidieron no regresar a Cuba.
Hilda Molina fue Directora de la Centro de Restauración Neurológica en La Habana. Se opuso a la orden de privilegiar a los pacientes extranjeros. Luego de renunciar a la dirección del Centro, a fines del `94 y principios del `95, Hilda intentó viajar para asistir al parto de su primer nieto, pero el Gobierno cubano le negó el permiso, aludiendo que no iba a volver y argumentando que el cerebro de Hilda Molina le corresponde al Gobierno de Fidel Castro.
Si bien Roberto Quiñones y su familia pueden viajar a la isla para ver a Hilda Molina, ellos consideran que no existen las garantías suficientes para que luego puedan volver a salir de Cuba.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home