lunes, septiembre 25, 2006

INVIRTIENDO EN LOS CUBANOS

Invirtiendo en los cubanos


Por Armando Añel, Miami

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lunes 25 de septiembre de 2006 6:00:00
Más que apostar por el país, el proyecto 'Desatando reformas micro-económicas en Cuba: Invirtiendo en los cubanos' apuesta por su ciudadanía.
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Los últimos acontecimientos en Cuba, con el gobernante Fidel Castro incapacitado para ejercer a plenitud sus funciones como jefe de Estado, comienzan a precipitar las primeras reacciones al interior de la comunidad exiliada e, incluso, del gobierno de Estados Unidos.

Es en este marco —pero sin suscribirse a él o constituir una reacción a él— que el proyecto "Desatando reformas micro-económicas en Cuba: Invirtiendo en los cubanos", auspiciado por el Cuba Study Group (CSG) y la entidad mexicana Banco Compartamos, S.A., aspira a invertir en una eventual transición a la democracia en la Isla.

"La idea surgió hace más de dos años, a partir de un análisis de los problemas de índole económica existentes en Cuba", asegura a Encuentro en la Red el presidente del Cuba Study Group, Carlos Saladrigas, dejando claro que "Desatando reformas micro-económicas en Cuba: Invirtiendo en los cubanos" no constituye una respuesta directa a la enfermedad de Fidel Castro o a un traspaso efectivo de poderes en la Isla.

"Lo que buscábamos y buscamos es un despegue relativamente rápido de la economía nacional —acota Saladrigas—, sin que el peso de los cambios caiga desmesuradamente sobre las espaldas de los más necesitados".

La inversión se canalizaría a través de un programa de micropréstamos que, según lo conciben sus impulsores, incluye asesoría y entrenamiento a aquellos cubanos de la Isla dispuestos a desarrollar pequeñas empresas. Saladrigas puntualiza que "se trata de una propuesta pragmática, realista. El despegue de la economía cubana a través de las microempresas es lo más adecuado. El proceso generará inmediatamente empleo y crecimiento".

"Conciente de que el éxito de Cuba como Estado democrático y libre dependerá fundamentalmente de la capacidad de sus ciudadanos para lograr un mejor nivel de vida para ellos y para sus familias (…) —puede leerse en el sitio web del CSG—, el Cuba Study Group ofrecerá apoyo financiero y académico a los inversores cubanos, contribuyendo de esta manera a la formación de un grupo activo de empresarios en Cuba".

Financiamiento y educación

Desde el punto de vista financiero, "Desatando reformas micro-económicas en Cuba: Invirtiendo en los cubanos" pone sobre la mesa un paquete de ayuda contante y sonante.

"En combinación con Banco Compartamos S.A. estableceremos un programa de micropréstamos para Cuba que estará inmediatamente disponible tan pronto como lo autorice la legislación cubana —anuncia la página del Cuba Study Group—. Se ha decidido sindicar y financiar un monto inicial de capitalización de aproximadamente 10 millones de dólares, con un plan para recaudar importantes fondos adicionales".

"Decidimos invertir en conjunto con Banco Compartamos no sólo por la relación de trabajo que nos une desde hace algún tiempo —especifica el presidente del CSG—, sino porque es una entidad de prestigio, la más grande de México y Latinoamérica, experta en micropréstamos y con capacidad de adaptarse a las particularidades del caso cubano".

Como declarara a la agencia EFE Javier Fernández Cueto, director de Estrategia de Compartamos, la experiencia del banco mexicano "ha demostrado el extraordinario éxito que producen los microcréditos para el mejoramiento de la calidad de vida de miles de familias".

Pero tal vez el ángulo más novedoso de "Desatando reformas micro-económicas en Cuba: Invirtiendo en los cubanos" esté relacionado con la página web que el proyecto pondrá a disposición de aquellos cubanos con acceso a Internet.

Se trata de establecer un espacio virtual desde el que brindar a los futuros empresarios "educación, entrenamiento e información sobre la creación de pequeñas empresas y su operación". Aunque en Cuba el acceso particular a la llamada Red de Redes es clandestino o semiclandestino, y en consecuencia minoritario, existe una masa crecientemente apreciable de internautas que se conectan con alguna regularidad.

El sitio web funcionaría en colaboración con el Instituto de Estudios Cubanos y Cubanoamericanos de la Universidad de Miami, además de con otras dos importantes universidades —fuera y dentro de Estados Unidos— cuya identidad Saladrigas no reveló, y con las que actualmente se mantiene en contacto. Se estima que la web entrará en funcionamiento en 2007.

"No hay que esperar a que sobrevenga el cambio —asegura Saladrigas—. Hay que comenzar a trabajar desde ahora".

Ortodoxia y apertura

Lo cierto es que el lanzamiento de "Desatando reformas micro-económicas en Cuba: Invirtiendo en los cubanos" coincide no sólo con el ostensible deterioro de la salud de Fidel Castro, sino con recientes declaraciones del ministro de Economía y Planificación, José Luis Rodríguez, en las que La Habana volvió a apostar por la ortodoxia en materia económica.

Tras asegurar que en el primer trimestre del año la economía cubana había crecido un 12,5%, Rodríguez enfatizó que La Habana descarta abrirle espacios al pequeño sector privado: "Hemos llegado a la conclusión de que el desarrollo del país no está en los pequeños negocios".

Una declaración que parece oficializar la sucesión según los estándares económicos retomados en Cuba tras la consolidación del chavismo en Venezuela, pero que, sin embargo, no hace mella en el optimismo con el que el presidente del Cuba Study Group asume la naturaleza de su proyecto.

"No nos sorprenden estas declaraciones —reflexiona Saladrigas—. Más bien dan a entender que el tema de las reformas económicas está a debate en las altas esferas de poder en Cuba".

El empresario y político cubanoamericano considera que un gobierno de Raúl Castro no alteraría el hecho de que la Isla necesita urgentemente una apertura. "No hay que personalizar. Cualquiera que sea el próximo jefe de Estado en Cuba debe comprender que la necesidad de un cambio es imperiosa".

"Por otra parte, es importante señalar que nuestro proyecto no tiene absolutamente ninguna relación con el gobierno de Estados Unidos o sus iniciativas —concluye Carlos Saladrigas—. Mantenemos intacta nuestra fe y confianza en los cubanos. No estamos invirtiendo en Cuba. Estamos invirtiendo en los cubanos".