BARACUTEY CUBANO

Las fichas se mueven, Trinidad Jiménez, encargada como está de asistir al Ministro Moratinos en la formulación y ejecución de la política exterior de España para Iberoamérica debería mover las suyas si no quieren quedar fuera de la partida, una vez más. Ya le habrán contado sus amigos de Prisa que su nombramiento no cayó bien en la Isla pero eso debe servirle como acicate y no como rémora.

Desconocemos si sabrá y podrá imponer el mismo criterio que mantenía con respecto al Régimen el año pasado cuando Castro saco a pasear su mochila después de que Jorge Moragas intentara hacer lo mismo por la isla.

La oportunidad para intentar normalizar las relaciones con el gobierno de EEUU la pintan calva, y a través del Director para las Américas de la Casa Blanca, Dan Fisk podrían llegar donde otros Ministros fracasaron estrepitosamente.

Usted bien sabe que ellos tienen un plan, algunos dicen que ya lo negociaron casi todo, lo malo es que los estadounidenses lo hacen todo desde su punto de vista y carecen de la empatía necesaria para que su plan se bañe de realidad, ahí es donde entra su papel.

Ellos quieren hacer una especie de referéndum para que Raúl tenga el respaldo del pueblo para poder realizar una transición y así comenzar por levantar el embargo y reanudar unas relaciones que nunca debieron ser truncadas. El problema radica en que Raúl presume de tener esa legitimidad por causas constitucionales, a ellos no les importa nombrar su constitución cuando les conviene y olvidarla a renglón seguido, por lo que ese paso no se dará nunca y los cubanos pedirán antes de hablar nada el levantamiento del “bloqueo”.

Si consiguen que el congreso de EEUU de este paso lo siguiente que harán será dinamitar toda posible negociación, bien atacando directamente a Bush o quitando de en medio a los disidentes, de cualquier manera ellos ya habrán conseguido un objetivo perseguido por muchos años y estarán en posición de comerciar con las empresas que busquen un posicionamiento de futuro en Cuba.

Trinidad debe buscar el punto de encuentro y conseguir varios objetivos:

1. Conseguir el levantamiento del embargo que sirve de coartada al inmovilismo.
2. Cuidar de que la disidencia no sea borrada literalmente del mapa y obtener la liberación de los presos políticos y de conciencia.
3. Asesorar técnicamente al gobierno cubano para realizar las trasformaciones en su legislación que permitan cambiar el modelo socialista de economía garantizando las propiedades del estado y el derecho a la vivienda de todos los cubanos.
4. Obtener las garantías de que en las próximas elecciones cubanas puedan concurrir todos los partidos políticos que existen en la isla, asesorando las reformas legales necesarias.
5. Hacer patente que el Gobierno de España y los españoles son plenamente conscientes de que son los Cubanos y solo ellos quienes decidirán el futuro de Cuba.
Y esto solo para comenzar a andar.

Para la consecución de los anteriores puntos debe dar la impresión de que el modelo socialista no ha resultado fallido, aunque no sea cierto, y que se darán los cambios en el sentido deseado para que el Congreso Estadounidense no vea su decisión como una cesión gratuita a un régimen dictatorial.

Aunque yo creo que el mayor problema de Trinidad vendrá al intentar convencer a Zapatero y a Moratinos de que no es malo ponerse de acuerdo en algo con la Administración Bush, porque la pareja es capaz de anteponer sus propios principios a los intereses generales de todos los habitantes de la Mayor de las Antillas, como ya han demostrado con creces en España. Si se quedan mirando lo más probable es que los rusos les adelanten por la izquierda como hicieron hace tiempo China y Venezuela. Muchos opinan que el petróleo del Caribe puede obrar el milagro que los puros Habanos nunca consiguieron.

No debe olvidar Trinidad que el mejor embajador que tiene España en la isla no habita en la embajada, llame al señor Escarrer y que le monte una recepción en cualquiera de sus hoteles, a buen seguro que entonces podrá hablar con quien usted quiera. Dos plantones le dieron últimamente a su Ministerio, a él todavía ninguno.
Pero apúrese Trinidad, apúrese, el reloj de los cubanos lleva 47 años de retraso.


Fonte: NotiCubaInternacional
http:www.noticubainternacional.com