martes, febrero 05, 2008

JORGE CASTAÑEDA DESMIENTE LAS ACUSACIONES DE ESPIONAJE

Jorge Castañeda desmiente las acusaciones de espionaje

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El ex canciller aseguró que sus actividades de los años ochenta eran de conocimiento de su padre, secretario de Exteriores, y del presidente López Portillo. 'No puede uno espiar con el beneplácito del espiado', dijo.
martes 5 de febrero de 2008 15:42:00
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Redacción EER

El ex canciller mexicano Jorge Castañeda Gutman desmintió haber realizado acciones de espionaje para La Habana como publicó el diario mexicano El Universal este lunes.

"La versión es completamente falsa", declaró Castañeda al diario estadounidense El Nuevo Herald.

"Yo colaboraba con mi padre como enlace y contacto con las izquierdas latinoamericanas, con pleno conocimiento de él y del presidente (José) López Portillo, siempre defendiendo los intereses de México y más bien, desde entonces, contra la visión cubana para la región", añadió.

Castañeda, de 54 años, consideró sorprendente que El Universal se hiciera eco de reportes de la antigua Dirección Federal de Seguridad (DFS), origen de las acusaciones de espionaje.

"La DFS fue disuelta en 1985 por corrupta, vinculada al narcotráfico, a la CIA, y sorprende también que El Universal se haga vocero de un personaje, que firma los supuestos informes (Miguel Nazar Haro), confeso colaborador de la CIA y bajo proceso y arresto domiciliario", agregó Castañeda.

Nazar Haro fue acusado en 2004 de asesinatos y desapariciones de miembros de movimientos de izquierda en los años setenta y ochenta.

El diario mexicano publicó este lunes datos de un expediente de la DFS sobre Castañeda en el cual se registraban informes de Nazar Haro sobre presuntas acciones de espionaje para La Habana realizadas entre 1979 y 1985.

De acuerdo con el expediente, guardado en el Archivo General de la Nación, Castañeda incluso presionó a su padre, Jorge Castañeda y Álvarez de la Rosa, entonces secretario de Relaciones Exteriores del gobierno de José López Portillo, para que tomara decisiones bajo los dictados de La Habana.

El documento añade que el entonces joven de 26 años fue reclutado por el miembro de la Dirección General de Inteligencia de Cuba, Jorge Luis Joa Campos.

'¿Por qué ahora?'

En declaraciones radiofónicas citadas este martes por El Universal, Castañeda afirmó: "Es una muy vieja historia que mucha gente ha contado muchas veces la participación que tuve en las distintas decisiones de política exterior de México".

"Todo eso que hacía no sólo lo hacía con el pleno conocimiento de mi padre, que era el secretario de Relaciones Exteriores, sino del presidente López Portillo, quien estaba perfectamente enterado del papel que yo desempeñaba", agregó.

"No es que me moleste todo esto, es totalmente público, y obviamente la acusación de espionaje es absurda, no puede uno espiar con el beneplácito del espiado… pero la pregunta es ¿por qué lo sacan ahora?", señaló.

Castañeda sugirió la existencia de un complot desde el gobierno de México ante la posibilidad de que él obtenga un fallo favorable de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, de la OEA, que analiza si sus garantías fueron violadas por el Estado mexicano, al impedirle aspirar a la presidencia de la República como candidato independiente.

"Yo no lo puedo desvincular de la sesión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que tendrá lugar el próximo viernes en Costa Rica. Será la primera vez en la historia que el gobierno del Estado mexicano sea juzgado por violar los derechos humanos de un ciudadano mexicano", explicó el ex canciller.

"Si gano todo el caso, o parte, el presidente Felipe Calderón será el primer presidente de México en ser condenado por una corte cuya jurisdicción y cuyo carácter vinculante de sus fallos es aceptado por el Estado mexicano; la primera vez que el Estado y el presidente de México sean condenados por violar los derechos humanos de un mexicano. Me imagino que no están a gusto con esta situación", señaló.

El diplomático Gustavo Iruegas, quien se encargaba del área de comunicación en la época en que López Portillo gobernaba, aseguró que "todas las actividades de Jorge Castañeda Gutman en materia de política exterior, cuando su padre era el canciller de México, fueron no sólo conocidas si no avaladas desde la Presidencia".

Iruegas explicó que Castañeda hijo fue asignado en esa época como el contacto del gobierno mexicano con La Habana.

Jorge Castañeda Gutman fue canciller entre 2000 y 2003 del gobierno de Vicente Fox, durante cuyo mandato las relaciones entre La Habana y México atravesaron su peor momento.

Muchos analistas reconocen a Castañeda el haber contribuido a crear una visión más real y menos edulcorada del régimen cubano en América Latina y en el mundo, lo que le granjeó no pocos ataques de La Habana.
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Exigen investigar a Castañeda; es un complot, asegura

Exigen investigar a Castañeda; es un complot, asegura
Castañeda sugirió la existencia de un complot desde el gobierno federal

Martes 05 de febrero de 2008

arturo.zarate@eluniversal.com.mx
ricado.gomez@eluniversal.com.mx

Legisladores de las comisiones de Relaciones Exteriores del Congreso consideraron preocupante y extremadamente delicada la información que involucra a Jorge Castañeda Gutman en acciones de espionaje y traición a la patria, y se pronunciaron por que la Cancillería explique qué información tiene sobre el tema.

Según informes de la desaparecida Dirección Federal de Seguridad (DFS), solicitados por EL UNIVERSAL al Archivo General de la Nación, Castañeda Gutman fue reclutado al servicio de la Dirección General de Inteligencia (DGI) de Cuba en México, en 1979.

El senador panista Rubén Camarillo, de la Comisión de Relaciones Exteriores en el Senado, juzgó “preocupante y extremadamente delicado” el contenido del expediente sobre las actividades de Castañeda como espía al servicio de Cuba. Recordó que ningún mexicano puede prestar servicios al extranjero sin la autorización del Poder Legislativo; de hacerlo al margen de nuestras leyes, podría perder la ciudadanía.

El diputado federal del PRI Edmundo Ramírez, de la Comisión de Relaciones Exteriores, consideró que se debe investigar al ex canciller, para ahondar en su participación como agente encubierto y llegar hasta las últimas consecuencias legales.

Dijo que la comisión que representa podría retomar el caso para ahondar en las indagatorias y consideró que Castañeda debe ser citado para que aclare su participación con el gobierno de Cuba, y la información que se generó entonces.

La senadora priísta María de los Ángeles Moreno, secretaria de la Comisión de Relaciones Exteriores para América Latina y el Caribe, dijo que eso explica la actuación de Castañeda como secretario de Relaciones Exteriores de Vicente Fox.

Moreno consideró clave conocer el documento para saber el alcance de las acciones realizadas por Castañeda Gutman y qué hicieron en su momento la Cancillería y Gobernación.

El jurista Jorge Nader Kuri, director de la Facultad de Derecho de la Universidad La Salle, explicó que para que Castañeda sea procesado penalmente es necesario que alguien presente una denuncia ante la PGR, por los hechos publicados por EL UNIVERSAL.

Responde Castañeda Gutman

Todo lo que hice fue con el conocimiento de mi padre y con el del presidente de la República, José López Portillo, respondió Jorge Castañeda Gutman luego de que EL UNIVERSAL diera a conocer que espió para el régimen de Cuba de 1979 a 1985, y entregó información estratégica.

Según el informe de la DFS, Castañeda presionaba a su padre, Jorge Castañeda y Álvarez de la Rosa, entonces canciller, para que tomara decisiones de política exterior.

“Es una muy vieja historia que mucha gente ha contado muchas veces la participación que tuve en las distintas decisiones de política exterior de México. Todo eso que hacía no sólo lo hacía con el pleno conocimiento de mi padre, que era el secretario de Relaciones Exteriores, sino del presidente López Portillo, quien estaba perfectamente enterado del papel que yo desempeñaba”, dijo durante una entrevista radiofónica con el periodista Sergio Sarmiento.

“No es que me moleste todo esto, es totalmente público, y obviamente la acusación de espionaje es absurda, no puede uno espiar con el beneplácito del espiado… pero la pregunta es ¿por qué lo sacan ahora?”, dijo.

Castañeda sugirió la existencia de un complot desde el gobierno federal ante la posibilidad de que él obtenga un fallo favorable de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que analiza si sus garantías fueron violadas por el Estado mexicano, al impedirle contender por la presidencia de la República como candidato independiente.

“Yo no lo puedo desvincular de la sesión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que tendrá lugar el próximo viernes en Costa Rica. Será la primera vez en la historia que el gobierno del Estado mexicano sea juzgado por violar los derechos humanos de un ciudadano mexicano”, explicó el ex canciller.

“Si gano todo el caso, o parte, el presidente Felipe Calderón, será el primer presidente de México en ser condenado por una corte cuya jurisdicción y cuyo carácter vinculante de sus fallos es aceptado por el Estado mexicano; la primera vez que el Estado y el presidente de México sean condenados por violar los derechos humanos de un mexicano. Me imagino que no están a gusto con esta situación”, señaló.

El informe indica que Castañeda actuó con el apoyo de dos colaboradores de su padre: Mauricio Toussaint Ribot y Miguel Marín Bosch.

Consultada respecto, la Secretaría de Relaciones Exteriores se negó a hacer algún comentario. Se buscó a los embajadores Toussaint, actual representante de México en Portugal, y a Marín, ya retirado, sin obtener una respuesta.

El embajador Gustavo Iruegas, quien se encargaba de la comunicación social en la época del canciller Castañeda y Álvarez de la Rosa aseguró que “todas las actividades de Jorge Castañeda Gutman en materia de política exterior, cuando su padre era el canciller de México, fueron no sólo conocidas si no avaladas desde la Presidencia”.

Iruegas explicó que Castañeda hijo fue asignado en esa época como el contacto del gobierno mexicano con La Habana.

(Con información de Carlos Avilés y Natalia Gómez)