miércoles, septiembre 03, 2008

EL HURACAN MAS LARGO DE LA HISTORIA CONTEMPORANEA

EL HURACÁN MAS LARGO DE LA HISTORIA CONTEMPORANEA


Por Eusebio Merladet

Si admitieran sin dobleces ni repetidas sandeces, sólo un par de minutos para oír a un interlocutor de otro pensar, estos funcionarios del Gobierno de Cuba, que reparten panfletos por Internet a los “amigos de Cuba” al tiempo que amenazan a los coterráneos que no piensan como ellos; funcionarios, a quienes no hay necesidad de descalificar (ellos mismos se ocupan de eso por sus actos).

Indiscutiblemente, Fidel Castro es, cada vez más transparente en el ocaso de su pendulante ideario. Dice lo que no quisiera decir, pero ya no hay sostén y se le escapa, ya no insulta el intelecto de nadie, porque todo suena a inevitable.

Estas últimas “reflexiones” tituladas a su teatral manera “EL HURACÁN” son virtuosa materia prima para percibir, por donde anda la mente del otrora Comandante en Jefe.

… cuando el huracán Gustav surgió inesperadamente, coincidiendo con la llegada de nuestra delegación olímpica, y amenazaba a nuestro territorio, escribí: “¡Suerte que tenemos una Revolución!

¡Claro que tiene suerte de tener una Revolución! Si él, aunque utilice el desgastado plural. Cómo si no, si no fuese, aferrado al Poder que se autoconfiere, puede concebirse que, después de una exhibición al mundo, en las pasadas Olimpiadas, del deterioro de los deportes en los últimos años en Cuba, porque nuestros deportistas ya no tienen lugar para la mística, para la maltrecha ideología de Potencia en los deportes, éste señor, ya no sabe cual huracán es más fuerte y evidente si la llegada de la frustrada Delegación (bajas e indisciplinas cuentan) o la llegada del Gustav con toda la fuerza destructora a su paso. No es casual que mezcle ambos eventos demoledores…“¡Suerte que tenemos una Revolución!, exclama como quien quisiera que así fuese. Es cierto que en Cuba no hay una contrarrevolución operante y, es que tampoco ya hay una Revolución.

Mas adelante afirma: Está garantizado que nadie permanecerá en el olvido… Una fuerte, enérgica y previsora Defensa Civil protege a nuestra población… Dos afirmaciones seguidas de puntos suspensivos, que no creo que sean casuales sino causales. La primera afirmación, tal vez dirigida a los que “no rindieron en su deporte lo que esperaba él (para el entrenador tal vez era evidente). La segunda afirmación, separando las distancias, es algo así como evidenciar el Misterio de la Santísima Trinidad: Si la Defensa Civil, es el Pueblo, pues es entonces es “el Pueblo que protege al Pueblo”, pero sucede que en el mítico lenguaje, Defensa Civil es una superestructura demostrativa de la capacidad de la Revolución, que a su vez es otra figura mítica con personalidad “muriente”.

Sigue diciendo en su “reflexión El Huracán”: Los tiempos exigen cada vez más consagración, más firmeza y más conciencia. No importa que los oportunistas y vendepatrias también se beneficien sin aportar nada a la seguridad y el bienestar de nuestro pueblo.” Cincuenta años exigiendo “cada vez más consagración, más firmeza y más conciencia” . Quienes con el lógico cansancio de al menos dos generaciones, que nunca vieron los resultados prometidos ni el hombre nuevo cercano y empiezan a comparar lo alcanzado con lo alcanzado por quienes tienen el poder o la prebenda con menos esfuerzo, quienes cansados se tiran al mar o ven y logran “un hueco” por donde salirse, a esos compatriotas, los ofende y descalifica detrás de sus “reflexiones” ¡No aguantaron!...¡Bárbaros! No aguantaron lo que él, a su modo de vida tan irreal como su falsa modestia y mediático plural “nosotros” “nuestra” etc. … oportunistas y vendepatrias también se beneficien sin aportar nada a la seguridad y el bienestar de nuestro pueblo.” Así los descalifica y lastima, sin asco, cuando cualquiera de ellos dió a “su Revolución” una cuota de sacrificio y años, juventud y salud. Esa es su “falta de odio” a la que mas adelante apela.

“Conozco los descomunales esfuerzos que la Revolución debe realizar cuando pasan por el territorio nacional los huracanes. Puedo añadir que Cuba cuenta con científicos agudos e insistentes como José Rubiera”.

Los descomunales esfuerzos son del Pueblo, que padece escasez redoblada en tiempos de azote de los fenómenos atmosféricos. La Revolución sólo ha responsabilizado históricamente, menos a ella y al desgobierno del Régimen, a todo tipo de fenómenos, catastróficos (el hueco en la capa de ozono), naturales (lluvias torrenciales y huracanes), políticos (la mafia de miami), económicos (el embargo) y hasta fenómenos de Salud (Neuritis óptica); el fracaso y la imposibilidad de avanzar en 50 años a una sociedad justa que respete al menos las libertades de sus ciudadanos.

Si, es verdad que José Rubiera es un científico agudo e insistente; lo es por sus conocimientos, pero ni más ni menos aguda e insistente que la Doctora Hilda Molina, castigada por el solo hecho de disentir. La diferencia: la aceptación ¿circunstancial? de José Rubiera a los designios de “la Revolución” y ni siquiera la oposición sino solo la disensión de la Doctora Molina. Ejemplos sobran y ni siquiera me atrevería a decir, que éste, con toda su carga de realismo y crudeza sea el más evidente. Hasta ahí se llega: Un científico bueno porque acepta (hasta hoy) a la Revolución y una científica mala (ya no tiene los honores que ganó) que pide ir a ver a sus nietos fuera de la Cárcel País y no se lo permite “la Revolución”.

Cientos de millones de horas de trabajo se pierden en breve tiempo, cuando ráfagas de viento baten directamente centros económicos y sociales de extensas áreas del territorio nacional. Interminables lluvias acompañan a estos fenómenos naturales. Los ríos se desbordan, barren cuanto encuentran a su paso e inundan considerables zonas. Miles de instalaciones productoras de hortalizas, leche, huevos, carne de ave y de cerdo, sistemas sofisticados de riego, son seriamente dañados; decenas de miles de hectáreas de caña, granos proteicos, cereales y frutales próximos a cosecharse son derribados; escuelas, policlínicos, lugares de recreación y cultura, viviendas, techos, fábricas, almacenes, carreteras y puentes son golpeados por los vientos y las aguas. En esta ocasión, los vientos y las lluvias afectaron en mayor o menor grado a todas las provincias, al transitar el huracán por los mares próximos al sur del país y atravesarlo por la provincia más occidental con un radio de 30 kilómetros en el ojo y más de 450 en el diámetro de los vientos fuertes.

Pués, el párrafo anterior, hasta podíamos decir que está carente de creatividad literaria. Temo parecer exagerado en mi comentario, pero leerlo me lleva al de un amigo que me “rewardeó” las reflexiones con un comentario muy agudo y risorio. Me dijo: “… no me imagino como será la vida sin haberlas leido”.

Toda esa visión que ofrece cualquier huracán, pase por un territorio con o sin Revolución, en nuestro caso cubano, puede describirse sin el paso del fenómeno atmosférico y si por causa del paso del fenómeno político llamado Revolución. …” Miles de instalaciones productoras de hortalizas, leche, huevos, carne de ave y de cerdo, sistemas sofisticados de riego, son seriamente dañados…; en cincuenta años fueron destruidos por la incapacidad de quienes dirigían, algunos por ignorancia, otros por indolencia y los más por falta de motivaciones reales. La escasez es un fenómeno de causas internas y no externas como se ha querido hacer ver con paradoja incluida, porque “siempre la Revolución ha vencido al bloqueo”…¿en qué quedamos?.

( Huracán Gustav )

“…decenas de miles de hectáreas de caña, granos proteicos, cereales y frutales próximos a cosecharse son derribados; escuelas, policlínicos, lugares de recreación y cultura, viviendas, techos, fábricas, almacenes, carreteras y puentes son golpeados por los vientos y las aguas.” Todo esto lo hemos visto sin huracanes a lo largo de los largos 50 años, por la desidia, la inoperancia, el trasfondo político superando el hecho económico. Como si eso lo desconociera el artífice del descalabro, pero hoy lo narra muy cercano y con olor a que se lo imagina o quizá ya lo sabe, pero de ocultarlo tanto tiempo, de viejo, lo va olvidando.

Es que no tiene desperdicio tanta desfachatez o ignorancia culposa. De no contener tanta burla pareciera subrealista Sigue diciendo en sus “reflexiones”:

“Nada es tan desolador como la destrucción y el daño que se observa después de un huracán. Cientos de miles de compatriotas se movilizan y trabajan intensamente en la fase ciclónica y de recuperación. Las reservas se reducen o agotan. Hoy más que nunca el golpe a los suministros de alimentos es costoso y sensible. Pero este es nuestro país, la parte que nos correspondió de nuestro planeta, y hay que desarrollarlo y defenderlo”. Si hay algo más desolador y es la destrucción que se observa a diario, en el día a día del cubano simple, del cubano “de a pié”, del cubano que se moviliza y trabaja sin ver el fruto de su trabajo, de ese que se le está cayendo el techo por el tiempo y la imposibilidad de conseguir o “resolver” unas tablas o unas bolsas de cemento por la inconmensurable disculpa del bloqueo imperialista o el huracán que pasó hace 20 años por el municipio. El verdadero huracán es el de la sinverguensura de una clase política que se regenera con cada descalabro, que se clona a todos los niveles de incidencia de la sociedad cubana hartamente descompuesta por la desesperanza y la falta de todo.

“Pero este es nuestro país, la parte que nos correspondió de nuestro planeta, y hay que desarrollarlo y defenderlo”. En esta afirmación ya no se puede ocultar la maldad subyacente, la herida sicológica que se pretende refrendar en lo inamovible de la afirmación, en una certidumbre impositiva. El mensaje: No nos queda más remedio, somos objeto por último de la predestinación del Tirano. Así pretende manipular aún a un Pueblo que le ha dado por 50 años el derecho a la duda y no ha correspondido.

La tarea que tenemos por delante exige tiempo y experiencia. No se construye en un minuto la verdadera Cuba y su noble pueblo, que ha sido capaz de compartir con otros sus conocimientos e incluso parte de sus recursos y de su sangre. Por eso ha sido adversario imbatible frente al poderoso imperio, que ha ensayado contra nuestra patria todas sus armas.

Pero al mundo apenas se le habla de sus méritos y su extraordinaria lucha.

Más de lo mismo. La receta, otros 50 años “de tiempo y experiencia” cuando la verdadera Cuba todos sabemos que comenzará a emerger cuando haya un mínimo de libertad y de posibilidades de creatividad de los cubanos. Cuba podría comenzar a emerger en un solo segundo.

Por dónde debe andar la mente del Comandante en Jefe, que se atreve a comentar el suceso, nada extraordinario y ya habitual, de la decisión de un ciudadano cubano, refrendado por su Constitución Política de hacer valer su derecho de residir donde mejor le plazca, sin que sea considerado culpable de delito alguno o digno de crítica o mención del Gobernante.

No se dará cuenta este señor que divaga y embadurna cuartillas cada vez con mayor cinismo, que está hablando de un cubano enjendrado por su propia Revolución, pero además con una fuerte carga política por su relación con la nomenclatura represiva (policía) en su papel de actor (policía) y represor. Está hablando precisamente de un ejemplo de fracaso de su ideología, un ejemplo de que nada impuesto verá la luz con la dignidad necesaria. Muchos como Yamil Jaled, el actor de marras “destrozado” o ensalsado, quién sabe, por las reflexiones del Comandante, muchos como él no pueden por deseos que tienen, abandonar el barco de la llamada Revolución. Dice luego:

¡Qué patriota, qué demócrata qué brillante ejemplo el que nos presentan como prototipo!, podríamos añadir los cubanos. De este modo se divulga al mundo un tipo mucho menos conocido e importante que el huracán Gustav.

Me gustaría mencionar una frase que gusta un amigo: Solo un cisne negro para demostrar que los cisnes negros existen. La comparación que hace de Yamil con el Huracán es verdaderamente risible. Quieren hacer de él una vaca sagrada.

…Las convicciones más profundas, a prueba del tiempo y los vaivenes de la vida, no se alcanzan en un día. Hay que vencer antes muchas tendencias que llevamos dentro. POR FIN, algo coherente y de razón; al rato hubo un momento de lucidez. No lo voy a comentar para dejar motivación a reflexionar en lo que dijo o quiso decir.

( Motel Los Jazminez, Viñales, Pinar del Río. Fuente Iglesia Católica )

Pero el raciocinio duró unos segundos, de inmediato quiso reivindicar el rato lúcido y escribió, lo que puede ser la antítesis de su verdadera personalidad:

No odio a otros seres humanos, pero odio la vanidad, la egolatría, el egoísmo, la pedantería, la autosuficiencia, la ausencia de ética y otras inclinaciones con las que los seres humanos venimos al mundo, y sólo la educación y el ejemplo de los más sobresalientes en su batalla por ser mejores, triunfa e influye sobre nosotros. Hace falta un mínimo de filosofía sobre la necesidad de la modestia.

“Manden refuerzos que estamos ganando”, solía decir un amigo ante un acto consumado de fracaso. Este párrafo es verdaderamente lapidario. Que hablen todos los que consciente o inconscientemente han tratado de sobresalir, más allá de donde el Comandante ha puesto los términos de referencia nunca escritos en tinta negra, pero si con sangre.

“Hay vacas sagradas que pretenden equiparar a nuestros Cinco Héroes, brutalmente separados de su patria y de sus familiares más cercanos e íntimos, con los mercenarios justamente sancionados por traidores y nunca sometidos a ultrajes personales e inhumanos.” Pura retórica Guebeliana. Como si no estuviera claro para el último de los mortales que haya sido enterado del caso de la Red Avispa, “mandada a matar” como decimos en buen cubano por el propio Castro. Yo creo que finalmente juega como Pablito y Silvio, con un lenguaje que algún día podrá dársele propiedad en la Real Academia de la Lengua como sucedió con el Cantinflismo.

Dime de lo que presumes y te diré de lo que padeces, parece haber tenido la necesidad después de nombrar a los cinco de la Red Avispa que fueron apresados tras informaciones filtradas por el propio Fidel según se conoce, en un acto muy poco frecuente de imprudencia y error táctico que lo comprometió al uso, manipulación y abuso de esta cuestión, por compromiso con los familiares de los traicionados por él. Era muy evidente la diferencia de el trato dado a estos “espías criollos” por las Leyes de los EE.UU que pecan de exageración de Derechos y el trato que reciben nuestros hermanos presos por disentir. No se si en su mente estará la posibilidad de un canje en algún momento, pero cada vez más se relaciona por su parte una y otra causa.

Pero pudiéramos decir que, ¿quién no conoce que en Cuba hay Presos de conciencia?. Pues no se extrañe, en Cuba hay cubanos que no lo saben, no parecen saberlo, o no quieren saberlo por último por temor; pues sólo se mencionan como aquí lo hace el Tirano, con epítetos insultantes, lo que no ha hecho ni el más bajo funcionario en relación a los cinco del caso Avispa, pues sabe lo que las leyes pueden hacer al efecto.

Los “cinco héroes” como han sido bautizados los acusados de espionaje en suelo extraño por un País, confesos todos, son manipulados de manera grotesca insultando consuetudinariamente el talento de los cubanos que hastiados ya se niegan a seguir la cantaleta y se burlan con los más disímiles chistes dando paso a aquello de que el cubano hace risas su desgracia.

Por último se despide con otro acto de lucidez, lo que pasa es que no sabemos o no llegaremos a comprender nunca cual es la verdadera lectura que se propuso el Comandante con su despedida de esta reflexión huracanada: “Lo que expongo en esta reflexión reafirma la convicción que deseo transmitir a mis compatriotas, de que sólo sobreviven las ideas justas defendidas con valor, dignidad y firmeza” . Así como lo hace cada uno de los cubanos presos de conciencia que si sufren todo vejamen. Si Usted puede ser condenado por la simple sospecha de que en algún momento pudiera delinquir “Ley de Peligrosidad” que puede esperarse en términos de trato humano con los que preso están y se les acusa de traidores y mercenarios por el simple hecho de disentir del Régimen.

“ideas justas defendidas con valor, dignidad y firmeza” ese es el mayor temor de los Tiranos y muy claramente lo ha dejado ver en esta su última reflexión.

1 Comments:

At 3:31 p. m., Anonymous Anónimo said...

Primero, como es posible, que un miembro de la Seguridad del Estado o policia politica cubana encubierto como es el camarada Eusebio Merladet, pueda estar escribiendo contra su maximo lider Fidel Castro???? Evidentemente esta infiltrado en algo y es toda una trampa para atrapar estupidos incautos. Caballeros, no sean tan comemierdas e investiguen la historia ya no tan oculta de este chivato del regimen que no se canso de espiar familiares y amigos para el regimen. Preguntense por que no vive en Miami como otros muchos cubanos? Aqui nos gustaria tenerlo un rato para que nos comente su escrito de "La Honestidad, Pasala"!!!!
Ely Marvin.

 

Publicar un comentario

<< Home