BARACUTEY CUBANO

La artista dijo que con esta acción dio su 'espacio a otros'. 'La gente subió, pero pudieran no haber hecho nada y la performance habría sido el vacío'.
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Redacción CE | 01/04/2009


Las autoridades culturales de la Isla calificaron de "provocación contra la Revolución" el pedido de libertad y democracia que hicieron varios artistas y blogueros durante una performance de la artista plástica Tania Bruguera en el Centro Wifredo Lam.

"Varias personas ajenas a la cultura, encabezadas por una 'disidente' profesional fabricada por el poderoso grupo mediático PRISA, aprovecharon una performance de la artista Tania Bruguera para realizar una provocación contra la Revolución Cubana", señala una declaración del Comité Organizador de la Décima Bienal de La Habana, publicada este martes en la revista oficial La Jiribilla.

( Tania Bruguera, foto en su sitio http://www.taniabruguera.com )

Las autoridades se refieren a Yoani Sánchez, autora del blog Generación Y, así como a otros blogueros, entre ellos Claudia Cadelo (Octavo Cerco), y también a artistas, curadores, coleccionistas e invitados extranjeros que acudieron a la acción plástica como parte del programa de la X Bienal de la Habana.

El performance, parodia del famoso discurso de Fidel Castro, en 1959, cuando una paloma se posó en su hombro, consistía en una tribuna custodiada por dos jóvenes vestidos de verdeolivo que se encargaban de colocar una paloma en el hombro de los oradores cuando tomaban la palabra por sólo un minuto. Así, si el discursante demoraba más tiempo del permitido, lo echaban del podio.

En el comunicado, los organizadores de la Bienal tildan a los participantes de "individuos al servicio de la maquinaria propagandística anticubana, que repitieron el desgastado reclamo de 'libertad' y 'democracia' exigido por sus patrocinadores".

Según la nota, ellos "hablaron —o actuaron más bien— para las cámaras; y hoy varios medios de la Florida convertían el incidente en una gran noticia".

El reclamo de liberar a los presos políticos, así como pedir democracia y libertad de expresión en la Isla, que hicieron quienes intervinieron en la performance, es "un acto anticultural, de oportunismo vergonzoso, que ofende a los artistas cubanos, a los artistas extranjeros" y al "pueblo", sostiene el Comité Organizador.

Asimismo, considera "ofensivo" la utilización "del espacio libre y plural" de la Bienal por "asalariados de quienes manipulan la opinión pública, mienten, censuran, mutilan y coartan sistemáticamente la libertad de expresión y de pensamiento", indica la declaración, y agrega que fue un "espectáculo protagonizado por unos pocos buscadores de notoriedad y de dinero fácil, sin ideas ni decoro".

"Nuestras instituciones y nuestros artistas, acusados constantemente por esa misma maquinaria de politizar la cultura, continuaremos defendiendo la creación artística más libre y diversa y el acceso a ella de nuestro pueblo", afirman las autoridades culturales.

Por su parte, Tania Bruguera declaró al diario El Nuevo Herald que lo que hizo fue dar su "espacio a otros". "Yo estoy bien. No quiero crear una mitología innecesaria", dijo el martes desde La Habana.

La creadora, citada por el rotativo, explicó que no tenía idea de cómo los presentes reaccionarían a la oferta de hablar por el micrófono. "La gente subió, pero pudieran no haber hecho nada y la performance habría sido el vacío. Nunca pensé que tanta gente hiciera eso, que la gente se expresara cómo lo hizo. No conozco a los que hablaron. En realidad, estaba fuera de mis manos, y me parece bien", dijo.

El martes, Bruguera negó a CUBAENCUENTRO.com que se hubiera cortado la palabra a Ciro Díaz, guitarrista del grupo de rock-punk Porno Para Ricardo, porque "el acto finalizó" cuando ella dio las gracias al público y se inició otra presentación.

"Desactivaron el sistema de audio porque se había acabado. Había programada otra después de la mía", afirmó en tanto a El Nuevo Herald.

La performance forma parte de una serie titulada "El susurro de Tatlin", por el artista y arquitecto ruso Vladimir Tatlin, famoso por sus intentos de construir un edificio monstruosamente alto, y ya ha sido repetido en Londres y Miami.

"Soy una artista que no hace sentir cómoda a la gente. Soy una artista que trata de hacer lo imposible. Ese es mi trabajo y así es cómo llevo mi vida personal", concluyó.



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