viernes, febrero 12, 2010

CUBA: ALGO DEL ¨MODUS OPERANDI¨ DEL DEPARTAMENTO DE SEGURIDAD DEL ESTADO, DSE. CADENA DE MANIPULACIONES

CADENA DE MANIPULACIONES



Por Guillermo Fariñas
Periodista independiente
cocofari62@yahoo.es

La Chirusa, Villa Clara, 11 de febrero de 2010 (PD) Los órganos represivos de la Seguridad del Estado cubana trabajan sobre las debilidades humanas más disímiles. Una de ellas son los sentimientos de inferioridad e inseguridad que cada persona trae consigo en la estructura de su personalidad.

De pronto, una pareja de cohesionados colaboradores y entusiastas miembros de la emergente sociedad civil cubana comienzan a desconfiar el uno del otro. El trabajo que realizaban se atomiza y paraliza por la incomprensión entre ambos, hasta llegar hasta al extremo que se crean diferencias irreconciliables en la otrora unida pareja. Sus compañeros de luchas e ideas se quedan atónitos ante la brusca y dolorosa ruptura y se la achacan a las incompatibilidades de sus respectivos temperamentos. La sorpresa ante la quiebra de la colaboración prodemocrática de estos disidentes, obstaculiza observar el trasfondo de manipulación de la Seguridad del Estado.

Existen opositores poco entendidos en las intrigas urdidas por los servicios secretos castristas que dejan de tener en cuenta la profesionalidad de represores. Tras cada anticastrista existe un sistemático chequeo de su personalidad, tanto de sus fortalezas como de sus debilidades.

Nadie debe dudar que miembros activos de la Seguridad del Estado, quienes nunca muestran sus rostros, conforman los Equipos Multi Disciplinarios (EMD) que escrutan el día a día de cada anticastrista conocido. Estas unidades de análisis están conformadas esencialmente por abogados, psicólogos, psiquiatras, sociólogos y antropólogos sociales.

Un axioma que se utiliza en estos menesteres represivos es que los puntos fuertes de cada sujeto no deben ser tocados por los oficiales operativos. Mientras, los evaluados débiles son sobre los que tienen que incidir los uniformados punitivos, que le dan la cara a aquellos considerados contrarrevolucionarios.

Muchos son los métodos para enemistar a íntimos y peligrosos luchadores pro-democracia. Sin embargo, refieren antiguos oficiales de la Dirección General de Contra Inteligencia del Ministerio del Interior, que uno de los más prácticos es el conocido como Manipulación en Cadena.

Esta metodología represiva consiste en crear en uno de los individuos, considerados desestabilizadores del poder totalitario, una mezcla de sentimientos hacia el prójimo, como la envidia, inferioridad y desconfianza, para levantar una insuperable barrera psicológica entre ambos disidentes, que no les permita trabajar juntos.

Para esto, se escoge a un grupo de agentes secretos encargados de levantar toda una cadena de calumnias respecto a uno de los integrantes del dueto de opositores. Estos infiltrados pueden tener fachada de supuestos opositores pacíficos organizados e incluso la de simples desafectos al gobierno castrista. Entonces, de un modo dosificado, le hacen llegar inventadas actitudes poco íntegras sobre su hermano de batallas cívicas. Estas calumnias pueden ir desde unas falsas o exageradas compras con divisas libremente convertibles hasta el irrespeto para con el cónyuge.

Al principio, arriban estas informaciones a la conciencia de uno de los atacados y este no le da credibilidad alguna. Pero cuando estas noticias se sistematizan, entonces comienza a dudar en cuanto a la rectitud de su compañero de luchas e ideas, pues la falta de fiabilidad a nivel social incide en el opositor cuestionado, porque el no vive en una urna de cristal.

Por su parte, el oponente calumniado interpreta esta posición de duda sobre su honradez como una colaboración con los órganos represivos para obtener algún tipo de prebenda. Lo que ambos a veces nunca llegan a entender es que son víctimas de sus propias debilidades personales y que cayeron en una cadena de manipulaciones.

cocofari62@yahoo.es