sábado, abril 24, 2010

SOBRE DEBATE ENTRE SILVIO RODRÍGUEZ Y CARLOS ALBERTO MONTANER

REPENTISMO POLÍTICO Y CONTROVERSIA DESIGUAL




Por Juan González Febles
Publicado 22/04/2010
Periodista independiente.
jgonzafebster@gmail.com


Lawton, La Habana, 22 de abril de 2010, (PD) La más reciente polémica entre Carlos Alberto Montaner y Silvio Rodríguez, da la medida de los tiempos y de emergentes alcances y proyecciones. El político y el artista rompieron moldes de viejas miopías y vieron oportunidades en la misma encrucijada en que otros, sólo vieron trampas.

Aunque desde una primera lectura superficial, algunos en Cuba y también fuera de ella, dan a Montaner como ganador de esta controversia, pienso que verdaderamente no hubo perdedores: el espectáculo fue bueno y ganaron todos.

El universo mediático tiene sus reglas. Personalmente no pienso que este espacio sea el más cruel, dentro de las reglas del mercado. Lo que si puede asegurarse es que básicamente, las reglas son semejantes para todos.

En Cuba, la música campesina exhibe un género que resulta primado, me refiero al punto guajiro. El punto se basa en una confrontación amistosa en que dos cantores, riman por turno y mediante el uso de la décima, (como recurso formal) improvisan. Esta es la poesía repentista campesina. Los encuentros entre decimistas, son confrontaciones honorables (música por medio) de donde surgen sanas rivalidades. Cuando la controversia es de interés, el equilibrio deja de ser importante. Ambos rivales juegan, crecen las apuestas y al final, ganan ambos.

Desconfiado como soy, me pregunto: ¿Por qué, los equipos multi disciplinarios de las diversas y florecientes policías de seguridad política, subordinadas al partido único cubano, lo permitieron? ¿Cuál será la ganancia para ellos, si el ex diputado Silvio Rodríguez, cantautor oficial emblemático del régimen, participa en una polémica o una controversia, con nada más y nada menos que, Carlos Alberto Montaner?

Carlos Alberto Montaner, no es una figura ampliamente conocida en Cuba. Los menos, le conocen por su participación en programas de la proscrita emisora Radio Martí. Un grupo mayor, conoció (y olvidó rápidamente) la versión ofertada por el vomitivo televisivo Mesa Redonda, en que, Lázaro Barredo (director de Granma) lo presentó como un agresivo terrorista. Luego del berrido de Barredo, la creciente leva de personas que comienzan a preocuparse por temas políticos, gracias a las nuevas tecnologías de la información, (muchos jóvenes entre ellos) le ven como un nuevo bloguero de la hueste juvenil de Yoani Sánchez y otros, lo identifican con algún cantautor venezolano. El estreno en las tablas del repentismo político, junto a Silvio Rodríguez, aún y cuando la controversia haya sido desigual, le abre oportunidades insospechadas Cuba adentro a Montaner y cotiza mejor el paquete de acciones mediáticas del ex diputado y siempre trovador Rodríguez.

Silvio por su parte, es y ha sido un hombre de oportunidades. Quiero decir que es alguien capaz de aprovecharlas. Quizás esta controversia con Montaner, cuyo origen puede haber estado en las declaraciones del cantautor en la Casa de las Américas, aporte a Silvio el oxígeno depurador que tanto necesita.

Luego de este intercambio, quizás será recordado como reformista y contrario a la pena de muerte. Pasará a piadoso olvido que en función de diputado de la Asamblea Nacional del Poder Popular, apoyó la ejecución de tres infelices jóvenes negros habaneros en 2003. O que en ese mismo año y en ejercicio de idénticas funciones, apoyó el encarcelamiento de 75 pacíficos activistas pro democracia. Después de esto, hasta los yanquis, podrían perdonarlo y permitirle entrar a los Estados Unidos. A fin de cuentas, es un reformista que quiere cambios, está contra la pena de muerte y hasta a favor de una amnistía.

Adicionalmente, será una promoción europea e incluso miamense de primera, para su CD ‘Segunda Cita’. Este es en mi opinión, un poco de lo mejor que ha hecho Silvio en años. La entrega está recorrida por el aliento, (aunque no la presencia) de aquel formidable Afrocuba y los arreglos fuera de serie de Oriente López. ¿Puede pedirse más?

Si se tiene en cuenta la creciente crisis de credibilidad en que está sumergido el régimen de La Habana, por la actuación valiente y sin mácula de las Damas de Blanco, el martirologio de Orlando Zapata Tamayo, las demandas por la libertad incondicional de los presos políticos e incluso la satanización en ascenso del gobierno cubano, no hace falta decir más. Esto último ha cerrado el circuito, sólo por la mera existencia de presos políticos y de conciencia bajo su responsabilidad en la Isla. Entonces, ya existen elementos de sobra para un análisis y quizás, hasta para una conclusión.

El régimen militar necesita a toda costa que Zapata Tamayo, las Damas de Blanco y la creciente leva pro democrática emergente, con la que deberá lidiar más temprano que tarde, pasen a la papelera de reciclaje de un olvido mediático inmediato. Si para esto, hay que hacer alguna concesión, ¡Paris bien vale una misa!

El encuentro mediático entre el cantautor Silvio Rodríguez y el Sr. Carlos Alberto Montaner, fue un momento de excelente repentismo político, favorable al Sr. Montaner, en términos de rimador y decimista exitoso. Ciertamente dejó al pobre Silvio en patética desventaja. Pero a pesar de todo, ganaron los dos, o como dice la canción: mucho más que dos. Sólo unamos a esta ecuación al gobierno cubano y a sus intereses políticos más inmediatos. Esto lo digo, al echar de momento un manto de silencio a la ganancia en todo esto del dueto Moratinos-Zapatero.

Hoy, los principales problemas del régimen cubano están en Cuba. Estos, caminan, gritan, demandan, se visten de blanco y portan gladiolos. Cualquier desvío de esta línea o que distraiga la atención mediática mundial de las inconvenientes Damas, las cárceles y las calles de Fidel, resulta bienvenido.

La Calle 13, los Van Van, Kool & the Gang o la Charanga Habanera, da igual. El mal, es de guayabas y peor digestión, para viejos verdes. En este contexto es mejor, antes que la tumba, la rumba. Con Salsa y con décima, con Silvio y con Montaner: ¡Que viva la polémica, que baile el gordo y que siga el show!

Caricatura: Ilei Urrutia gaulo51@yahoo.com