domingo, mayo 09, 2010

UNA REUNIÓN CONTRARREVOLUCIONARIA EN CUBA

UNA REUNIÓN CONTRARREVOLUCIONARIA




Justify FullPor Amarilis C Rey
Periodista independiente.
amarilisrey@yahoo.com


Managua, La Habana, mayo 6 de 2010 (PD) Este último viernes de abril un grupo de periodistas de la prensa independiente se dieron cita en la sede de la APLP ( Asociación Pro Libertad de Prensa), en la localidad de Managua, Ciudad Habana, para analizar la Constitución de la República de Cuba y el Código Penal vigente.

Este fue una de las tertulias en que el Dr. Wilfredo Vallín Almeida, abogado que preside la Asociación Jurídica de Cuba, disertó sobre un tema solicitado por algunos comunicadores, con el objetivo de conocer las leyes que sirven a las autoridades para silenciar, condenar y llevar al “orden” a la disidencia y a todo el pueblo cubano.

Apenas unas horas antes de la cita, tres personas integrantes del CDR (Comité de Defensa de la Revolución) de la localidad, se personaron en el lugar para advertir al periodista José Fornaris que existían vecinos descontentos por las reuniones contrarrevolucionarias que se efectuaban en su vivienda..

A esa misma hora y a varios kilómetros de distancia, el periodista Odelin Alfonso, recibió la visita de un agente de la policía política para reprocharle su asistencia al “encuentro” que, de igual manera, calificó de contrarrevolucionario.

Con igual intención, oficiales de la Seguridad del Estado visitaron a los periodistas Juan González Febles y Julio Alega Pesant.

La policía política trató de intimidar la noche anterior a Luís Cino. “No vamos a permitir ese tipo de reuniones, si asistes será de tu entera responsabilidad lo que te pueda ocurrir”, le advirtieron.

El conversatorio comenzó a la hora acordada. Durante sus más de tres horas de duración fue notoria la presencia de personas muy adultas en varios casos, de andar cansino, que merodeaban frente a la casa y fisgoneaban con detenimiento. Varios de ellos esperaban apostados en la esquina de la cuadra a que le correspondiera su turno de recorrido y, al parecer, la orden para iniciar uno de los llamados actos de repudio, la que no llegó o no fue impartida por el mando correspondiente.

Si el gobierno de Cuba dice contar con el apoyo de todo el pueblo, ¿a qué temen cuando un grupo de periodistas deciden analizar las leyes que el mismo gobierno creó? ¿Por qué le han expresado al Dr. Vallín, según él afirma, que disertar sobre leyes y derechos es “darle armas al enemigo”?

Las copias de la Constitución cubana no están a la venta de manera frecuente. Solo hay un sitio en toda la ciudad donde en ocasiones es posible encontrarla: en la sede de la Gaceta de Cuba. Muchas personas saben que existe, pero desconocen su contenido.

La frase es casi la misma cuando se indaga sobre la Constitución a personas del pueblo:
“La Constitución y todo eso está muy bien. Pero tú sabes que aquí las leyes las ponen y las aplican ellos (el gobierno)”.

Ante todo lo sucedido para impedir la mejor comprensión de las leyes y de los derechos que otorga la Constitución socialista de 1976, el periodista José Fornaris opinó: “Mientras los Castro estén en el poder la hipocresía, la intolerancia, el rencor y el odio estarán de plácemes. Y el basamento fundacional de la nación continuará deteriorándose”.