miércoles, julio 14, 2010

¿Qué pasará con los presos que se quedan en Cuba?, preguntan sus familiares

Tomado de http://www.elnuevoherald.com


¿Qué pasará con los presos que se quedan en Cuba?, preguntan sus familiares


Por CARLOS BATISTA / AFP
LA HABANA /
martes, 07.13.10

Los presos políticos cubanos que descartaron emigrar a España, de 52 que el Gobierno de Cuba decidió liberar, desconocen hasta este martes las condiciones de su excarcelación y de su vida futura en la isla, lo que aumenta la angustia de sus familiares.

Alejandrina García, esposa de Diosdado González, condenado a 20 años, dijo a la AFP que su esposo permanecerá en Cuba "luchando por los derechos humanos y corriendo el riesgo de ser encarcelado otra vez por sus actividades''.

Según la Iglesia Católica, hasta ahora 20 de esos 52 aceptaron viajar a España, país que anuncio su disposición de acogerlos a todos con sus familiares, pero entre los 32 restantes algunos tienen dudas y cerca de una veintena ha dicho a sus familiares que no emigrarán.

Muchos familiares tratan de estimular la salida migratoria, tanto para reponer la salud de los excarcelados, como para tratar de eliminar la angustia acumulada en siete años por la separación, en las difíciles condiciones económicas que vive la isla.

"Estamos cautelosos al igual que los otros que como nosotros hemos decidido quedarnos, pues no sabemos como será la cosa, como funcionará'', dijo a la AFP Elsa Morejón, esposa del médico Oscar Elías Biscet, condenado a 25 años.

Los excarcelados ahora, tras el inédito diálogo entre el presidente Raúl Castro y el cardenal Jaime Ortega, apoyado por España, son el resto que quedaba en prisión de los 75 disidentes condenados en 2003 a penas de seis a 28 años.

De ellos, 22 fueron excarcelados entre 2004 y 2010 bajo licencia extrapenal por motivos de salud, y uno por cumplimiento de condena, el de seis años.

Uno de ellos, el economista Oscar Espinosa Chepe, dijo a la AFP que en su carta de liberación se advierte la posibilidad de regreso a prisión, y que las oportunidades laborales que le ofrecieron -construcción y agricultura- las rechazó debido a sus 69 años.

"La licencia extrapenal es un limbo'', dijo Martha Beatriz Roque, la única mujer del grupo de los 75, pues como Chepe carece de derecho a salir del país o moverse a otras provincias, y votar en elecciones, aunque como el resto los ciudadanos tiene asistencia médica gratuita y alimentos subsidiados.

Ambos, como también Héctor Palacios, retornaron a la actividad política opositora, y los tres denuncian vigilancia y control de las autoridades.

De los 52 presos, según fuentes de la disidencia, la mitad presenta problemas de salud, por lo que al resto las autoridades deben aplicarle otros motivos para excarcelarlos.

El Gobierno cubano considera a los disidentes como "mercenarios'' al servicio de Estados Unidos y la reinserción social de los excarcelados resulta difícil, tanto por los que los rechazan, como por aquellos que no quieren verse implicados con ellos.

La mayoría no tiene vínculos laborales con el Estado, propietario de casi toda la economía nacional, y viven de ayudas familiares o de otros disidentes, elemento blandido por autoridades para afirmar que son "asalariados'' de Washington.

La excarcelación masiva anterior, en 1998 tras la visita del Papa Juan Pablo II, se realizó mediante un indulto presidencial, que benefició a unos 300 reos, la tercera parte de ellos políticos, los cuales buscaron un lugar en la sociedad o emigraron.

"Biscet sólo conoce que será liberado por el comunicado del Arzobispado que publicó (el diario oficial) Granma, pero nadie le ha dicho nada'', agregó Morejón.

Los primeros siete en emigrar con sus familiares, manifestaron su preocupación en un comunicado a su llegada a Madrid: "tenemos la esperanza de que los que quedan en Cuba gocen de la misma libertad que nosotros''.