BARACUTEY CUBANO

Nota del Bloguista

Si el Departamento de Seguridad del Estado,  DSE,  es eficiente, la  Contra Inteligencia Militar, CIM, no lo es menos. Según el Teniente Coronel (retirado) Chris Simmons, interrogador de la espía  Ana Belén Montes,  los Órganos de Control de  las Fuerzas Armadas Revolucionarias  ocupan aún lugares más relevantes dentro de los organismos de Inteligencia y Contrainteligencia a nivel mundial que sus homólogos del DSE, los cuales están entre los mejores 5 a nivel mundial. Esperemos no ver a Fariñas ni a otros,  condecorados por el Jefe del Enfrentamiento a la Contrarrevolución  Interna como lo fue Elizardo Sánchez Santacruz Pacheco a finales de los años 90s del pasado siglo XX y que posteriormente digan que fue un bolígrafo.



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Tomado de http://www.primaveradigital.org

Vida o muerte, el juego de hoy

Por Primavera Digital   
Jueves, 13 de Junio de 2013

Estamos en presencia de un escenario inimaginable hace poco tiempo atrás. Declaraciones en las que nadie hubiera creído, hoy son divulgadas desde medios de prensa de cierto relieve local y de amplia resonancia mundial.

Tales afirmaciones son divulgadas y comentadas por periodistas supuestamente especializados en el tema cubano. Guillermo Fariñas, Premio Sajarov a partir de su participación en la lucha opositora interna sumado esto a la feliz e increíble supervivencia lograda desde las huelgas de hambre que lo catapultaron a la fama y celebridad mundial, hace afirmaciones que conocedores sufrientes de la realidad cubana in situ se niegan a aceptar.

Todo esto llevó un tiempo demasiado largo en su articulación. El caso es que las recientes afirmaciones de Fariñas como esa de que, "militares cubanos están estudiando los cambios post-comunistas en Rusia —y agentes de la Segur+
idad del Estado están siendo amables con los disidentes— en preparación para una posible transición en la isla", solo serían posible en un espacio ajeno y desconocido que no es la Cuba en que vivimos y en que paradójicamente vive Fariñas.

Esos agentes de la policía Seguridad del Estado y esos militares, se integran en el servicio de un bodrio totalitario ajeno al estado de derecho y al respeto de la ley. De hecho, para ellos no existe ley de ningún tipo y solo órdenes. Se guían en su actuar por los llamados "ordeno" del Comandante en Jefe, que en la actualidad sigue siendo -al menos nominalmente- Fidel Castro. Aun así, los llamados "ordeno", en la actualidad permanecen vigentes e inamovibles bajo el mando del general presidente Raúl Castro, que no hablado o insinuado que piense derogarlos.

Los "ordeno" establecen en alguna de sus partes que, "los revolucionarios no son amigos de los contrarrevolucionarios". En otra interesante sección afirman, "la orden del jefe representa el mandato supremo de la patria". La primera afirmación excluye toda posibilidad de diálogo como el que dice sostener Fariñas. La segunda, da la medida de que los segurosos no mienten cuando afirman con harta frecuencia: "no nos importa la ley, cumplimos órdenes".

Si Fariñas mantiene contactos con políticos en ascenso como Díaz Canel o con militares en activo de las Fuerzas Armadas o elementos de la policía de Seguridad del Estado, entonces solo caben dos posibilidades. Es víctima o cómplice del juego diseñado por alguien de la élite de poder verdeolivo y nada más.

Otro integrante de ese grupo de analistas de la realidad cubana que califican como interesantes, aunque predecibles y nos referimos al señor Haroldo Dilla, se pregunta desde su cetro académico: "¿Qué sucedería si actores de la élite deciden escoger a figuras de la oposición como interlocutores?". La respuesta para el Sr. Dilla, es conocida por muchos actores internos y externos de esta tragedia o comedia bufa en que parece haber encallado la política cubana. La respuesta para esta élite sería buscar esos interlocutores o crearlos. La otra cara de la respuesta sería invalidar o demeritar a los interlocutores molestos, como hizo el Sr. Dilla con la líder de Damas de Blanco, la Sra. Berta Soler. La descalificación llegará en ese delicioso estilo tan común a los seleccionados por la élite para acceder al conocimiento en esas universidades para revolucionarios que aun sufrimos por acá.

Entonces, si de crear interlocutores se trata y esto es casi obvio para muchos, la élite verdeolivo debe contar con una infraestructura de inteligencia creada y consolidada que asuma el desafío. A partir de esto y afirmados en los recursos con que esta élite cuenta sacados del trabajo esclavo de los cubanos de la Isla y de la miseria impuesta por más de cinco décadas, el camino está allanado.

Mediante el uso indiscriminado del dinero en tráfico de influencias, sobornos, clientelismos y otras lindezas fuera del alcance de todos los que dentro de Cuba no forman parte de la élite verdeolivo cubana, esto se hace y casi se ha hecho posible. Pero hace falta más. Es muy necesario que los que podrían contratar auditores, analistas, detectives financieros y otros recursos fuera del alcance de los que aún son maltratados por la policía de Seguridad del Estado dentro de Cuba y fuera del alcance o el interés visual de Fariñas, les dejen "jugar". Es menester que la incompetencia o la indolencia de los líderes de la nación que posa de líder del mundo libre y donde tiene lugar el juego, les permita hacerlo.

Todo saldrá al gusto del imaginario del Sr. Dilla y la élite verdeolivo logrará sus fines de mutar y sobrevivir. En estos momentos, se trata de vida o muerte para el castrismo. El juego abrió sus puertas y disponen de los interlocutores que crearon frente a la indiferencia de los que podrían haberlo impedido y no lo han hecho. El tráfico de influencias, los sobornos y el clientelismo, jugaron y continúan. Las autopistas de la indignidad siguen abiertas. Hagan juego y hagan sus apuestas por el destino del pueblo cubano. Vida o muerte, la quiniela del momento.

Para Cuba actualidad: primaveradigital2011@gmail.com