sábado, febrero 06, 2016

Luis G. Torné Aguililla: ¿Oposición leal en Cuba?


 ¿Oposición leal en Cuba?


Por Luis G. Torné Aguililla
Burdeos, Francia,
Febrero 3, 2016

Burdeos, Francia, Luis Tornés, (PD) Como a los de la Banda Armada habanera se les vienen encima la vejez, los decesos, los cambios y las traiciones de última hora -sí, sí, os traicionaréis entre vosotros mismos, como lobos-, pues han lanzado al viento la noción de « oposición leal » junto a otros globos neutralizantes que pretenden canalizar el sentimiento oculto de los millones de muertos de hambre en aquella isla de las mil miserias.

¿Oposición leal a qué o a quién?

La pregunta viene porque uno ve que en los parlamentos democráticos, las comisiones de trabajo sobre múltiples temas de la vida, incluyen a miembros de todos los partidos, por ejemplo, en una comisión de las Fuerzas Armadas, lo mismo usted tiene a diputados de derecha que de izquierda trabajando juntos sobre detalles operacionales confidenciales porque se trata de gente que, por encima de todo, le debe y le tiene lealtad a la República y a la nación que los eligió libremente en un marco político democrático.

Lealtad pero a la nación y a la República, y no a un partido ni a una ideología y mucho menos a yo no sé qué «trueno vestido de nazareno» (con perdón de Antonio Machado).

La Banda Armada habanera, que ya navega oronda hacia la versión más hedionda del capitalismo, va con su cosmología propia, su estética y su verborrea pero a sabiendas de que seguramente tendrá que aceptar la idea de que, colectivamente, los cubanos le otorgarán la merecida « damnatio memoriae » (como a Nerón en Roma) lo que, en el caso cubano, viene siendo una especie de «fuiste un accidente criminal de nuestras vidas y nunca más volverás».

Los que por tal de mantenerse en el poder han causado tanto dolor en la familia cubana después de provocar el derrumbe económico del país, no podrán perpetuarse en la memoria positiva de la nación tomando apoyo en una supuesta « oposición leal » u « oposición constructiva » porque la única esperanza es que brote masivamente en Cuba una oposición política libre y exclusivamente leal al pueblo, para que nunca más entreguemos el país a ningún ilusionista.

Otra vez saco este tema porque se ven maniobras desde mediados de 2015 en torno a esa broma pesada de la posible «oposición leal» en Cuba, cuando nadie sano de juicio puede ser leal a su verdugo, eso se cae de la mata.

lgta58@gmail.com; Luis G. Tornés Aguililla
Nota: « Damnatio memoriae » o « condena de la memoria » era cuando el Senado romano condenaba al olvido a algún personaje público.