La Cheka, la máquina del terror de la revolución rusa de octubre de 1917. El Terror Rojo
El último ajusticiado en España fue el maestro Cayetano Antonio Ripoll, ahorcado en valencia el 31 de julio de 1826. Trece años antes las Cortes de Cádiz habían suspendido este tipo de actividades del Santo Oficio, pero con las reformas absolutistas de Fernando VII se crearon las Juntas de Fe. El Tribunal de la Fe del Arzobispado de Valencia, presidido por Simón López García lo declaró hereje y lo condenó a muerte por leer libros de la Ilustración francesa, sospecha de masón, no llevar a sus alumnos a misa y sustituir el tradicional saludo de «Ave María» por el de «Alabado sea Dios».
Historiadores contemporáneos
Henry Kamen, The Spanish Inquisition: A Historical Revision. (Yale University Press, 1998); ISBN 0-300-07880-3
¨Fusilen y ejecuten inocentes porque hasta que todos no se sientan en peligro no habrá posibilidad de instaurar el régimen que nosotros queremos instaurar¨
Sobre El Libro Negro del Comunismo pueden leer AQUÍ.
Sobre el basamento Marxista del Nazismo (no por gusto se llamó Nacional Socialismo) pueden leer AQUÍ.
Fragmentos tomados de https://es.wikipedia.org/wiki/Terror_Rojo_(Rusia)
Terror Rojo
Para superar a nuestros enemigos, debemos tener nuestro militarismo socialista propio. Tenemos que llevar con nosotros 90 de los 100 millones de habitantes de la Rusia soviética. En cuanto al resto, no tenemos nada que decirles. Deben ser aniquilados. (5)
*******
En Nizhni está claro que se prepara una rebelión de los guardias blancos. Debemos ejercer todo esfuerzo posible para que tres dictadores (Usted, Markin, etc) de manera inmediata introduzcan el terror de las masas, disparen y eliminen cientos de prostitutas, soldados borrachos, antiguos oficiales, etc. No se puede perder un minuto.(6)
(6) Lenin. Obras Completas. Tomo L. Pág. 52 (en ruso)
**********
El 15 de octubre un trabajador de la Checa, Gleb Bokiy, resumió que el Terror Rojo había terminado oficialmente, informó que en Petrogrado 800 supuestos enemigos habían sido fusilados y encarcelados otro 6.229.7 Las bajas en los dos primeros meses fueron entre 10.000 y 15.000 sobre la base de listas del sumario personas ejecutadas publicada en el periódico Checa Semanal y otros pulsos oficiales.
Según el escritor Donald Rayfield, el comunista húngaro Béla Kun, con la aprobación de Lenin, habría hecho ejecutar a 50.000 prisioneros de guerra blancos tras la derrota del general Piotr Wrangel a manos de los anarquistas del Ejercito Negro, a finales de 1920.(10)
(10) Donald Rayfield. Stalin and His Hangmen: The Tyrant and Those Who Killed for Him. Random House, 2004. ISBN 0-375-50632-2, p. 83
***********
El 16 de marzo de 1919, la Checa irrumpió en la fábrica Putílov. Más de 900 trabajadores que fueron a la huelga fueron detenidos. Más de 200 de ellos fueron ejecutados sin juicio durante los días posteriores
***************************
********
Los bolcheviques aplicaron métodos despiadados para aniquilar incluso a los sospechosos. Era habitual que a las expediciones de la Cheka a unaregión les asignase un cupo de contrarrevolucionarios para liquidar. Los enviados solían superar los números.
********
Por Pedro Fernández Barbadillo
2017-01-25
La Inquisición española existió entre 1480 y 1820; en estos tres siglos y medio las condenadas a muerte fueron, según Joseph Pérez (Breve historia de la Inquisición en España) inferiores a las 10.000, de las que no todas se cumplían fuese por arrepentimiento, por muerte o por huida del reo. Los investigadores Jaime Contreras y Gustav Henningsen calculan los ejecutados entre 1540 y 1700 en sólo 810, ya que la mayoría de las penas de muerte se dictaron entre finales del siglo XV y principios del XV
De la revolución bolchevique (1917-1918), la guerra civil posterior (1917-1923) y el régimen comunista, que se prolongó hasta 1989, el número de muertos por la maquinaria policiaca y judicial roja se desconoce por su amplitud: genocidios planificados, deportaciones en masa, trabajo esclavo, purgas en el partido, hambrunas provocadas…
Pese a la realidad, los datos y los documentos, se puede reivindicar impunemente la revolución rusa, incluso mintiendo, como han hecho el concejal Carlos Sánchez Mato y el diputado Alberto Garzón. Sin embargo, éstos se indignarían si alguien explicase la magnitud real de la Inquisición.
¨Cuando las tropas blancas entraron en Kiev encontraron unos 5.000 cadáveres atribuidos a la acción de los chekistas y, también, 7.000 desaparecidos.¨
En febrero de 1917, los alemanes habían introducido a Lenin y sus camaradas en Rusia, después de sacarlos de Suiza, con la finalidad de que causasen disturbios y debilitasen el esfuerzo militar del ejército zarista. En el caos de ese año, después de la abdicación del emperador, el centrista y masón Kerenski, presidente del Gobierno provisional, recurrió a las milicias comunistas para reprimir un golpe de Estado de derechas en el verano, pero fue a su vez derrocado en octubre. Kerenski fue uno de los pocos protagonistas de esos años que tuvo la suerte de poder escapar de Rusia y gozar de una larga vida en Francia y Estados Unidos; falleció en 1970 y la Iglesia Ortodoxa rusa no quiso recibirlo en ningún cementerio.
‘Limpiar’ la retaguardia
Inmediatamente, los bolcheviques se prepararon para conservar el poder por todos los medios. Cuando las elecciones a la asamblea constituyente (noviembre de 1917), dejaron a los comunistas como tercer partido, éstos dieron un golpe de Estado y la cerraron en enero de 1918.
Entierro de Uritski, Petrogrado, 1918. La pancarta dice: "Muerte a los burgueses y sus adláteres. ¡Viva el Terror Rojo!".
La guerra civil se extendía por el país. Contra los bolcheviques no sólo luchaban los rusos monárquicos, sino también otros grupos políticos, diversas nacionalidades, los prisioneros checos y, en el frente, los alemanes y los austriacos. Para combatirlos, Trotski levantó el Ejército Rojo. Y para ‘limpiar’ la retaguardia Lenin y su camarilla fundaron una institución que durante casi un siglo ha sido sinónimo de tortura y muerte.
Entre las medidas del nuevo Gobierno rojo hay algunas sorprendentes, como la relajación de los requisitos para el divorcio y la instauración del aborto libre y gratuito (pensadas para destruir la familia a largo plazo), y otras que no lo son tanto si tenemos en cuenta la situación en que se hallaban. Entre éstas sobresale la siniestra Comisión Extraordinaria, la Cheka, una policía política con poderes omnímodos para investigar, juzgar y ejecutar. La instauró Lenin en diciembre de 1917 mediante un decreto y nombró al polaco Félix Dzerzhinski como su primer director. El Ejército Rojo se fundó en enero de 1918, por lo que para los bolcheviques era más importante aterrorizar al enemigo interior y civil que defenderse el enemigo exterior y militar.
En una semana más condenas que en 90 años de zares
De la misma manera que el camino que conduce a Auschwitz comienza en las leyes raciales de Núremberg (1935), que establecían quién era judío y que el judío no podía mezclarse con el alemán, los genocidios que perpetran los comunistas en todo el mundo (ningún partido comunista ha alcanzado el gobierno por medios pacíficos) se encuentran en la doctrina y el lenguaje empleado por Lenin y sus seguidores. Aparecen conceptos como "enemigo del pueblo", "enemigo de clase", "contrarrevolucionario", "hombre nuevo", "reeducación", "terror socialista", "voluntad de hierro bolchevique", "patria del proletariado", "opresores", o "gulag", a los se añaden otros ajustados a circunstancias históricas y los diferentes países, como "kulak", "gusano", "quintacolumnista", "monarcofascista", o "espía trotskista (o japonés, o inglés, o…)", que ampararon el exterminio de millones.
Entre 1825 y 1917, todas las condenas de muerte dictadas por los tribunales civiles y militares del régimen zarista en asuntos de orden político ascendieron a 6.321, de las que 1.310 (un 20%) se dictaron sólo en 1906, como reacción al año revolucionario de 1905. En su primer año de funcionamiento, había semanas en que la Cheka bolchevique duplicaba o triplicaba el número de sentencias de muerte de 92 años de monarquía.
Dzerzhinski, con el conocimiento de Lenin y los demás bolcheviques, como Kamenev, Zinoniev, Bujarin, Trotsky y Nadezhda Krúpskay, aplicó métodos despiadados para aniquilar incluso a los sospechosos. Era habitual que a las expediciones de la Cheka destinadas a una ciudad o región les asignase un cupo de contrarrevolucionarios para liquidar. Los enviados, movidos por su celo bolchevique, solían superar los números.
El chequista letón Jan Lacis destacó en la represión de Kiev en 1919. Elaboró argucias como montar un falso consulado de Brasil y hacer correr el rumor de que el cónsul vendía visados´. La Cheka local arrestaba a quienes acudían a la oficina buscando una vía de escapar de la orgía de sangre. Cuando las tropas blancas entraron en Kiev encontraron unos 5.000 cadáveres atribuidos a la acción de los chekistas y, también, 7.000 desaparecidos.
El órgano de batalla del Partido
Lacis fundó un periódico, La Espada Roja, en el que definía así a la organización a la que servía (Donald Rayfield, en Stalin y los verdugos):
La Cheka no es sólo un órgano de investigación: es el órgano de batalla del partido del futuro. (…) No juzga al enemigo, lo golpea. No demuestra ninguna piedad (…) Nosotros, como los israelitas, tenemos que construir el Reino del Futuro bajo el temor constante al ataque del enemigo.
La máquina montada por Lenin y Dzerzhinski siguió reclamando sangre en los años siguientes. Stalin la llevó a su punto culminante de terror en la URSS y otros camaradas, como Pol Pot en Camboya y Mao en China, la difundieron por el mundo, para "alumbrar la revolución"; también llegó a España, traída por los consejeros soviéticos del Frente Popular durante la guerra civil.
Los argumentos con los que los bolcheviques de entonces, todos los comunistas habidos y por haber y los compañeros de viaje han justificado o disculpado (según el grado de admiración, complicidad o idiotez) el gulag y la Cheka son la pobreza y la tiranía que había en Rusia.
Al comienzo de un libro que nos trajeron los Reyes Magos, El ocaso de la aristocracia rusa, se dan unas cifras sobre el desarrollo económico del imperio, cuya base social y económica seguía siendo agrícola, pero que se encontraba en la senda de la industrialización. Antes de la Gran Guerra, Rusia era la quinta potencia industrial del mundo, superaba a Francia en la producción de acero e igualaba a Estados Unidos en la de petróleo. La red de ferrocarriles pasó de unos 1.400 kilómetros en 1850 a 64.000 en 1905. La línea de ferrocarril más larga del mundo era el Transiberiano y también la telefónica, que unía San Petersburgo y Moscú. Todos esos avances los destruyeron la guerra mundial y, sobre todo, la revolución.
Como escribió Nicolás Gómez Dávila: "Para detestar las revoluciones el hombre inteligente no espera que comiencen las matanzas".
****************
Tomado de https://www.youtube.com
“La verdadera historia de la Unión Soviética” narra uno de los más espantosos episodios del siglo XX: los crímenes cometidos por la Unión Soviética desde su nacimiento con Lenin, las masacres perpetradas por Stalin en los años 30 (como la hambruna de Ucrania que costó 7 MILLONES DE MUERTOS). El Comunismo mató - a lo largo de su historia - más de 240 MILLONES DE PERSONAS. “La verdadera historia de la Unión Soviética” contrasta el paralelismo entre las dos ideologías totalitarias que más muertes han causado en la Historia de la Humanidad: el Nazismo (hija del comunismo) y el COMUNISMO. En ambos casos –se explica en el documental- se trata de crear un “Nuevo Hombre”. Esto implica que ninguno de esos dos sistemas están de acuerdo con la naturaleza del ser humano, tal y como es: en el primer caso –el nacional socialismo- se basa en la biología (racismo) para tratar de extirpar a los individuos que no encajan con el ideal ario. En el otro caso –el comunismo- se basa en la depuración de individuos indeseables mediante otra ciencia, la sociología. Ambos totalitarismos, pues, fundamentarían sus respectivas atrocidades en supuestos y falsos fundamentos científicos. Así, para la obtención del “Hombre Nuevo” en una perfecta sociedad futura, todo estaría permitido: el asesinato masivo –de razas, de enemigos políticos, de “indeseables”, de “inadaptados”, el genocidio, en definitiva, sería un método más.
**********
El destino de los asesinos del último zar
Por Yan Shenkman,
Rusia Hoy
15 de julio de 2013
(El sótano de la casa de Ipatiev trás la ejecución de la familia Romanov. Fuente: Archivo)
El Zar y su familia. Junto a todos ellos fueron también fusilados el médico, los servientes y hasta los perros de la familia. Foto y comentario añadidos por el por el bloguista de Baracutey Cubano.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home