jueves, noviembre 08, 2018

Zoé Valdés: La despetroncada "ola azul" en las elecciones norteamericanas de medio término de noviembre de 2018


La despetroncada "ola azul"

Por Zoé Valdés
2018-11-07

Los que esperaban que la tan esperada "ola azul" arrasara en las elecciones norteamericanas se quedaron con las ganas. La "ola" fue a estrellarse, a despetroncarse solita, con su histeria y su poca o ninguna agudeza, más bien vulgaridad, y menos énfasis y creencia en el valioso sistema electoral, además de su extremismo lindante con la violencia más peligrosa e insoportable.

Lo cierto es que, como dice mi estimado David Hall, habrá Donald Trump para rato, y esto es lo que les molesta realmente a los engañadores y a los que se dejan engañar con gusto y sarna. Este es el análisis de David Hall:
  •     La Ola Azul no se materializó. Hasta ahora, en la Cámara, ha sucedido lo que la historia dictaba, pero sin dramatismo: el partido de oposición ha ganado (quizá) unos 35 escaños –recordemos que Obama, en las primeras elecciones de su presidencia, perdió 63 escaños.
  •     La historia, en realidad, hasta ahora ha sido en el Senado, donde los republicanos han alcanzado 3 escaños y podrían llegar a 5, lo que significa que la política judicial del presidente Trump está asegurada. Este punto, en particular, será probablemente el mayor legado del presidente Trump, que ya ha nombrado 2 magistrados al Tribunal Supremo y quizá pueda nombrar al menos uno más. Dejando en la medida de lo posible mis inclinaciones conservadoras, pro Trump, a un lado, los demócratas tienen derecho a estar contentos, pero nada de fiesta. Los republicanos tienen mucho más que celebrar, ya que los resultados anticipan muchas posibilidades para la reelección y ulterior aumento de la mayoría en el Senado y probablemente recuperar la Cámara en 2020.
  •     Además, se demostró y consolidó el star power del presidente Trump y la total declinación de las estrellas demócratas como el ex presidente Obama y Hollywood.
De cualquier modo, y pese a las buenas noticias, a mí me sigue inquietando que una señora tan extremista, declarada ella misma socialista, aunque más bien en la línea comunista del castrista Bernie Sanders, haya conseguido un puesto en el Congreso; se trata de la iluminada Alexandria Ocasio-Cortez, de origen boricua; así como la presencia de dos islamistas, una de ellas, Rachida Tlaib, por Michigan, y la otra –de la que varios periodistas han comprobado que se casó con su hermano–, Ilhan Omar, por Minnesota. Estas últimas por el Partido Demócrata.

Aseguré el otro día que para qué seguir empecinados en querer salvar una isla, cuando de lo que se trata es de salvar el mundo. Y hoy más que nunca lo pienso. Desde ahora hay que seguir luchando por salvar el capitalismo y la democracia en Estados Unidos, y por evitar que todos estos maleantes comunistas consigan el poder disfrazados de corderos y a través de las urnas. Desenmascararlos y situarlos en su propia caldera de cocción es una acción que debemos asumir como los seres humanos amantes de la libertad y del verdadero y auténtico progreso que somos, que sin el capitalismo auténtico resultaría imposible siquiera que existiéramos.