BARACUTEY CUBANO

Tomado de https://www.facebook.com/nicolas.aguilaf

Veintiséis años

Por Nicolás Águila
22 de junio de 2019

Salí de Cuba el 22 de junio de 1993. Después de esperar casi treinta para largarme. Recuérdese que a los varones en edad militar nos prohibieron la salida del país a raíz de Camarioca y no pocos nos quedamos en Cuba con el estigma de gusanos.

Veintisésis años sin ver mi barrio habanero, sin ver mi pueblo natal, sin ver a mis padres que se me murieron en años recientes. Veintiséis años caminando por calles que nunca llegan a ser del todo mías. Veintiséis años sin mojarme en el Malecón o bañarme en el Hanabanilla de mi niñez. Veintiséis años sin ver de nuevo a muchos amigos de la infancia y la juventud que se quedaron a cargo de sus rehenes o que andan desperdigados por el mundo.

Han sido 20 años gardelianos, con seis de contra, que no parecen nada pero lo son todo, viviendo sucesivamente en Brasil, España, Estados Unidos y de nuevo España, junto a mi hijo y mi mujer madrileña. Veintiséis años, después de todo enriquecedores, que compensan cualquier neurosis de exiliado sin retorno. ¿Qué más voy a pedirle a la vida? Son 26 años irrepetibles y, aunque ya no soy un chaval, todavía tengo el paso firme y la musa retozona. Que me quiten lo vacilao