jueves, diciembre 01, 2005

RESCATE DE BALSEROS CUBANOS IMPACTA A TURISTAS DE UN CRUCERO MIAMENSE

Extraido de : http://www.canf.org/
Rescate de balseros cubanos impacta a turistas de un crucero miamense

LUISA YAÑEZ The Miami Herald
Miércoles 30 de noviembre de 2005

Más de mil turistas que viajaban en un crucero para celebrar el Día de Acción de Gracias y que habían contemplado a lo lejos la costa de Cuba, tuvieron que hacer una parada inesperada durante el fin de semana para rescatar en el Estrecho de la Florida a 10 balseros cubanos que viajaban en una embarcación de 15 pies de largo, según contaron ayer los pasajeros.
Entre los balseros que la tripulación del Zenith rescató del mar el domingo se encontraba una niña pequeña llamada Jennifer.
La chiquilla de siete años se ganó el corazón de los pasajeros en las 10 horas que estuvo a bordo del barco, una embarcación que pertenece a la compañía Celebrity Cruises, de Miami. Sin embargo, para la niña y su familia, el drástico cambio de una pobre balsa casera a un suntuoso trasatlántico de lujo duró poco.
Los siete hombres y dos mujeres del grupo fueron trasladados a un escampavías del servicio Guardacostas cerca de las 11 p.m. , donde todavía permanecían ayer, declaró la suboficial Dana Warr. Sus nombres no han sido revelados y ningún familiar ha reclamado su custodia.
El grupo está siendo interrogado por las autoridades de inmigración quienes determinarán si son repatriados a la isla o se les permite asentarse en un tercer país.
Mientras tanto, el viaje del Zenith terminó en el Puerto de Miami-Dade ayer por la mañana. Para algunos pasajeros, sin embargo, ser testigos presenciales de la odisea de los balseros cubanos, un drama único del sur de la Florida, fue una experiencia inolvidable. ''Nosotros estábamos en este barco enorme y de repente verlos a ellos en esa embarcación tan pequeña con un techo medio roto, que se balanceaba de un lado a otro, y haciéndonos señas de una desesperación total fue algo impresionante'', afirmó uno de los pasajeros, Steve Wright, oriundo de Ohio, que trabaja para un comisionado de Miami.
''¿Cómo puede la gente hacer una cosa así?'', preguntó asombrado Wright, que fue quien descubrió el grupo con su cámara.
Otros pasajeros, que desconocían la política norteamericana de ''pies secos-pies mojados'' que se aplica últimamente a los cubanos que abandonan la isla, pensaron que la historia había tenido por suerte un final feliz y que Jennifer se encaminaba con su familia para Miami. Después, el cubano Joel Villa, analista de sistemas del Knight-Ridder, les explicó la triste realidad a los que quisieron conocerla.