sábado, enero 14, 2006

CUBA, BAJO TRAICION Y TIRANIA, A LOS 47 AÑOS

Cuba, bajo traición y tiranía, a los 47 años

Escrito por Vicente R. Gutiérrez Santos


27.12.2005 Se vuela rápido, se vive con el tiempo intensa y extensamente, un porcentaje del pueblo aún sigue en el escenario que un líder traidor y traicionero cambió repentinamente a los seis millones y medio que vivíamos en nuestra Patria en aquel momento, para que de una manera gradual nos fuéramos percatando que todo lo prometido era traicionado: Reforma Agraria, Elecciones para qué?, Pacto con la URSS en Mayo 1960, NO a la Libertad de Mercados, Libertad de expresión, Libertad de Educación, NO a todas las libertades reconocidas por los Derechos Humanos hacía 10 años por la ONU (Dic.1948), confiscación del sudor acumulado a través de la LAU, Ley de Nacionalización de Octubre 1960, Ley del Paredón de Enero 61, Creación de los CDR…
Desde principios de 1959 surgían las leyes casi a diario para cambiar la estructura económica y social del País. Se puede decir que en dos años y cuatro meses lograron este cambio pendular a la fuerza, por opresión al pueblo y aprovechándose aún del apoyo popular. Cuando el cubano y cubana ecuánimes, sin fanatismos políticos, analizaban los hechos y todas las leyes que se promulgaron, se dieron cuenta del infierno que estaban preparando para vivir. Y decidieron tomar grandes decisiones para reconducir sus vidas.
Fue entonces cuando Cuba empezó a escindirse. Los que tenían algunos recursos marcharon enseguida al Exilio, quizá pensando que era momentáneo. No imaginaban que iban a pasar tantos años fuera de su Patria. Otros, que se enfrascaron en la lucha para recuperar la revolución por la que se había luchado, se quedaron, o sufrieron condena de años, o fueron llevados al Paredón, o desaparecieron en el Estrecho de la Florida. Los más afortunados cambiaron de vida y reiniciaron otra distinta, en otros países, donde incluso se sufrió una dictadura previa de tipo militar, pero donde la vida económica estaba permitida y funcionaba, donde aún los de clases humildes luchaban con la gran oportunidad de mejorar sus calidades de vida.
Es cierto que añoramos la Cuba de antes, porque las generaciones de nuestros padres y abuelos habían logrado muchos progresos. Nuestra generación ya estaba en la lucha continua, nada revolucionaria, por lograr el acceso a oportunidades para favorecer a sus familias. Si recorremos los 47 años bajo la Tiranía, etapa superior de la dictadura, llegamos a amargas conclusiones. Salvo algunos pequeños progresos como la industria turística y los deportes, el resto -incluyendo los manoseados epígrafes de la educación y la medicina, cubiertos por el Estado- llegamos al abismo de la Vida Ciudadana.
No se puede vivir en un país como Cuba, muy representativo del peor Sistema del Siglo XX. Después de 72 años de existencia a nivel mundial, el Comunismo demostró, con la Caída del Muro de Berlín y del Telón de Acero en toda la Europa del Este, que no funcionaba; y Gorbachov buscaba hacer reformas para salvar el Sistema, pero su Perestroika invitó a participar a otras figuras como Boris Yeltsin que plantearon otras alternativas distintas. Observemos el ejemplo de China con su famoso eslogan “Un País, dos Sistemas”. Quieren lucirse en las Olimpiadas 2008.
Evidentemente, nuestro pasado fue hermoso porque Cuba era el tercer país en el Ranking económico de América Latina. Y la tendencia de seguir mejorando nos situaba en lo que ahora se denomina “un desarrollo sostenible”. Si comparamos la situación de Cuba con otros países que han dado el salto -España entre ellos- nos percatamos, con hechos y no con palabras, que Cuba iba hacia el pelotón de cabeza, detrás del famoso G-7 o G-8. No obstante, debemos mirar hacia el futuro, ya que ni siquiera podemos vivir el presente. La familia Castro y otras familias de militares son excepciones a las miserias que conocemos. Ellos se han asegurado la vida del futuro. Tienen recursos financieros bien colocados en el exterior (no en el exilio), gestionan importantes negocios y actividades de inversión. Y los delfines ya están a cargo de los negocios. Quedan asegurados.
De dónde ha salido todo ese dinero? Pues de las confiscaciones de propiedades, joyas, colecciones, pinturas, etc., las Leyes de Reforma Agraria, Arrendamiento Urbano y Nacionalizaciones de Octubre 1960 primero y de los negocios turbios después, incluyendo la droga (cocaína) procedente de Colombia con destino USA para corromper a la juventud americana a la salida de los High Schools. Préstamos de países amigos u organizaciones de ayuda. Otro negocio paralelo es el caso de la Empresa Cubanacán, a cargo de todas las inversiones de hoteles turísticos y la venta de petróleo subsidiado primero por la URSS y después por Venezuela, que han permitido pingües riquezas.
Ser dueño absoluto de una nación como Cuba, la Isla Grande, con productos de consumo de primer nivel en mercados del exterior y arropado con los subsidios de naciones como la URSS (100,000M) hasta 1989 y la Venezuela de Chávez en los dos últimos años de petrodólares, permiten diseñar una vida cómoda para los suyos, pero a cambio se crea una igualdad en la pobreza y la miseria del pueblo cubano. Este pueblo es el gran pagano. Es el principio básico del socialismo igualitario, cuya filosofía es la Envidia, su estrategia la Calumnia, su debilidad la Corrupción y su resultado el Fracaso Total.
A mi juicio, el consejo debe ser universal para todos los cubanos. Los del Exilio quisieron seguir al Apóstol en su frase “Sin Patria, pero sin Amo”. Muchos de la Cuba interna también, pero unos cuantos cientos están en el presidio castrista, uno de los más bestiales, iniciado en los años sesenta. El totalitarismo, la opresión, la tiranía fueron mucho más allá de torturas en interrogatorios. Castro quiso convertir su Hotel de 5* en Isla de Pinos, hoy redenominada Isla de la Juventud... Perdida. Ocho mil presos en aquellos edificios (cuatro circulares, dos cuadradas, dos pabellones). 20,000 lbs de TNT bajo cada Circular cuando la Crisis de los Misiles en Octubre de 1962. La situación total de Cuba encerró a 60,000 presos y hubo casi 20,000 fusilados y/o desaparecidos durante la época del Castrismo que aún no ha cesado.
A los que ofrendaron sus vidas por la lucha contra el Castrismo, a los que fallecieron por causas accidentales o biológicas, vaya nuestro recuerdo de mayor aprecio. Como aún pensamos en la Nueva Cuba, en la Cuba del futuro, en la Cuba post-totalitaria, alegamos que estamos enfrascados en el proceso de las 4R: Recuperación de la Patria, Reconciliación entre todos los cubanos (salvo los crímenes de lesa humanidad), Reconstrucción del País y Renovación ciudadana. Alguien conocido me ha soplado que si se dan esas 4R... asistiremos a la Resurrección de Cuba!