BARACUTEY CUBANO

Greivin Moya
Adaptación Teletica.com
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Fidel Nuñez
Analista
Jefe de Buró
Latinoamérica
Dept de Investigaciones
La Nueva Cuba
Julio 7, 2007

Cuba advierte que los informes del Centro de Inteligencia de Estados Unidos (CIA), sobre el atentando contra Kennedy en Costa Rica, forman parte de una estrategia histórica para vincularlos con el asesinato.

El cónsul general de Cuba en Costa Rica, Jorge Rodríguez, reaccionó ante las publicaciones de los archivos secretos de la CIA, que revelaron el temor de que el presidente Kennedy fuera asesinado por castristas, durante la visita que hizo en marzo de 1963 a nuestro país.

Textualmente indica: “Una información no confirmada de un complot de terroristas castristas, para asesinar al presidente Kennedy en Costa Rica, está bajo investigación”.

Más adelante en los documentos se indica: “Tenemos una información no confirmada de un refugiado cubano que 10 hombres están siendo entrenados en Cuba a inicios de febrero para asesinar al presidente Kennedy”.

A la vez le da seguimiento a 10 costarricenses que ingresaron al país procedentes de Cuba, el 19 de febrero, un mes antes de la visita de Kennedy.

Para el cónsul general, el tema de Kennedy siempre ha sido sensible para ellos, pues por todos los medios, según dicen, los han querido involucrar en el asesinato y en aquella época esos informes también formaban parte de esa acción.

Sostiene que hay evidencias del contrarrevolucionario Posada Carrilles, vinculado con el atentado.

De igual forma, Humberto Vargas, militante de la izquierda, menciona que esta posibilidad no se ha descartado y se investigó en su tiempo.

Existen múltiples investigaciones sobre la muerte del presidente de Estados Unidos y versiones que han sido plasmadas en libros, documentales y películas, como la de Oliver Stone, JFK, donde se da cuenta de una conspiración para asesinar al presidente por su posición ante el comunismo y la guerra.

También esto ha sido motivo de investigación del Congreso, conocido como la Comisión Warren, que no arrojó mayores resultados. Sin embargo, en 1979, el Congreso de los Estados Unidos determinó que hay sospechas de una conspiración en el asesinato del presidente Kennedy y ordenó una investigación profunda al Departamento de Justicia, indagación que aún no se realiza.