viernes, agosto 10, 2007

RESPUESTA DE ILIANA CURRA LUZON A LA PERIODISTA GLORIA LEAL POR SU ARTÍCULO ¿ DÓNDE ESTÁN LOS NUEVOS CUBANOS ?

Respuesta de Iliana Curra al artículo de Gloria Leal "¿Dónde están los nuevos cubanos?" publicado en El Nuevo Herald :


-----Original Message-----
From: Iliana Curra ilianacurra@hotmail.com
Sent: Tuesday, August 07, 2007 10:02 AM
To: Leal, Gloria - Miami GLeal@elnuevoherald.com
Subject: Aqui estamos muchos nuevos cubanos

Estimada Gloria: He leído su interesante artículo publicado en El Nuevo Herald con fecha 6 de agosto, "¿Dónde están los nuevos cubanos?" Este mismo mes yo cumplo 48 años. Es decir, nací justamente en 1959, cuando había empezado aquella desgracia que llaman revolución. Me crié en su odio, en su miseria material y humana. Quise ser como el Ché, viví entre carencias y promesas que jamás ví cumplir. La educación gratuíta y revolucionaria me obligó a trabajar en el campo por 45 días, viendo dia a día la degradación moral de la convivencia sin control de los padres. Pero, gracias a Dios, también me gustaba leer, y leí mucho. No sólo lo que me obligaban, fuí más allá, a las lecturas prohibidas que me enseñaron la otra cara de la moneda, la verdad oculta de una historia contada por los vencedores... momentáneamente. Escuché la radio extranjera, conversé con víctimas reales de un sistema que se jacta de su benevolencia. Me rebelé.

Pagué un alto precio: conocí la cárcel, las golpizas, el hambre atroz y las celdas de castigo. Viví de frente a la muerte en una galera donde habían presas infectadas de SIDA. Conocí la lejanía, el sufrimiento de mi familia, el dolor de mucha gente. A mujeres abusadas que mataron en defensa propia, a madres que mataron a sus hijos, a jóvenes desorientadas y a una sociedad subterránea que, si le cuento, quizás no me creería. Luego vine al exilio, me informé mucho más de la verdad negada, de la historia de mi país.
Aprendí a querer a mi bandera, a respetar a Martí, a no poder cantar el himno porque se me hace un nudo en mi garganta, a conocer el dolor de otras mujeres con las que no me puedo ni comparar. Aquí comprendí la nostalgia del exilio, conocí la esperanza, los relatos de horror de ese presidio cuando yo usaba una asquerosa pañoleta de pionera. Pero también conocí a muchos cubanos recién llegados que piensan como yo, incluso, mucho más jóvenes, pues ya yo voy para vieja. Más aún, hemos hecho públicas declaraciones que, en mi caso personal, me han costado serias amenazas de muerte contra mi vida y la de mi familia, teniendo que acudir a las autoridades. Todo eso por ser parte de ese mismo exilio suyo de pasados y nostalgias, como usted le llama. No sienta que esas nuevas generaciones no aportan nada. Cuando se generaliza se es injusto, aunque entiendo su dolor, porque también es mío. Y es también el de otros muchos jóvenes de esas nuevas generaciones recién llegadas.
Desgraciadamente los "Inmundos" y los alejandros, son parte de esa orilla envenenada de odio y resentimiento contra el exilio, mientras que apoyan al régimen (en el caso de Inmundo) abiertamente. Yo lo escucho, nadie me lo cuenta. Así como también existe una Ana Menéndez, hija de ese exilio histórico, un Oscar Corral y otros tantos cubanitos nacidos o criados en libertad que dejan mucho que desear con sus criterios llenos de resentimiento, pues en la viña del Señor, hay de todo. En fin, sólo quería decirle que no está sola.
Como dice nuestra Declaración en un párrafo: "El exilio histórico no es una imposición política. Es un concepto ideológico donde convergen todos los cubanos que reconocen que, Cuba, la patria de todos, vive sometida bajo los designios de una autocracia que ha exterminado todo vestigio de libertad y se mantiene por la represión permanente".

Un abrazo,
Iliana Curra

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Respuesta de Gloria Leal a Iliana Curra:

From: "Leal, Gloria - Miami" GLeal@elnuevoherald.com
To: ilianacurra@hotmail.com
Subject: FW: iliana curra
Date: Tue, 7 Aug 2007 20:06:27 -0400

Gracias Iliana por iluminarme con tus experiencias y por compartirlas.
Perdona si te ofendí con la generalización. Sé que también hay cubanos muy valientes entre nosotros que llegaron después de los 80, 90 y 2000.

Un abrazo, gloria