lunes, agosto 27, 2007

SECRETOS DE GENERALES

SECRETOS DE GENERALES


Por Aleaga Pesant
Periodista Independiente
Ciudad de La Habana
Cubanet
Infosearch:
José F. Sánchez
Analista
Jefe de Buró
Cuba
Dept. de Investigaciones
La Nueva Cuba
Agosto 27, 2007

Mi vecino Luis Báez, uno de los cancerberos prominentes de la "dictadura del proletariado", y decano de los "Otros Meruelos", nos deleita por estos días con un grupo de entrevistas a altos oficiales del ejército cubano, que aparecen en el periódico Granma bajo el título Secretos de Generales.

"Otros Meruelos" refiere al periodista del régimen del General Fulgencio Batista (Otto Meruelos), quien trascendió a la historia nacional por su docilidad y genuflexión ante el dictador. Luis Báez cuenta en sus huestes a colegas tan "prestigiosos" como Lázaro Barredo (prensa plana), Julio Batista (radio), Eduardo Dimas (radio y televisión), Randy Alonso, Arleen Rodríguez (prensa plana y televisión) y Reinaldo Taladrid (televisión).

Como en el Ministerio de la Verdad, del libro 1984, de George Orwell, la característica predominante del grupo es poner la historia y su conocimiento a disposición de la "dictadura del proletariado", borrando de la memoria de la sociedad todo lo desagradable para el "Gran Hermano": omitiendo y adulterando la historia real de la isla.

Las entrevistas a los militares fueron realizadas, en su mayoría, a principios de la década del noventa y aunque algunas debieron actualizarse, se mantienen fieles a las originales, debidamente editadas para su publicación en el diario, donde en los últimos meses aparecen hasta dos veces por semana. De esa manera, en los últimos días se leyeron entrevistas a los Generales de Brigada Luis Pérez Róspides, Lino Carreras Rodríguez, José Legró Seuquet, Silvano Colás Sánchez, Rolando Kindelán Bles y Juan Escalona Reguera.

La característica fundamental de las entrevistas es que gravitan sobre la actitud "revolucionaria" de los oficiales y la total ausencia de nombres o pasajes conflictivos de la historia cubana de los últimos 50 años. Por ejemplo, si alguno de los entrevistados fue de los asaltantes al Cuartel Moncada, se olvida a Gustavo Arcos y otros rebeldes que posteriormente no se avinieron a la "revolución"; o los que entraron con los insurrectos en Santiago de Cuba, el primero de enero de 1959, olvidan el papel del Comandante Hubert Matos en el cerco y asalto a la ciudad. De esa manera, los que combatieron en Bahía de Cochinos no recuerdan a héroes revolucionarios, como los pilotos Rafael del Pino y Álvaro Prendes, que no están ya en las nominas del MINFAR.

De la misma forma, los que intervinieron en las guerras africanas no evocan el valor y la intrepidez del General Arnaldo Ochoa, quien ganó el titulo de Héroe de la República de Cuba, pero fue fusilado en 1989. A los mellizos la Guardia (el General y el Coronel), legendarios terroristas subordinados directamente al primer mandatario no los recuerda nadie. Tampoco para los entrevistados existieron el General José Abrahantes, o el Coronel Dariel Pérez Alarcón, este último compañero de Ernesto Guevara en varias de sus aventuras militares por África y América.

En el caso de Lino Carreras, ejecutor de la desastrosa Operación Mambí, responsable de la pérdida del pie vacuno nacional y la destrucción de cientos de miles de hectáreas de arboledas y bosques a finales de la década del 60, no se habla una palabra del proyecto que provocó un daño ecológico y medio ambiental, no reparado; culpable también de las amplias áreas cubiertas de marabú en la isla y la ausencia de seguridad alimentaría.

Así es nuestro Generalato, retratado por Luis Báez, fieles a Fidel, a Raúl y a la amnesia. Por no decir a la mentira.