LOS OJOS PEQUEÑOS
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Por Alfredo Domínguez Batista, prisionero de conciencia
24 de febrero de 2008
Prisión Provincial de Holguín, Cuba – www.PayoLibre.com – No pude lograr un minuto de descanso, cuando vi el titular en Granma de Graciela Ramírez Cruz, coordinadora internacional por la libertad de los cinco agentes de Castro en cárceles de los Estado Unidos.
Señala el artículo, “lo vi con toda su dignidad a cuesta”, refiriéndose la señora Graciela a la visita que le hizo a Gerardo Hernández Nordelo, en la prisión Victorville, en California.
El título me trae a preguntarle a Graciela, ¿por qué son tan pequeños sus ojos? En cárceles de Cuba hay presos políticos con verdadera dignidad. ¿Le cuesta trabajo a usted entender que la dignidad es el accionar humilde, honrado y puro, sin que le falte libertad? La dignidad no se lleva a cuesta. No es una carga. Los presos políticos cubanos le atribuyen amor a la dignidad.
Aquí no hay casas cerca de la prisión que contengan o emanen sustancias toxicas, que pongan en peligro vidas humanas, como la extraña historia que usted cuenta de ese día 12 de enero en la cárcel Victorville, pero, ¿Sabe, señora Graciela, cuál es el tóxico aquí? El agua no potable. El alcantarillado en mal estado, que se tupe y corre el excremento por el patio. El área de tomar sol y de hacer ejercicios. Las ratas pasando por las noches por los destacamentos de los presos, contaminando todo lo que se encuentran. Cuando un militar niega auxilio a un preso enfermo. La comida de mala calidad. Cuando un preso trabaja sin recibir salario. La mala comunicación familiar. Y todos se hacen los de los ojos pequeños.
Señora Graciela, con respeto, el fantasma de aquel entorno que usted habla, créalo, esta aquí. Créalo. Dentro de esta prisión. Coordine un encuentro con las Damas de Blanco, en el aspecto humano. Será provechoso.
La virgen María, madre de Dios, es también madre de los fieles y de los que sufren. ¿Sabe usted por qué? Porque es un verdadero ejemplo de madre. Sólo tienen los ojos pequeños, quien es pequeño de amor.
****************
Alfredo Domínguez Batista, Prisionero politico condenado a 14 años de prisión durante la ola represiva de marzo-abril del 2003.
Los ojos pequeños
Por Alfredo Domínguez Batista, prisionero de conciencia
24 de febrero de 2008
Prisión Provincial de Holguín, Cuba – www.PayoLibre.com – No pude lograr un minuto de descanso, cuando vi el titular en Granma de Graciela Ramírez Cruz, coordinadora internacional por la libertad de los cinco agentes de Castro en cárceles de los Estado Unidos.Señala el artículo, “lo vi con toda su dignidad a cuesta”, refiriéndose la señora Graciela a la visita que le hizo a Gerardo Hernández Nordelo, en la prisión Victorville, en California.
El título me trae a preguntarle a Graciela, ¿por qué son tan pequeños sus ojos? En cárceles de Cuba hay presos políticos con verdadera dignidad. ¿Le cuesta trabajo a usted entender que la dignidad es el accionar humilde, honrado y puro, sin que le falte libertad? La dignidad no se lleva a cuesta. No es una carga. Los presos políticos cubanos le atribuyen amor a la dignidad.
Aquí no hay casas cerca de la prisión que contengan o emanen sustancias toxicas, que pongan en peligro vidas humanas, como la extraña historia que usted cuenta de ese día 12 de enero en la cárcel Victorville, pero, ¿Sabe, señora Graciela, cuál es el tóxico aquí? El agua no potable. El alcantarillado en mal estado, que se tupe y corre el excremento por el patio. El área de tomar sol y de hacer ejercicios. Las ratas pasando por las noches por los destacamentos de los presos, contaminando todo lo que se encuentran. Cuando un militar niega auxilio a un preso enfermo. La comida de mala calidad. Cuando un preso trabaja sin recibir salario. La mala comunicación familiar. Y todos se hacen los de los ojos pequeños.
Señora Graciela, con respeto, el fantasma de aquel entorno que usted habla, créalo, esta aquí. Créalo. Dentro de esta prisión. Coordine un encuentro con las Damas de Blanco, en el aspecto humano. Será provechoso.
La virgen María, madre de Dios, es también madre de los fieles y de los que sufren. ¿Sabe usted por qué? Porque es un verdadero ejemplo de madre. Sólo tienen los ojos pequeños, quien es pequeño de amor.
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Alfredo Domínguez Batista, Prisionero politico condenado a 14 años de prisión durante la ola represiva de marzo-abril del 2003.
posted by PPAC @ 2/26/2008 07:03:00 a. m.
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