BARACUTEY CUBANO

Por Alberto Luzárraga

Existe una cierta manía de 'cubanología' de pretender buscarle explicación a lo que hace el dictador suplente a medida que ubica su camarilla. Decir lo que ocurre es útil para saber donde esta cada nuevo sub-capo. Pero ahí para el asunto. No vale la pena romperse la cabeza escudriñando intenciones o políticas. Hay solo una mantenerse en el poder y hacer lo mínimo requerido en cuanto a libertades concedidas . Lo de los celulares es instructivo. No les importa que hablen, ya lo hacen a diario por los teléfonos con línea fija. Y además, cobran aún más por dejar hablar en el celular. ¿Quién paga? El exilio mayormente. Igual los hoteles. Muchos invitarán a su mamá o papá a un buen hotel para que prueben algo diferente a la sordidez de la vida diaria en Cuba. Otro ingreso para el régimen.

El riesgo para el castrismo es que hagan comparaciones pero ya lo saben y no pasa nada, piensan en su soberbia. Las comparaciones vividas sí son mas importantes y llevan a formular preguntas tales como ¿Por qué no puedo pagar yo el alojamiento? Todo tiene un efecto que no sabemos cuando fructificará pero que lo hará es cierto.

Mientras tanto el consejo a los que vayan a Cuba y agasajen a sus familias es éste: No les decimos que se abstengan de agasajarlos porque el cubano es familiero, lo va a hacer y punto. El que se abstenga por patriotismo tendrá doble mérito, pero si ceden ustedes porque quieren que sus familias vean algo que no sea miseria háganlo una vez nada más e insistan en una verdad: Si no hubiera una casta explotadora y cínica al frente del gobierno no sería necesario que viniesen ustedes del extranjero para invitar. Eso surte efecto, así como rehusar a votar por los explotadores.