BARACUTEY CUBANO

Nota del blogguista

Es muy poco frecuente que yo me haga eco de debates entre opositores cubanos de dentro y de fuera de la Isla ya que esos debates benefician fundamentalmente a la tiranía Castrista y soy de la opinión que en esta etapa de trabajo y lucha por la liberación y por la democratización de Cuba, la oposición a la Oposición antiCastrista se la haga la tiranía y no otros opositores. Pero dado que en el valioso sitio Asociación Pro Libertad de Prensa ( http://prolibertadprensa.blogspot.com ) se han planteado fuertes críticas sobre el mal manejo en el exterior de los recursos destinados a la Oposición de dentro de la Isla, críticas que comparto en determinados casos, y que esas críticas se han multiplicado públicamente después del extraño y nada problemático regreso de Héctor y de Gisela a Cuba es que deseo apuntar lo siguiente:

1) Héctor después de su operación de vesícula en el Hospital Abel Santamaría, en Pinar del Río, tuvo una exagerada estancia en la Sala de Penados disfrutando de privilegios que los demás presos de esa sala no tenían; por ejemplo: Eduardo Díaz Fleitas y Normando Hernández, también de la causa de los 75, no los tuvieron.

2) Gisela planteaba por Radio Martí, y en el Obispado de Pinar del Río ,que no la habían dejado ver a Héctor en dicha sala cuando realmente lo veía con mucha frecuencia y le dejaban pasar sin problema alguno comida y otros recursos; de eso eran testigos otros presos y personas de Pinar del Río que visitaban ese hospital.

3) Cuando en el año 2004 reunieron a todos los presos de la causa de los 75 en la Prision del Combinado del Este para hacerles un chequeo médico y valorar el trato que recibirían, algunos de dichos presos cayeron en actitudes criticadas y repudiadas por otros presos de dicha causa; uno de los nombres de los que cayeron en esas actitudes fue Héctor Palacios Ruiz.

Dado que el régimen tiránico de Cuba no da nada ¨de gratis ¨, o sea, sin nada a cambio, y que a otros destacados opositores se les ha negado salir de Cuba salvo que no regresaran a Cuba, es que afirmo que AL MENOS las figuras y las actitudes de Héctor y Gisela le son favorables al régimen cubano y que dan fuertes indicios de mucho más que eso.

RESPONDIENDO AL SEÑOR JOSÉ VILASUSO RIVERO

Por Iliana Curra.

El Sr. José Vilasuso Rivero ha escrito una respuesta “a la señora Curra”, es decir, a mí. Ha nombrado ese escrito “A la opinión pública internacional”, cosa rimbombantemente absurda, pues nada tengo que ver yo con la opinión pública internacional, ya que lo que escribo y digo, lo sostengo, más aún cuando tengo conocimiento de causa de lo que señalo.

Realmente no se a qué se refiere este señor cuando me menciona en el título, pero al final dice: “debemos añadir que omitimos nombres de personas u organizaciones”. Pero mi apellido está en ese título. Yo nunca he escrito a nombre de la organización a la que pertenezco, siempre lo he hecho a título personal, porque primeramente, soy libre de hacerlo.

Y la crítica o la “constancia pública” de este señor referente al tema del llamado disidente Héctor Palacios Ruiz, se refiere en particular sobre “la importancia de los recursos monetarios indispensables”, ampliando, además, que Héctor Palacios, junto a la disidencia en general es acosado por el régimen, etc., así como es “víctima de sus infundadas e irreflexivas acusaciones”, refiriéndose –me imagino- a lo que yo he dicho sobre este presunto disidente.

Lo que no entiendo es por qué su crítica a mí, a la cual tiene derecho, claro. Pero no puedo comprender por qué me menciona con relación a la ayuda a este personaje, si yo lo que he criticado, y seguiré haciendo, es la posición cobarde y de colaboración con la Seguridad del Estado, tanto de él como de Elizardo Sampedro Marín, Fernando Sánchez y otros personajes que, en 1994, fueron cómplices de la operación Arcoiris. Un barco perteneciente a la Seguridad del Estado que salió, al menos, tres veces de Cuba con decenas de opositores.

Todo el que vivió en esa época en Cuba, y desde aquí también, deben conocer esa historia. Un barco que salió de forma autorizada de la isla lleno de gente con el cuento de que crearían un gobierno provisional en Guantánamo. La historia mal contada de esos personajes que hoy continúan en Cuba haciendo el papel de disidentes, es algo real. Nadie lo ha inventado. Averigüe usted, Sr. Vilasuso si lo que estoy diciendo es mentira.

Claro, Héctor Palacios tiene que negarlo. Lo confronté por teléfono y no quiso discutir el tema. Simplemente me colgó. Dejando de esa manera la pregunta en el aire porque su falta de valor y de dignidad, no le permitió responder con la verdad. ¡Qué pena!

Puede usted defender al presunto disidente, responderme lo que desee, pero la verdad no la tiene en sus manos porque desconoce esa realidad. Tiene su derecho de réplica, de hecho se ha publicado su artículo, pero también debería tener el derecho de averiguar, indagar y analizar los motivos por lo cual yo también he tenido el derecho de criticarlo.

Además de lo que ya he dicho, también está la postura de Héctor Palacios con relación al levantamiento de las restricciones a la dictadura sin condiciones, su alianza con la Fundación Nacional Cubano Americana, organización que sólo le queda el nombre, ya que ha echado por tierra toda la labor de su líder ya muerto, Jorge Mas Canosa, quien debe estarse revolcando en su tumba.

Si no lo sabe, yo puedo decirle que cuando la FNCA era una organización realmente cubana y fuerte en el exilio, el Sr. Palacios no hablaba con sus directores, porque no era su línea. Ahora están en la misma dirección.

Ahí le dejo mi respuesta. Haga con ella lo que usted entienda. La causa democrática cubana, como dice usted, hace mucho tiempo que está distraída con cosas así, donde la GESTAPO castrista ha hecho de todo esto un beneficio. Pero eso no hace que me quede callada.