BARACUTEY CUBANO

Por Angélica Mora
8 de octubre de 2009

Apuntes de una periodista

Texas – www.PayoLibre.com – Hugo Chávez bromeó que iba a ayudar a Irán a construir bombas nucleares. Lo pavoroso del chiste, es que no es chiste. Como esas bromas que hacen reír justamente porque están basadas en un hecho cierto, la nueva salida jocosa del Payaso de Miraflores hiela la sangre del que la analiza y se da cuenta de que es verdad.

"Chacumbele" soltó su gracia durante la pasada reunión de gabinete, televisada a todo el país. Así le gustan las cosas a Chávez. Que se sepan, para regocijarse en ellas aún más cuando son públicas. Porque, ¿cuál es la gracia de un chiste si no se cuenta?

Con esa malicia heredada de su Maestro cubano, Chávez le preguntó al ministro de Industrias Básicas y Minería, Rodolfo Sanz:

-¿Cómo está el uranio para Irán...para la bomba atómica?

La "salida" de Chávez hizo que todo el gabinete lo acompañara en las sonrisitas y más de uno no pudo contener una carcajada que le valdrá más tarde quizás un aumento de sueldo. Sanz, como buen acólito, sonrió de oreja a oreja.

El comentario tiene su profundo fondo de verdad y es una forma de tapar el hecho -ya público- que Irán está ayudando a "detectar" depósitos de uranio.

El otro chiste es que, como revelé en mi Apunte, El Hombre más Peligroso del Mundo, los iraníes no están "detectando", están "extrayendo" el uranio desde hace años, quizás desde el comienzo del gobierno de Hugo Chávez Frías. Mis fuentes en Venezuela me informaron de las actividades de extracción y salida del uranio nacional hace más de cuatros años y lo di a conocer oportunamente.

Chávez ha insistido en que todos los países deberían desistir de los programas de armamento nuclear. Pero, persiste en que Venezuela e Irán tienen derechos soberanos a llevar a cabo sus investigaciones, exploraciones y desarrollos nucleares pacíficos.

Sin embargo, el Presidente Hugo Chávez no ha podido explicar al Departamento de Estado de los Estados Unidos el hecho cierto de una posible transferencia nuclear entre Teherán y Caracas.

Chávez ha dado a conocer que seguirá adelante con los planes para desarrollar energía nuclear con fines pacíficos.

Ha machacado, una y otra vez por cadena nacional, que no planea enviar uranio a Irán, nación que -dice- tiene suficientes depósitos y no necesita importar. Sin embargo, otra cosa dice la realidad de más de cuatro años de salidas secretas de uranio desde el estado Bolívar en barcos y luego aviones con rumbo a Irán.

La última broma de Chávez de expresar "...van a comenzar a decir que estamos haciendo una bomba atómica..." es macabra, porque es una realidad.

Si el mundo no la ve así, va a ser demasiado tarde cuando la tome en cuenta y no va a ser, se los aseguro, motivo de risa.