sábado, mayo 15, 2010

CUBA: DE ROSAS Y DE ARMAS

DE ROSAS Y DE ARMAS





Por Julio Antonio Aleaga Pesant
Periodista independiente.
aleagapesant@yahoo.es


El Vedado, La Habana, 13 de mayo de 2010, (PD) La bella Naha Mint Muknas, canciller mauritana, se detuvo frente a la estatua de José Martí en la Plaza Cívica, miró de reojo a los periodistas y fotógrafos, y se adelantó a componer la ofrenda floral según indica el protocolo. Su extraordinaria visita de cerca de tres días y con detalles reservados, permitió la firma de acuerdos entre cancillerías para iniciar “contactos y cooperación bilateral”. Seguramente pronto habrá médicos y profesionales antillanos en condición esclava, trabajando en el país noroccidental africano.

Coincidiendo en el tiempo, llegó a La Habana, más discretamente, de hecho con visa de turista, la diputada española, Rosa Diez, líder del partido Unión Progreso y Democracia (UPyD). Con su combatividad característica, se reunió con las opciones presidenciables de España en la oposición, Oswaldo Payá, líder del Movimiento Cristiano Liberación, Elizardo Sánchez-Santacruz, portavoz de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional y por separado con Yoani Sánchez, la bloguera, Dagoberto Valdés, comunicador católico y las Damas de Blanco.

No contenta con su agenda, atacó directamente la política exterior de Miguel Moratinos, al que acusó de posesionarse en Cuba con el fuerte, abandonando a los débiles, lo que consideró equivocado e injustificado.

¿Pudo hacer Rosa Díez ese viaje a la isla sin el consentimiento de las autoridades? Es poco probable. La expulsión del diputado socialista español Luis Yánez, a principios de enero de 2010, marca la diferencia de lo que se pudiera argumentar como secuelas de la muerte de Zapata Tamayo. Una zona de la política exterior comienza a cambiar y esa es una señal.

( Rosa Diez )

Pero en las transiciones, los movimientos son complejos y el ascenso de más militares a la cúpula comunista indica otra tendencia del poder totalitario. La militarización del gobierno y una mayor presencia de militares en el escenario internacional, en especial en Venezuela, son representativas.

Es vox populi que los militares y civiles del ejército cubano, enviados a Venezuela, prefieren no ser destinados al Fuerte Tiuna, sede del Estado Mayor del ejército venezolano. De allí solo pueden salir los fines de semana y en grupos de varias personas.

Los secretos de los militares venezolanos son del conocimiento de las fuerzas armadas cubanas, denunció hace pocos días el General (r) Antonio Rivero, en protesta por la influencia castrista sobre el gobierno bolivariano.

En once años en el poder, Hugo Chávez compró miles de millones de dólares en armas rusas, cambió las leyes de la fuerza armada para modificar su operatividad y creó una milicia personal con civiles entrenados para una guerra asimétrica con el argumento de la invasión imperialista.

Según Rivero, los cubanos en cualquier lugar de Venezuela obtienen información mas allá de lo permitido en la carta magna venezolana en instancias que van desde el Comando estratégico operacional (nivel máximo de gestión) hasta espacios de planificación y dirección de inteligencia, ingeniería, comunicaciones y armamentos. Los oficiales cubanos no tienen mando de tropa, pero influyen en la FAN y en el área de inteligencia, dan instrucciones y aprueban el trabajo.

Por último y como prueba de las díscolas señales del actual gobierno, representantes de una veintena de países, según el diario Granma, participaron en el Seminario de Paz por la abolición de las bases militares extranjeras, que sesionó a principios de mayo en la ciudad de Guantánamo, a unos poco kilómetros de la estación aeronaval del ejército de los Estados Unidos en el territorio de la isla de Cuba.

El evento fue auspiciado por el Movimiento Cubano por la Paz y la Soberanía de los Pueblos (MCASP) y el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP). Según los funcionarios del aparato político comunista, el encuentro constituyó un escenario ideal par unir fuerzas en la lucha internacional por la eliminación de las injustas e ilegítimas bases militares. Entre las participantes se encuentra la Presidente del Consejo Mundial por la Paz, María Socorro Gómez.

Hasta la desaparición de la Unión Soviética en 1991, ese consejo fue una organización satélite de la URSS, encargada de realizar acciones a favor de las tiranías comunistas y en contra de las democracias occidentales, aprovechando su marco democrático.

La mayoría de los participantes integran las brigadas mercenarias que estuvieron presentes en la isla para los desfiles del primero de mayo. Además, hicieron bulto jóvenes extranjeros que estudian en la isla.