domingo, enero 09, 2011

El último suicida del Exilio cubano: Ramón Suárez Díaz ¨Ramoncito¨ Ex Delegado Provincial del P.D. 30 de Noviembre Frank País en Pinar del Río



Ramón Suárez Díaz ¨Ramoncito¨ Ex Delegado Provincial del P.D. 30 de Noviembre Frank País en Pinar del Río estuvo al menos una década como opositor dentro de Cuba; sufrió todo tipo de represiones de la tiranía Castrista, incluyendo la cárcel, pero el empujón hacia la muerte vino de algunos de sus ¨hermanos de lucha¨ en el Exilio con los que había trabajado estando él en Cuba, que no fueron capaces de conseguirle en EE.UU. un trabajo para que ganara el sustento de él y de su familia.
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El último suicida:



Por Diana Margarita Ruiz.

No voy a hablar de cada uno de los suicidas conocidos, son tantos en este mundo que se torna insoportable!. Sólo me referiré al último:

Dicen que se ahorcó en Texas, después de haber vivido en el desierto, entre rejas por pensar distinto, cerca de un Aeropuerto, también al cantío de un gallo de la Terminal de los Coches de Caballos y bici-taxis, casi pegado al polo norte y en la ciudad del Sol.

Dicen que fue por no conseguir trabajo, pese a tantas luchas y sacrificios.Que se sintió impotente de que nadie le tendiera la mano y lo trataran como a un gusano, reptil o apestado, hasta los presuntos hermanos.

Dicen que no tenía fe, que Dios no estaba en su corazón, que se volvió loco cuando su última mujer lo dejó y regaló el hijo a una familia pudiente, y se fue a bailar desnuda a un gogó en Miami
.
Decían que tenía varias identidades, otros que lo casaron con una espía comunista para manipularlo, pues era la hija de un jerarca de los policías políticos, y en su casa ciertamente pasaron muchas cosas raras a los que conspiraban pacíficamente.

Sólo puedo asegurarles en esta existencia incierta, que lo conocí después que a su hermana, en San Juan y Martínez, en Pinar del Río, Cuba, en una actividad peligrosa. Sólo recuerdo el tren en que regresamos de alguna reunión clandestina, donde los petardos y las bombas sólo fueron de palabras y escasas letras. Creo que él estaba preso aún.

(Ramoncito, con gafas en la cabeza) en actividades de la Oposición en Pinar del Río)

Que lo vi organizando conferencias de prensa telefónicas con los de la otra orilla, celebraciones de Días de Los Derechos Humanos, repartiendo ayudas humanitarias después de algún ciclón…

Una vez fue simpático: me echaron a perder una actividad de la Asamblea para promover la Sociedad Civil, y dispersaron a todos los entonces hermanos. Y le dije: “Pues la vamos a dar tú y yo solos aquí, en el lugar programado”. Y sí, se la di a él sólo y después a cada uno por separado o en pequeños grupos.(Hasta se la di a un abogado infiltrado, que pronto lo rebelaron, en su propia casa. El hombre se asustó porque estaban su mujer e hijas cerca y parece que no sabían en lo que andaba, y yo tampoco sabía que no lo sabían).

Sólo puedo testimoniar que me llamó de Washington (Estado) dos o tres veces el año pasado, y me puso en contacto con un matrimonio de Testigos de Jehová cubanos, recién llegados como refugiados, que también estaban sin trabajo y que les habían predicado y tratado de salvar el matrimonio con los buenos consejos de la Biblia.

Pero finalmente decidieron huir del hielo con la esperanza de una vida mejor cerca del caimán y de El Ecuador,entre los otros cubanos amasijazos, sin abrigos ni calefacciones potentes, para hacer frente a las variaciones climáticas de “los días del fin”.

Sólo sé que nunca más me llamó en su probable desesperación.Hasta me había dicho que buscaría a los Testigos de Jehová de Miami para que lo ayudaran y le tendieran una mano a los de Washington que dejó atrás. Lo llamé una vez y fue inútil: el teléfono era el de la bailarina, que cortó toda comunicación futura con una frialdad insospechada.

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ALGUNOS COMENTARIOS DEJADOS

Anónimo ha dejado un nuevo comentario en su entrada "El último suicida del Exilio cubano: Ramón Suárez...":

Pobre muchacho.


Teresa Cruz
New Jersey

2 Comments:

At 12:44 a. m., Anonymous Anónimo said...

Pobre muchacho.


Teresa Cruz
New Jersey

 
At 3:56 a. m., Anonymous Anónimo said...

La vida es tan irónica las personas hablar de cosas q ni siquiera tienen idea de como son y cosas q no saben el valor centimental q pueden alcanzar

 

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