lunes, diciembre 19, 2011

Ha muerto Vaclav Havel, símbolo de la lucha contra el totalitarismo y solidario con los cubanos en la lucha contra el totalitarismo en Cuba

Tomado de http://cubadata.blogspot.com



Disidentes cubanos expresan pesar por la muerte de Vaclav Havel

DDC
Madrid 18-12-2011

Varios miembros de la disidencia interna expresaron este domingo pesar por la muerte del ex presidente checo Vaclav Havel, quien en numerosas ocasiones condenó al régimen de La Habana y respaldó a los activistas prodemocracia en la Isla.

El Movimiento Cristiano Liberación (MCL), que encabeza Oswaldo Payá, dijo que es un momento de "consternación" para los cubanos, "agradecidos con la solidaridad y el apoyo que siempre Havel brindo".

"Desde la eternidad estará enseñándonos y acompañándonos siempre en el camino pacifico, de reconciliación y de liberación que todos los hombres de buena voluntad en cualquier lugar del mundo y en cualquier tiempo emprenden sin odio pero sin miedo por sus derechos frente a los prepotentes", dijo el MCL en una nota publicada en el sitio en internet de Payá.

"Cuba ha perdido un gran amigo", afirmó por su parte José Daniel Ferrer, coordinador de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), en un audio publicado en la plataforma Háblalo sin Miedo. "Hoy es un día triste para los demócratas cubanos", añadió.

"La obra de Havel, su vida, ha sido motivo de inspiración para cubanos que como él amamos la libertad y la democracia (…) Havel vivirá por siempre en la memoria de toda persona de buena voluntad, de todo ciudadano amante de la libertad y la justicia", dijo Ferrer, uno de los 75 disidentes enviados a prisión por el régimen en la primavera de 2003.

Tras esa oleada represiva, Havel creó el Comité Internacional para la Democracia en Cuba (CIDC), al que se sumaron prominentes políticos, diplomáticos e intelectuales de Europa, Estados Unidos y América Latina, para apoyar a los activistas cubanos.

"El mundo pierde un símbolo de la lucha pacifica por la libertad" y "gana un símbolo del 'poder de los sin poder'", dijo la revista digital Convivencia en su cuenta en Twitter, recordando el título de un libro del expresidente checo.

(Dagoberto Valdés, director de la revista digital Convivencia, junto a otros amigos de Vitral en la Catedral de Pinar del Río al terminar la celebración por el X Aniversario de la revista Vitral en el año 2004 de la cual era su director fundador. Al terminar la actividad un consejero de la Embajada de la República Checa en La Habana le entregó a Dagoberto el retrato de Vaclav Havel. El día 1 de noviembre de 2004, Dagoberto Valdés fue recibido en Praga por el Ex Presidente Vaclav Havel. Foto y comentario añadidos por el bloguista de Baracutey Cubano, el cual se encuentra en esa foto)

Murió Havel "y nosotros apenas hemos comenzado a transitar por un camino que él emprendió hace varias décadas", afirmó por su parte la bloguera Yoani Sánchez.

Vaclav Havel, una de las figuras más importantes del fin del comunismo en Europa del Este, murió este domingo a los 75 años por complicaciones en su estado de salud tras una prolongada enfermedad.

Fue uno de los artífices de la "Revolución de Terciopelo", que derrocó pacíficamente al régimen comunista en 1989; presidente de Checoslovaquia y luego de la República Checa entre 1989 y 2003.

http://www.ddcuba.com/cuba
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Tomado de http://www.martinoticias.com

Cuando Havel rompió con Castro

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Jamás las puertas de la embajada de Praga en Cuba estuvieron cerradas para los opositores cubanos
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Por Álvaro Alba
martinoticias.com
18 de diciembre de 2011




Foto de archivo del expresidente de la República Checa, Vaclav Havel. Efe

Vaclav Havel fue el presidente checo que rompió con el régimen de Fidel Castro de una manera completa y definitiva. Lo hizo no más asumir el cargo de presidente de Checoslovaquia. Ni siquiera esperó a que se separaran las Repúblicas de Eslovaquia y Checa.

Havel asume el cargo de presidente de Checoslovaquia en diciembre de 1990 y ese mismo mes la cancillería checa anunciaba a la embajada cubana en Praga que se buscara otro país que representara sus intereses en Washington. Como fecha límite le dieron a las autoridades cubanas hasta el 31 de marzo de 1991 para que encontrara otro país que les representara.

En Enero de 1961, cuando rompieron relaciones diplomáticas La Habana y Washington, Suiza se encargó de los intereses de Estados Unidos en Cuba y Checoslovaquia de los cubanos en la capital estadounidense. Por 30 años representaron los checoslovacos los intereses del régimen de La Habana, hasta que llegó Vaclav “y mandó a parar”.

En marzo de 1990, Checoslovaquia fue uno de los países que patrocinaron la resolución de condena al régimen de La Habana presentada en la Comisión de Derechos Humanos de Ginebra por violar los derechos humanos.

Los representantes diplomáticos checos siempre han mantenido contacto con los opositores y disidentes cubanos. Jamás las puertas de la embajada de Praga en Cuba estuvieron cerradas para los opositores cubanos. Siempre fueron invitados estos a las recepciones y fiesta que se realizaban por las fechas nacionales.

En el verano caliente de 1990, cuando varias embajadas occidentales eran ocupadas por cubanos desesperados por salir del país, la sede diplomática de Praga no fue la excepción. Un grupo de cubanos pidió asilo en ella, para después abandonarla. En el discurso del 26 de julio de 1990, Fidel Castro se quejó del trato que los checos ofrecieron a los cubanos allí refugiados, debido a que consumieron “salchichas y cervezas”, lo que consideró “una fiesta”.

Durante tres años consecutivos, 1999, 2000 y 2001 la Republica Checa presentó ante la Comisión de Derechos Humanos de Ginebra la resolución de condena a Cuba como un país donde se violaban las libertades fundamentales del hombre y los derechos humanos. En las tres ocasiones el gobierno de La Habana fue señalado por la mayoría de los miembros como violador.

La sede diplomática checa en Cuba, en la Avenida Kohly y 41 y 43 en Nuevo Vedado, fue objeto de un acto de hostigamiento organizado por las autoridades en abril del 2000, tras la resolución de Ginebra contra la violación de los derechos humanos en la isla. Según La Habana, unas 100 mil personas desfilaron frente a la embajada checa protestando por la autoría de la crítica hacia Cuba en la Comisión de Derechos Humanos.

No faltaron en la prensa cubana los ataques a Vaclav Havel, donde Pedro de la Hoz, un periodista de Granma, calificó al presidente checo en el 2000 de “intelectual mediocre”.

Y es que Havel, cuando dejó la presidencia checa en febrero del 2003, siguió vinculado con el proyecto de democracia hacia Cuba. Y lo hizo, según declaró, porque en esos días que abandonaba el Castillo de Praga, en Cuba detenía y condenaba a 75 opositores. Fue entonces que se lanza a la fundación, en septiembre de ese mismo 2003, el Comité Internacional por la Democracia en Cuba (ICDC), con sede en Praga.

Para el 2004, se organizó en Praga la primera conferencia. En el ICDC logró unir Havel a ex mandatarios con experiencias en democracia, transiciones e interesados en una futura cuba democrática, como de España (José María Aznar), Costa Rica (Luis Alberto Monge), Uruguay (Luis Alberto Lacalle), Bulgaria (Filip Dmitrov), El Salvador (Armando Calderón Sol), Letonia (Mart Laar), Chile (Patricio Aylwin, Eduardo Frei), Nicaragua (Violeta Chamorro), Guatemala (Virginio Cerezo) y Hungría (Arpad Goncz).

El ICDC simposios, conferencias y plenarios sobre temas de derechos humanos, democracias y transiciones enfocados en Cuba en varias ciudades del mundo, como Berlín, Bruselas, Fort Lauderdale, Viena, Buenos Aires, Tallin, Ciudad México.

En septiembre del 2002 visitó Miami; era su última visita como jefe de Estado a los Estados Unidos y la primera a la Florida. En el discurso pronunciado en la Universidad Internacional de la Florida (FIU), explicó porqué la elección del Estado sureño. “Soy yo quien ha elegido Florida y lo he hecho para saludar, desde aquí, a todos los cubanos, es decir, a los que viven aquí y también a los que tienen su casa en la isla”.

Nunca faltó su firma para denunciar los arrestos a opositores cubanos. Y entendía mejor que nadie las tácticas de hostigamiento y represión que se ven en Cuba. En mayo del 2006, escribió en la prensa internacional un artículo titulado “El discreto terror de Fidel Castro”, donde expuso la alevosía de los actos de repudio, que ocurren constantemente en La Habana y decía: “Nunca debemos olvidar a las víctimas aparentemente anónimas de los ‘actos de repudio’ de Castro”.

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Fallece Vaclav Havel, icono de la 'Revolución de terciopelo' checa
euronewses



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Tomado de http://cafefuerte.com/


Ha muerto Vaclav Havel, símbolo de la lucha contra el totalitarismo



Por WILFREDO CANCIO ISLA
18 December 2011


Havel falleció este domingo en Praga a causa de complicaciones cardiorespiratorias tras una prolongada batalla contra el cáncer, y según dijo su asistente Sabina Tancevova, murió mientras dormía en su casa. Había estado hospitalizado varias veces este año y era un sobreviviente de cáncer de pulmón desde 1996. Tenía 75 años.

Dramaturgo de reconocida obra, intelectual de múltiples talentos y figura emblemática de la batalla contra el comunismo en el siglo XX, Havel encabezó la Revolución de Terciopelo que dio al traste, sin violencia, con el carcomido régimen de Checoslovaquia en 1989.

Su llegada a la presidencia de Checoslovaquia no fue la decisión apresurada de un movimiento social para catapultar a un héroe emergente. Havel encabezó los cambios en su país con el aval de una ejecutoria de radical oposición a los desmanes del socialismo real de tufo estalinista, impuesto en la nación centroeuropea a puro tanque e infantería soviéticas.

Su clarividencia política lo había situado en 1968 junto a las reformas impulsadas por Alexander Dubcek, y las que terminaron con la intervención de las tropas soviéticas y el aplazamiento de una transformación que los checos sabían inevitable.

Havel acababa entonces de graduarse de la Escuela de Arte Dramático de la Academia de Bellas Artes de Praga, luego de pasar el servicio militar y darse a conocer con el Teatro de la Balaustrada como autor y director de dos obras que la crítica anunció como prometedoras: La fiesta del jardín y Memorandum.

Una apuesta por la libertad

Pero el dramaturgo y hombre de teatro que siempre fue apostó desde entonces por las libertades y los derechos individuales de sus contemporáneos. Y lejos de sumarse a las huestes del arte oficial, se puso al frente del Club de Escritores Independientes en la Primavera de Praga y desarrolló un intenso activismo antisoviético que terminaría por enviarlo a la lista de las prohibiciones desde 1969, obligándolo a abandonar la capital checa y a sobrevivir en el ostracismo en la ciudad de Trutnova.

(El intelectual y político checo Vaclav Havel (1936-2011))

Sin embargo, no descansó en su empeño democratizador y nacionalista. Fue promotor y portavoz de la Carta de los 77, una iniciativa de amplia resonancia internacional con la firma de 300 prestigiosos intelectuales que pedían la democratización del régimen comunista.

Nunca antes una declaración pública de intelectuales tuvo tanto efecto movilizador contra los cimientos del poder comunista. La Carta 77 se convirtió desde entonces en un ejercicio modélico para documentos similares en otras latitudes del mundo sometido.

Cuando en 1978 creó el Comité para la Defensa de los Injustamente Perseguidos (VONS) con el propósito de llevar a vías de hecho las reivindicaciones de la Carta 77, el poder checosoviético no pudo permitirle más: lo mantuvo bajo arresto domiciliario y lo sentenció a cuatro años y medio de prisión.

Pero Havel no se cansó. Su biografía es la de un hombre que nunca se cansó a pesar de los contratiempos y las soledades. Estuvo cuatro veces en prisión por razones políticas. Y desde la cárcel no dejó de escribir ni de colaborar con la prensa opositora.

Del encierro surgieron las emotivas Cartas a Olga, canto de sensibilidad y esperanza en horas díficiles: “Esa necesidad nuestra, irreprimible, de trascender los horizontes situacionales, de cuestionar, conocer, explorar, entender, buscar la esencia de las cosas -se cuestionaba el escritor en la soledad de una ergásstula- ¿qué otra cosa es esa necesidad sino otra de las formas de aquel anhelo interminable por recobrar la integridad perdida del ser, aquel anhelo del yo de regresar al ser? ¿Qué otra cosa es sino ese anhelo intrínseco de despertar al propio ser oculto, adormilado, olvidado tantas veces, y a través de él alcanzar aquella plenitud e integridad de la existencia que nuestra intuición nos permite vislumbrar?”

En primera fila


Cuando los estertores del comunismo se extendieron por Europa tras la caída del Muro de Berlín, en 1989, tomó nuevamente el camino de la vanguardia. Havel fue arrestado en enero en una protesta y liberado pocos meses después tras una avalancha de reclamos. El monigote de Gustav Husak se tambaleaba con el oleaje de los estudiantes en las plazas y calles.

Mediante el Foro Cívico Havel aglutinó las fuerzas que dieron la estocada final al régimen comunista.

El 29 de diciembre de 1989, fue el elegido como el primer presidente democrático de Checoslovaquia tras una larga noche de 50 años de ocupación nazi y autoritarismo comunista.

Como líder y presidente, Havel condujo un ejemplar proceso de transición democrática en la nación checoslovaca.

Si algún país de Europa del Este logró transitar, con admirable estabilidad, del socialismo soviético a un sistema democrático multipartidista, ese fue Checoslovaquia. Los resultados económicos, políticos y financieros del país -alcanzados sin grandes traumas sociales- fueron ejemplo para sus ex compañeros de viaje, y una bofetada para el inamovible socialismo tropical. Pero en La Habana nadie quería -todavía no quieren- escuchar ni ver.

A la lúcida conducción política de Havel hay que atribuir indiscutiblemente esa transformación sólida y virtuosa de Checoslovaquia en la nueva era democrática.

La faena de un visionario

Fue un visionario en la faena de integración de Checoslovaquia en las instituciones europeas y apertura diplomática al mundo. Impulsó la inclusión de Praga a la OTAN, en 1999, y a la Unión Europea, en el 2004, y reforzó los vínculos estratégicos con Estados Unidos.

Pero esa alianza con Washington nunca la concibió como subordinación, sino como un pacto de amigos que entienden las discrepancias como parte de la negociación y el consenso. Deben recordarse sus polémicas en el tema de política exterior con el conservador Václav Klaus y su postura opuesta al embargo como vía de presión contra el régimen castrista.

El 22 de julio de 1992, dimitió como presidente de Checoslovaquia, inconforme con la irrevocable decisión de dividir a la república federativa en dos Estados independientes: el checo y el eslovaco. Havel había jurado fidelidad al Estado común de unos y otros, y entendió que lo mejor era retirarse momentáneamente de la conducción del país.

Tras la partición de Chevoslovaquia en la República Checa y Eslovaquia, fue electo a la presidencia de la naciente república checa, el 26 de enero de 1993. Un día después recibía uno de los golpes más dolorosos de su vida: la muerte de su esposa y compañera de mil batallas, Olga Splichawba-Havlova.

Havel presidió la República Checa por dos períodos hasta el 2003, cuando su salud se agravó por problemas en el colon. Entonces entregó el poder a su archirrival político Vaclav Klaus, aunque no dejó ni un minuto de continuar sus labores prodemocráticas y cívicas tanto en su país como en la arena internacional.

La muerte de Havel es una noticia tremendamente dolorosa para todos los cubanos, en Cuba y en la diáspora.

No solo por su trascendencia simbólica para la defensa de los derechos humanos y las libertades ciudadanas, sino por su liderazgo, de viva voz y acción, en los esfuerzos internacionales por una Cuba democrática que él se encargó de legitimar en los últimas dos décadas.

El poder de los sin poder

Para muchísimos cubanos que soñaron con reformar el socialismo tropical, un texto como El poder de los sin poder (1978) constituyó una pieza de relecturas obligadas en los años de la perestroika y la glasnost soviéticas.

Como presidente de Checoslovaquia, Havel fue un importante puntal del movimiento disidente cubano, que contó desde un primer momento con el respaldo de los diplomáticos checos asignados a la isla.

De ahí las múltiples tensiones que distanciaron las relaciones entre La Habana y Praga en los años 90, y que mantuvieron el vínculo diplomático bilateral en el nivel de encargados de negocios. Algún día cuando se haga la historia completa del acontecer cubano de fines del siglo XX tal vez saldrán a la luz los pormemores del compromiso y el respaldo que los diplomáticos checos dieron a los opositores en Cuba, por encargo directo del propio Havel.

Bajo la presidencia de Havel, Checoslovaquia dejó de jugar el rol de representante de los intereses de Cuba en Washington, como ocurría desde 1961. Fue también la delegación checa la que presentó las resoluciones de condena a Cuba que lograron aprobarse en la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas entre 1999 y el 2001.

De ahí también el profundo rechazo y las distribas de Fidel Castro contra Vaclav Havel.

Ante la oleada represiva que envió a la cárcel a 75 pacíficos disidentes cubanos en el 2003, Havel no vaciló en levantar su voz para denunciar los atropellos en la isla. La Primavera Negra cubana tomó su nombre de aquella Primavera de Praga que entusiasmó a tantos cubanos y que significó la última auténtica clarinada del socialismo por retomar una senda democrática.

Havel creó ese año el Comité Internacional para la Democracia en Cuba (CIDC), que nucleó a personalidades internacionales en la lucha por un cambio en la isla.

Fue también promotor del Fórum 2000 y de la Fundación Europea para la Democracia, espacios para impulsar las libertades y el espíritu democrático alrededor del mundo.

En el 2002 visitó a Miami para reunirse con ex prisioneros políticos cubanos y recibir el título de Doctor Honoris Causa por la Universidad Internacional de la Florida (FIU).

“Hay una sola cosa que no admito: que por principio no tenga ningún sentido intentar conseguir cosas buenas”, respondió Havel en una reflexiones éticas de 1991, cuando alguien lo identificó como un soñador que intentaba transformar el infierno en paraíso.

Y eso fue acaso lo que hizo de Havel el luchador incansable, el hombre que asumió la responsabilidad social como destino.

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