BARACUTEY CUBANO

 
LES CONFIESO: ESTE SOY YO. 

Por Esteban Fernandez

20 de abril, 2021

No me miren como un maestro, ni como un historiador, ni inclusive como un escritor, soy simplemente un cubano estudioso de la problemática que padece nuestro país de origen durante más de 62 años ... Ni me creo un patriota, ni un combatiente, sólo he adquirido conocimientos los cuales me han llevado a ser un acérrimo enemigo del régimen imperante en Cuba desde hace muchísimos lustros ...

  Y lo que sé, lo que he aprendido, se los transmito a ustedes, día a día, mediante toda trinchera que me ceda un espacio. Sin cobrar nada por ello. Y si otros reciben subsidios ("grants") eso me resbala, no es necesaria mi critica, ni participo en ninguna piñata, porque sé que ellos mismos se chotearan si no producen hechos contundentes ... 

 No incito a nadie a hacer nada que yo no haya hecho y mucho menos que no esté dispuesto a hacer. No admito polémicas, ni discusiones, distancia y categoría. Considero, como el padrino Vito Corleone, que él que hable de diálogo con el enemigo es un traidor. Solamente indico los crímenes cometidos por la tiranía, desde el mismo 1959, como hice hace unos días con LA MASACRE DE COJIMAR. Ataco despiadadamente a los que han usurpado el poder en la Isla y a los que la han destruido. No soy un “capitán araña” ni le pido a nadie que vaya a la guerra, ni al pueblo de Cuba que se tire para las calles y derroque a la tiranía, aunque predico y sé que esta es la única forma de conseguir la libertad. 

 No creo en la lucha pacífica, pero admito que pueden existir compatriotas que de buena fe creen en esa forma de lucha contra la dictadura. Evito por todos los medios escribir nada absolutamente que bien pudiera ser reproducido en el Granma y en los organismos de propaganda del régimen. Yo no le doy municiones al enemigo. 

 Exalto los valores de la Cuba republicana que el castrismo oculta, pero sé de los errores de esa época, y dejo que otros los enumeren y los ataquen. Rechazo generalizar porque sé que cubanos buenos, regulares y malos han existido en todas las etapas de la historia de mi país. Y si -desde 1959- la Isla se ha visto plagada de esbirros, chivatos, envidiosos, asesinos, son solamente el resultado de un monstruo que desgraciadamente nació ahí.

  Si esa hiena hubiera nacido en Rawalpindi o su madre se hubiera realizado un aborto, los detritus inhumanos hubieran sido eternamente marginados. Soy absolutamente intransigente y sobre Cuba soy poseedor de la verdad, en eso no admito discrepancias, ni creo en la libertad de expresión que vaya en contra de mis creencias ni ideales. 

 Soy realista y soy ecuánime, no creo ni admito en mis predios optimismos injustificados y detesto el pesimismo rampante. Creo con todas las fuerzas de mi corazón en que Cuba será libre gracias a un imponderable, creo en la resurrección de Cuba igual que creo en Dios, sin parparlos. A Dios lo siento a Cuba libre la presiento.

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