lunes, diciembre 06, 2021

Video: ULTIMA HORA: Tony Oliva y Minnie Miñoso al Salón de la Fama de Grandes Ligas

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Invitado Especial: Salón de la Fama Cubano Tony Oliva | Swing Completo


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AmericaTeVeCanal41

Dec 6, 2021

Conversamos con el pelotero cubano Tony Oliva tras entrar al Salón de la Fama de las Grandes Ligas


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Despedida de ¨Tony¨  Oliva antes de salir de Cuba 

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Swing Completo Deportes TV

Hace solo unos minutos fue dado a conocer el resultado oficial de las votaciones sobre los nuevos miembros del Salón de la Fama de Cooperstown, histórico lugar al cual fueron exaltados dos excelentes peloteros cubanos: Tony Oliva y Minnie Miñoso

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ULTIMA HORA: Tony Oliva y Minnie Miñoso al Salón de la Fama de Grandes Ligas | Swing completo

(A la hora y 25 minutos se ve el video de cuando Tony Oliva recibe la llamada oficial de su inclusión en el Salón de la Fama de Cooperstown)


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Leonte Landino

Aug 30, 2019

El cubano Tony Oliva es exaltado al Salon de la Fama del Beisbol Latino junto a Bernie Williams y otras leyendas.  Participación en Beisbol Esta Noche y discurso en el Anfiteatro de Altos de Chavón en Casa de Campo, Republica Dominicana. 2012.

Salon de la Fama del Beisbol Latino - Tony Oliva


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Tomado de https://www.elnuevoherald.com/

¡Justicia en Cooperstown! Cubanos Tony Oliva y Orestes Miñoso son elegidos al Salón de la Fama 


Por Marino Martínez

Especial/El Nuevo Herald

5  diciembre 2021

El Comité de la Época Dorada (1950-69) honró la excelencia, rescató la historia y unió generaciones en un día histórico para el béisbol cubano, cuando este domingo los legendarios Orestes “Minnie’’ Miñoso y Tony Oliva fueron elegidos al Salón de la Fama del Béisbol de Grandes Ligas.

Para obtener la elección un candidato debe recibir al menos el 75% de las boletas. El matancero Miñoso sumó 14 para el 87.5% y el pinareño Oliva obtuvo 12 votos para alcanzar el 75%.

Con esta justa selección Oliva y Miñoso se unirán en el Pabellón de los Inmortales a sus compatriotas Tony Pérez que lo hizo por la votación tradicional, Martín Dihigo, Cristóbal Torriente, José de la Caridad Méndez y el empresario Alex Pompez que accedieron por el Comité Especial de las Ligas Negras. “Esto lo esperaba desde hace mucho tiempo, pues estar en el Salón de la Fama en Cooperstown es el sueño más grande que puede tener un pelotero’’, indicó Oliva. “También estoy muy feliz por la elección de mi compatriota Orestes Miñoso, que fue un gran amigo y uno de mis héroes’’.

Algún día, quizás no tan lejano, como honra eterna por el amor que sentían por el béisbol, por el coraje que tuvieron para enfrentar al odio dentro y fuera del terreno de juego, se tendrá que hacer para todos ellos, dignos peloteros superestrellas en todos los países que actuaron, un monumento en la tierra donde nacieron.

(Tony Oliva)

Junto a los dos nuevos antillanos también fueron elegidos por la Época Dorada el inicialista Gil Hodges y el lanzador Jim Kaat, ambos con 12 votos (75%). Oliva, Miñoso (familia), Jim Kaat y Gil Hodges (familia) se unirán en Cooperstown el próximo 24 de julio con los jugadores elegidos por la Asociación de Escritores de Béisbol de América (BBWAA), cuya votación se anunciará el 25 de enero. Los elegibles por primera vez incluyen a David Ortiz, Ryan Howard, Tim Lincecum y Alex Rodríguez. Los peloteros con sospechas de usar esteroides Barry Bonds y Roger Clemens estarán en la boleta de la BBWAA por última vez. La carrera de Tony Oliva Oliva merecía desde hace mucho tiempo estar en el Salón de la Fama por haber sido uno de los grandes bateadores de su época que combinaba promedio, poder y velocidad. Lo merecía porque sus estadísticas fueron de las mejores en sus primeras diez temporadas y se detuvieron debido a una seria lesión de su rodilla que lo obligó a pasar cinco veces por el quirófano.

Nació el 20 de julio de 1940, en Pinar del Río, Cuba. En 1960 fue firmado por el buscador de talentos Joe Cambria y enviado a México utilizando el pasaporte de su hermano Antonio, junto a otros 21 prospectos. De ahí vino su sobrenombre Tony, pues su nombre de nacimiento fue Pedro. Después de pulir sus virtudes naturales en Ligas Menores debutó en 1962 con los Mellizos de Minnesota en nueve juegos con .444 de promedio ofensivo y en 1963 lo hizo para .429 en siete juegos. En 1964 ganó el título de bateo con .323, liderando el circuito con 217 imparables, 43 dobles, 109 carreras anotadas y 374 en total de bases, sumando 32 jonrones y 94 remolques. Por su formidable labor fue elegido Novato del Año de la Liga Americana. En la historia de las Grandes Ligas solamente el japonés Ichiro Suzuki en 2001 con los Marineros de Seattle (242), Lloyd Waner en 1927 (223) y Jimmy Williams en 1899 ambos con los Piratas de Pittsburgh (220), pegaron más incogibles que Oliva en la temporada de novato.

Además de ganar el premio de Mejor Novato, Oliva terminó cuarto para el Más Valioso sólo superado por Brooks Robinson, Mickey Mantle y Elston Howard. En 1965, se convirtió en el primer jugador en la historia en ganar el campeonato de bateo en sus dos primeras campañas, al finalizar con average de .321 y guiar los imparables con 185. Este año también terminó segundo para el MVP detrás de su compatriota y compañero de equipo el torpedero Zoilo Versalles.

En 1965, se convirtió en el primer jugador en la historia en ganar el campeonato de bateo en sus dos primeras campañas, al finalizar con average de .321 y guiar los imparables con 185. Este año también terminó segundo para el MVP detrás de su compatriota y compañero de equipo el torpedero Zoilo Versalles.

A la defensa ganó el premio Guante de Oro en 1966. Utilizando el número seis en su uniforme, Oliva obtuvo tres títulos de bateo, encabezó la Liga Americana en cinco ocasiones en imparables y cuatro veces en dobles. Integró el Equipo de Estrellas de manera consecutiva durante sus primeros ocho años (1964-71). En 1970, Oliva finalizó con promedio de .325, impulsó 107, pegó 23 jonrones con .364 de embasamiento, terminando segundo para el MVP detrás del jugador de los Orioles de Baltimore, Boog Powell.

En 1970, Oliva finalizó con promedio de .325, impulsó 107, pegó 23 jonrones con .364 de embasamiento, terminando segundo para el MVP detrás del jugador de los Orioles de Baltimore, Boog Powell.

En 1971, temporada donde obtuvo su tercera corona de bateo, sufrió una seria lesión en su rodilla jugando en Oakland, mientras trataba de capturar un batazo por su territorio. 

Después de este triste accidente pasó por el quirófano en cinco ocasiones, lesión que le resto poder, velocidad y concentración, forzando a que a partir de ese momento jugara como bateador designado, siendo el primero en esta función en batear un jonrón en 1973. 

Terminó su carrera con 220 jonrones, 942 carreras impulsadas, .304 de promedio y embasamiento de .353. Pero en sus ocho primeras temporadas antes de sufrir la lesión que afectó su carrera, Oliva mantuvo un promedio de .313, con 1,455 imparables, 177 jonrones, 278 dobles y un OPS de .867. En sus 11 primeros años bateó por encima de la marca de los .300 en nueve ocasiones. 

También estuvo ubicado como tercero en average y decimotercero en OPS en dicha etapa, liderando la Americana en incogibles cinco veces y ganando tres coronas de bateo. 

La carrera de Orestes Miñoso

Sencillez, decencia, calidad atlética y coraje fueron sellos de distinción de este jugador, que llegó a Estados Unidos sin hablar inglés en una época de discriminación racial y supo romper barreras para convertirse en una leyenda. Sí, en una leyenda, porque Miñoso fue la primera estrella latinoamericana en Grandes Ligas que inspiró a los restantes jugadores que le siguieron.

¿Y por qué Miñoso merecía desde hace mucho tiempo estar en Cooperstown? 

Lo merecía por haber sido mejor pelotero que muchos de los que están en el Salón de la Fama y porque sus estadísticas no fueron mejores debido a que se inició tarde en Grandes Ligas por la discriminación racial de su época.

El matancero no comenzó en Grandes Ligas a los 23 años como aparece en los libros, se inició a los 27. De haberlo hecho teniendo 21 o 22, como debió ser, sus imparables estarían cerca de 3,000, con más de 1,400 remolcadas, 1,500 anotadas, 250 jonrones y 300 bases robadas.

Pero este hombre, de virtudes humanas excepcionales y con quien tuvimos el honor de tener una sólida amistad, había sido discriminado en decenas de ocasiones por los respectivos miembros del Comité de Veteranos. 

Millones de personas desde Norteamérica, Latinoamérica y Cuba esperaban desde hace mucho tiempo por el momento en que su nombre se uniera al de sus compatriotas Martín Dihigo, Tony Pérez, Cristóbal Torriente, José Méndez y el empresario Alex Pompez.

¡Y qué mayor gloria para Cuba que hacerlo en esta ocasión junto a Tony Oliva!.

Nacido el 29 de noviembre de 1922 en la Finca La Lonja, en Perico, Matanzas. Desde muy joven cortaba caña y marabú en el Central España para ayudar al sustento de su hogar.

Al no poder jugar en el torneo de la Unión Atlética Amateur en una época donde en dicho circuito no permitían peloteros negros, actuó en la Liga Semiprofesional Pedro Betancourt con los equipos Partagás y Ambrosía. También con el Cuban Mining de Santiago de Cuba.

Se inició en el béisbol profesional en la Liga Invernal Cubana en 1946 con los Tigres de Marianao, equipo con el que estuvo hasta 1961, actuando en dos Series del Caribe (1957 y 1958). 

Tal fue su popularidad que en dicha época se escuchaba en las vitrolas y la radio en Cuba una canción de la Orquesta de Enrique Jorrín con un estribillo que decía: “Cuando Miñoso batea de verdad, la bola baila el “cha-cha-cha”.

Como persona, tal era su humildad que después de ser estrella del béisbol mundial en varias ocasiones organizaba un equipo con peloteros profesionales para visitar la tierra donde dio sus primeros pasos en el Central España, enfrentando en partidos amistosos a jugadores de la Liga Pedro Betancourt.

Antes de que Miñoso jugara en Grandes Ligas, el dirigente Alejandro Pompez nacido en Cayo Hueso y de padre cubano, lo firmó con los New York Cubans de las Ligas Negras de Estados Unidos, siendo una estrella en tres temporadas bateando para .314.

Luego de que en 1947 Jackie Robinson se convirtiera en el primer negro en Grandes Ligas con los Dodgers de Brooklyn en la Liga acional y Larry Dobe en la Americana con Cleveland, Miñoso fue reclutado con los propios Indios en 1949.

Pero este equipo sólo le dio oportunidad en 16 turnos al bate y lo envió a los Medias Blancas de Chicago, donde comenzó en 1951, siendo elegido ese mismo año para el Juego de Estrellas junto a su compatriota el pitcher Conrado Marrero y el torpedero venezolano Alfonso “Chico’’ Carrasquel.

(Orestes Miñoso)

El número 9 de los Medias Blancas finalizó su carrera conjunta de Grandes Ligas y Ligas Negras con promedio de .299, sumó 2,110 imparables, 195 jonrones, impulsó 1,093 carreras, embasamiento de .387, slugging de .461, OPS de .848, anotó 1,225, pegó 365 dobles, 95 triples, recibió 850 pasaportes, robó 216 bases y sólo se ponchó en 584 ocasiones en 7,048 veces al bate (1 cada 12 turnos). 

A la defensa conquistó tres premios Guantes de Oro como jardinero izquierdo, participando en nueve Juegos de Estrellas con ocho actuaciones en el diamante y una Serie Mundial de las Ligas Negras en 1947, que con su promedio de .333 (21-7) ayudó a la victoria de los New York Cubans. 

Por su brillante trayectoria y su comportamiento ejemplar, Miñoso se convirtió en una figura emblemática en Chicago. Su nombre está en el Salón de la Fama de los Medias Blancas, su número se encuentra retirado del equipo y en el estadio se construyó una estatua con su figura.

Fue golpeado por envíos de los lanzadores en 192 ocasiones, muchos fueron con malas intenciones por el racismo que imperaba en la época. Sin embargo, el cubano evitaba cualquier problema por considerar los pelotazos como parte del juego. Jamás se alejó del plato por temor a que lo golpearan y cuando sucedía caminaba hacia la inicial para luego intentar robarse una base para ayudar a su equipo. 

Tan buen pelotero fue Miñoso que el mánager de los Yankees de Nueva York y miembro del Salón de la Fama, Casey Stengel, dijo del cubano lo siguiente: “Ojalá lo tuviera en mi equipo, si así fuera no me preocuparía por no contar con Joe DiMaggio. Tenerlo sería como sumar dos o tres jugadores plasmados en un solo esqueleto humano”. 

(Orestes Miñoso y ¨Pito¨Abreu¨)

Además de jugar en Cuba, en Grandes Ligas y en Ligas Negras, Miñoso actuó en los torneos de México, República Dominicana y Ligas Menores. 

Orestes Miñoso murió en 2015 sin lograr su sueño de verse inmortalizado en vida. Pero, aunque ha sido tarde para él verlo, al menos llegó el momento de que su nombre esté ubicado donde siempre ha merecido: entre los inmortales del deporte de las bolas y los strikes. 

Un comité separado de 16 personas de la Época Inicial del béisbol también se reunió para considerar candidatos anteriores a 1950. Su boleta incluyó siete de las Ligas Negras: John Donaldson, Bud Fowler, Vic Harris, Grant “Home Run” Johnson, Buck O’Neil, Dick “Cannonball” Redding y George Scales. A ellos se unen Bill Dahlen, Lefty O’Doul y Allie Reynolds. Este Comité eligió a dos jugadores: Buck O’Neill y Bud Fowler.


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