BARACUTEY CUBANO

Las Damas de Luto

Publicado el 05.11.2005 13:34

Por Vicente R. Gutiérrez Santos

Estamos presenciando el reconocimiento de la sociedad mundial, especialmente la europea, hacia las Damas de Blanco, mujeres cubanas que por sus esposos, hijos, padres o hermanos presos como disidentes políticos, están sufriendo las mezquindades de la tiranía castrista. Felizmente, aún sus seres queridos siguen vivos, a pesar del duro presidio político de las mazmorras comunistas.

Esta experiencia data desde la época de Stalin, sucesor de Lenin. Quien las haya vivido sabe percibir qué pasa por el pensamiento de estos hombres que en una etapa de sus vidas han afrontado la bajeza de sus carceleros y la fortaleza de pensamiento de sí mismos, aspecto que posiblemente no hubiese estado nunca sometido a tan fuerte opresión por representantes del gobierno impuesto - jamás votado por el pueblo - dando escape a esos ruines instintos del ser humano, protegidos por la tiranía de un sistema acusado por más de siete décadas a nivel mundial y casi medio siglo a nivel del Archipiélago Cubano en el corazón del Caribe.

Lo que aún no se concibe es la admisión de un sistema enemigo de la humanidad que pueda prevalecer tanto tiempo sin interrupción por organismos como la ONU o regionales como la OEA o la UE. Los ciudadanos amantes de la Democracia se preguntan dónde radican los mecanismos de defensa de los ataques brutales de sistemas totalitarios como el castrismo desde Enero, 1959.

Al Parlamento Europeo y a sus presidentes de la UE hay que reconocer y agradecer los dos premios Sajarov concedidos. Hace tres años a Oswaldo Payá Sardiñas, fundador del Movimiento Cristiano de Liberación y ahora en el 2005 a las Damas de Blanco por la lucha de David contra Goliat, por el uso del pacifismo contra el terrorismo de Estado, por la lucha a favor de los Derechos Humanos, por la supuesta defensa de los principios democráticos.

Cada época ajustada a su momento histórico debe ofrecer su diferenciación con respecto a otras que han pertenecido al mismo proceso como es este caso. En otros países estos colectivos han recibido su reconocimiento, como es el caso de las Madres de Mayo, en la capital de Buenos Aires. La mujer es una prolongación, pero también un compromiso compartido con sus familiares encerrados y colocados a la mayor distancia posible como genuina demostración de los malos instintitos de sus aprehensores. La mujer ha entrado en el siglo 21 con un coraje que las destaca y muchas veces los valores del hombre han estado reforzados por ellas. Ahora pienso en el proceso venezolano y las mujeres que están emergiendo en la lucha contra el dictador populista que pretende seguir el camino de su socio del Caribe. De ahí la fusión conocida por Venecuba o Cubazuela. Ambos gobernantes totalitarios se complementan con la experiencia y poder económico (gracias a la OPEP) para trazar nuevos sueños de bolivarismo y martianismo, sin comprender que ellos pensaban y actuaban en sus escenarios del siglo XIX, en sus principios por Simón Bolívar y en sus finales por José Martí.

El proceso de Cuba no es tan lejano. Está mucho más próximo. Aún viven las generaciones que fueron testigos de la súbita transformación, al estilo iconoclasta, en función de la personalidad del Máximo Traidor que impulsó una revolución traicionera, engañando a su pueblo y colocando las cadenas que su maestro Lenin ofreció romper a su pueblo ruso bajo el zarismo. Castro empezó fusilando con la ayuda del argentino Guevara, en la fortaleza de La Cabaña, con tiro en la nuca muchas veces, incluyendo a un adolescente de 16 años. Estos ejemplos, bajo la pasión fanática, fueron seguidos por el ejército de Guerrilleros en el Poder. Después se oficializó el Paredón para eliminar a aquellos combatientes que pretendieron recuperar la revolución traicionada.

Hablando de mujeres me acuerdo de las madres de Humberto Sorí Marín, Rogelio González Corzo (¡Viva Cuba Libre, Viva Cristo Rey!), Virgilio Campanería, Carlos González Vidal y Pedro Luis Boytel, de las esposas de Domingo Trueba (¡Tiren cobardes!), Rafael Díaz Hascom, Manuel Puig, Francisco de la Noval, Marcial Arufe (asesinado junto con su esposa), etc, etc. No olvidemos que han sido miles.

Felizmente, ya existen las listas obtenidas por el Dr. Armando Lago y sus colaboradores. Y los que salvaron sus vidas, pero sacrificaron buena parte de ellas con presidios de extensa envergadura (más de 15 años) como Lino Bernabé Fernández, Santiago Echemendía, Telesforo H. Fernández, Alberto Muller, Antonio Valdés-Rodríguez, Andrés Cao, José Ramy, Agustín Lanza, etc, etc, etc.

También estamos hablando de 60,000 presos políticos, no disidentes, sino luchadores en contra de la revolución a principios de los años 60 por creer que se podía aún rescatar. El marxismo cierra todas las puertas y la inmolación personal surgió. Aún recuerdo el mensaje de uno de los incluidos en la relación de fusilados antes de marchar al juicio: "No abandonen la lucha, Vicente. “La Patria lo necesita. Rezaré por ustedes".

Fue la época de las Damas de Luto. Una época muy difícil, imposible de afrontar ese mayor riesgo que hoy realizan las Damas de Blanco. Fue una época de cambio drástico, de un sistema de vida hacia otro miserable en la economía y en los principios de la sociedad. Existía el fanatismo.

Las mujeres y madres de los fusilados así lo atestiguan. Y no hablemos de las visitas a los presidios, de su escasa frecuencia y de la labor casera de preparar y llevar las "jabas" al penal.

Jamás se pudo utilizar un teléfono. La correspondencia funcionaba a nivel del 20%. Ambas generaciones han tenido que soportar el sacrificio cruel de las órdenes del gobierno totalitario. Para ambas mi cordial y patriótico reconocimiento extensivo a todos los que han participado en la Lucha contra el Castro-Comunismo. Confiamos en la ausencia de los hermanos Castro y en la Transición que surgirá en un día ya no lejano.

Vicente R. Gutiérrez Santos (*)
desde Madrid
vgspdc@yahoo.es
*CPA, Ciencias Sociales y Derecho Público. Masters en Management, Marketing y Finanzas. CEO y DG de Empresas filiales de Multinacionales en España, Profesor de Escuelas de Negocios.
Ex-presidente del Centro Cubano de España (Madrid).