BARACUTEY CUBANO

Por Armando F. Valladares *
Diario las Américas
Miami
Florida
E.U.
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Fidel Nuñez
Jefe de Buró
Latinoamérica
Dept. de Investigaciones
La Nueva Cuba
Noviembre 15, 2007

El título de este artículo es lo que casi seguro dirá Jean Ziegler, el enviado especial de la ONU a cargo del llamado Derecho a la Alimentación que recientemente estuvo en Cuba “inspeccionando” las cocinas de los cubanos…
Apostaría que declarará que en las dos cárceles que visitó se come mejor que en los restaurantes españoles.

Para entender la causa de estas declaraciones debemos preguntarnos por qué la tiranía castrista le permitió la entrada a la isla cárcel, por vez primera, a un relator especial de las Naciones Unidas.

A finales del pasado siglo en el año de l999, el gobierno cubano con el apoyo de naciones amigas como Libia, entre otras, organizó y llevó a cabo una campaña muy discreta pero efectiva en favor de Ziegler que tuvo los resultados buscados, pues éste fue nombrado por la ONU a principios del año 2000 al cargo que hoy desempeña.

Pero el apoyo de Cuba y otras dictaduras de izquierda se lo ganó Ziegler por su militancia ideológica. Es miembro del Partido Socialista y ha publicado numerosos libros, algunos de ellos responsabilizando al capitalismo de los males del mundo, también sobre la globalización y se hizo famoso cuando denunció a la Banca Suiza por esconder el oro y las fortunas que los Nazis robaron a los judíos.

En la década de los ochenta, propuso al gobierno suizo que invitara oficialmente al dictador y terrorista Kaddafi, a quien lo une una gran amistad. Fue uno de los creadores de un premio de Derechos Humanos que concedía Libia. En el l989 Ziegler, en contra de las criticas de los países libres por el cinismo de que Kaddafi concediera un galardón de esa naturaleza, trabajó en la creación y publicidad de ese premio alegando que “era un paso hacia la apertura”

Ese mismo año la agencia noticiosa UPI se refirió a Ziegler como miembro del Comité del Premio Kaddafi de los Derechos Humanos y Time Magazine lo cito además como miembro del jurado que premiaba a todos los asesinos y carniceros de sus pueblos.

Por todo esto Jean Ziegler no dirá en su informe sobre la visita a Cuba, que desde hace unos cuarenta y cinco años, el gobierno prohibió la leche para niños menores de siete años. No dirá que hace casi medio siglo el gobierno ha controlado hasta el azúcar y le impuso a la población una cartilla de racionamiento para vender alimentos que son una cuarta parte de lo que recibían los esclavos durante la colonia, tanto en calorías diarias como en proteínas. No dirá del sacrificio de los padres que durante años han renunciado a comer las pocas onzas de carne racionada para dárselas a los niños. Ni dirá que el precio de un litro de leche en el mercado negro o paralelo, es el salario de varios días de trabajo de un obrero.

Y les garantizo que en sus “observaciones” culpará al embargo norteamericano de todo lo que pueda culparlo. Y no estoy haciendo adivinaciones.

Acorde a la publicación “The Weekly Standard” Ziegler ha declarado que “los EE.UU. son “una dictadura imperialista” –cita textual- que entre “las muchas atrocidades que ha cometido en el mundo está “el genocidio contra el pueblo de Cuba”....

Como si todo esto no fuera poco para explicar su compromiso con la tiranía cubana, el mismo que ha tenido con la de Kaddafi, les diré que en el año de l964 el Che Guevara asistió a una conferencia sobre el azúcar en Ginebra y saben quién fue su chofer: Jean Ziegler.

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* Armando Valladares. Escritor, pintor y poeta. Ex-preso político. Fue Embajador de los EEUU ante la Comisión de los Derechos Humanos de la ONU con los Presidentes Reagan y Bush padre. Recibió la Medalla Presidencial del ciudadano. Autor del libro “Contra toda esperanza”, donde narra 22 años en las prisiones castristas.