ESTIMULAR ES DE HUMANOS
Estimular es de humanos
Por Tania Díaz Castro
LA HABANA, Cuba, julio (www.cubanet.org) - Estimular al prójimo es de humanos. Agradecer ese estímulo, mucho más. Con alguna frecuencia, los periodistas independientes cubanos que escribimos para CubaNet recibimos mensajes tan estimulantes que nos levantan en peso.
Con retraso, claro está, porque transitar por Internet en Cuba es casi un milagro, supe que el periodista y ensayista francés Jean-Francois Fogel, maestro de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano, cuyo propósito es crear una línea pedagógica dedicada a la calidad periodística, es un fiel lector de CubaNet y admirador nuestro. Así dijo en su blog hace ya algún tiempo.
Fogel, quien tiene la experiencia de haber escrito para la Agencia France-Presse, el diario Libération, el semanario Le Point y Le Magazine Littéraire, es además un buen conocedor de la isla de Fidel Castro. Ha escrito numerosos libros sobre literatura francesa, sobre América Latina y especialmente sobre Cuba. El régimen castrista lo calificó como persona non grata hace catorce años, tiempo que ha transcurrido sin que pueda visitarnos de nuevo.
Pero aún así, este colega francés asegura que disfruta de un paseo por la isla cada semana, cuando entra a la página de CubaNet. Él sabe, como lo saben muchos, que la prensa independiente no miente, ni exagera, ni pretende confundir a nadie, como repiten hasta el cansancio ciertos personajes del gobierno.
Ni siquiera se sorprendió cuando leyó un trabajo de Carlos Alberto Domínguez, donde se narra que un barrendero cubano está cumpliendo 22 años de cárcel porque robó un pavo de treinta libras y unos mangos en la finca de Raúl Castro.
Nadie podrá engañar jamás a nuestro amigo Fogel sobre lo que ocurre en Cuba. El sabe que como la batalla de los huevos no fue ganada, siguen racionados; que como no se pudo llenar la bahía de La Habana con la leche de la famosa vaca Ubre Blanca, los cubanos no pueden beber ni siquiera un vaso de leche al día; que la Ciénaga de Zapata no pudo ser convertida en tierra fértil para la caña; que los descontentos siguen jugándose la vida en el estrecho de Florida, en balsas precarias, cuando no conduciendo sobre el mar viejos camiones y autos norteamericanos de épocas inmemoriales.
Nada de lo que lee cada semana Jean-Francois Fogel en CubaNet le es ajeno o extraño. Como hábil descubridor barrunta la verdad de Cuba, aunque impere en ella una dura dictadura experta en ocultar las cosas.
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