viernes, enero 22, 2010

UNA FRASE MUY ÚTIL PARA LA TIRANÍA CASTRISTA

Nota del Bloguista

Hay un refrán o proverbio que dice ¨no se pregunta lo que se sabe ¨. En Miami siempre se supo que Tamargo había sido hombre de izquierda, antibatistiano y fidelista pero ya en 1960 se había dado cuenta del error de haber apoyado a Fidel Castro; en Miami no se ensaña contra los que se equivocaron y salvo que se tenga una misión asignada, envidia o posibles intereses económicos personales afectados, no se le está recordando a los demás los errores que millones de cubanos cometieron o permitieron con su pecado de omisión o de brazos cruzados o la salida del país ante el ascenso del Castrismo y su permanencia en el Poder. No es un secreto que Armando Pérez Roura apoyó con entusiasmo a la Revolución, pero sólo al Castrismo le beneficia el constante recordatorio de esos pasados para así tratar de neutralizar la labor antiCastrista de esas personas.

En Cuba es donde sería mucho más útil recordar que Agustín Tamargo en determinado momento también dió su apoyo ( que no fue absoluto ni incondicional) a Fidel Castro, y que su ¨radicalismo jacobino¨ estaba asociado con su pasión patriótica por Cuba, a la vez que se señale que muy tempranamente se dió cuenta de su error y con la misma pasión de siempre, se enfrentó con sus mejores armas, la pluma y la voz, a la tiranía que ayudó a instalar.
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UNA FRASE MUY ÚTIL


Por José Antonio Fornaris
Periodista independiente.
fornarisjo@yahoo.com



Managua, La Habana, 21 de enero de 2010 (PD) En una de las últimas “reflexiones” de Fidel Castro, en el año recién concluido (diciembre 14), pudo leerse lo siguiente: “En Miami, la contrarrevolución reclama tres días de licencia para matar revolucionarios, tan pronto se instaurara el gobierno de transición en Cuba que Bush exigía.”

El hombre que escribió eso es el mismo que ha asegurado que su salario como Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros era de 750 pesos mensuales (unos 30 dólares), que eso le alcanzaba perfectamente para vivir, y que no poseía ni un dólar, así que sus afirmaciones no deben ser tomadas muy al pie de la letra.

No obstante, la frase “tres días de licencia para matar” ha sido muy útil al régimen de La Habana. La utiliza desde hace varios años. Y no es ni por asomo una consigna de la “contrarrevolución” radicada en Miami,

Algunos aseguran que su autor fue el periodista Agustín Tamargo, que residió durante decenios en Miami, y que murió en esa ciudad en el año 2009.

Al parecer, Tamargo era un hombre apegado al radicalismo. En abril de 1959, en el artículo titulado “Los Chipojos”, publicado por la revista Bohemia, decía en las primeras líneas: “Abrámonos paso en medio de este mar abyecto de oportunismo, de ese Mississipi de guataquería que amenaza con ahogar a Fidel Castro, y digamos nuestra palabra. Sí, nosotros también estamos gozosos de que al fin haya libertad en Cuba”.

( Agustín Tamargo )

En otro párrafo, adelantándose a las disposiciones que luego Castro dictaría, abogó por: “(…) las nacionalizaciones de empresas de servicio público, como la de luz eléctrica y teléfonos, que además de estafar al cubano, lo humillan y escarnecen negándole el servicio.”

Y casi al final del artículo aboga por: “(…) la reorganización de todo el aparato burocrático del Gobierno, donde todavía imperan los batistianos, es cosa que no admite discusión. Todo ello, claro está, sin perjuicio de continuar juzgando y ajusticiando a los criminales de guerra de la tiranía, labor en la cual se ha perdido a nuestro juicio mucho tiempo, lo que está dando lugar a un peligroso surgimiento del espíritu de piedad o lastima en nuestro pueblo”.

No es nada extraño que un individuo que clamaba para que la maquinaria de muerte del recién instalado gobierno revolucionario trabajara más de prisa, haya solicitado –si es que lo hizo- “tres días de licencia para matar”.

La frase ha sido un exquisito plato para el régimen de La Habana. Lo extraño es que nunca le recordaran a Tamargo su anterior apoyo absoluto e incondicional a Fidel Castro, su radicalismo jacobino y su evidente identificación con las ideas de la izquierda de línea dura.

fornarisjo@yahoo.com